
Washington.- La peor parte de los efectos de la gran recesión que estalló hace cinco años ha sido superada, pero el repunte de los mercados financieros no se está traduciendo en crecimiento sostenido y empleo, sostuvo Christine Lagarde, directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI). Hemos evitado ya lo peor y el mundo económico no se ve tan peligroso como se veía, sostuvo.
Al reconocimiento de Lagarde sobre la lentitud en la recuperación del empleo se sumó este día el llamado de un grupo de países en desarrollo, en esta ocasión presidido por el secretario mexicano de Hacienda, Luis Videgaray, para que las naciones avanzadas tomen conciencia del efecto de sus políticas sobre la inflación y la estabilidad de los sistemas financieros en los llamados mercados emergentes.
Hemos evitado ya lo peor y el mundo económico no se ve tan peligroso como se veía, afirmó Lagarde, en una conferencia de prensa en la reunión de primavera del FMI y el Banco Mundial.
Sin embargo, aseguró, la recuperación de la economía mundial, que es desequilibrada entre regiones, y el repunte de los mercados financieros no se está traduciendo en crecimiento sostenido ni en crecimiento del empleo, que es lo que más importa a la gente.
Uno de los pendientes que deben ser abordados en el diseño de las políticas para hacer frente a la fase actual de la crisis, dijo, es la creación de empleo con equidad. Necesitamos crecimiento del empleo con equidad, sobre todo crecimiento del empleo. Se debe proteger a la gente que fue más afectada por la crisis y asegurarnos que el ajuste sea el más justo posible, añadió.
A casi cinco años del estallido de la crisis financiera –en el otoño de 2008– la economía marcha a tres velocidades, de acuerdo con Lagarde, que citó el informe de Perspectivas económicas publicado por el FMI el martes pasado.
Estas tres velocidades se refieren a los países que lo están haciendo bien, a los que están en vías de arreglarse y a los que todavía tienen un camino por recorrer, mencionó. Una economía a tres velocidades no sería suficiente para promover el crecimiento equilibrado y duradero”, dijo.
Lo que necesitamos es una recuperación a toda velocidad, a una sola velocidad, de la economía mundial, que lleve crecimiento sólido, sostenible y equilibrado, también inclusivo y muy arraigado en el desarrollo verde, añadió.
El Grupo de los 24 (G-24), que coordina la posición de los países en desarrollo sobre aspectos monetarios y de financiamiento del desarrollo internacional, llamó aquí a las naciones avanzadas a tomar en cuenta el efecto negativo que tienen las políticas que han adoptado para hacer frente a la crisis que estalló hace casi cinco años.
Reunido en la asamblea de primavera del FMI y el Banco Mundial, el Grupo de los 24 sostuvo que la política monetaria seguida por los bancos centrales de los países avanzados, que incluyen la disminución de tasas de interés e inyecciones de liquidez al sistema financiero, han tenido impacto sobre la inflación, volatilidad en los flujos de capitales y el precio de las materias primas, que afectan a las naciones en desarrollo.
El crecimiento en los países en desarrollo sigue fuerte, a pesar de la debilidad en el desempeño de las economías avanzadas, sostuvo el secretario mexicano de Hacienda, Luis Videgaray, al término de la reunión del G-24.