
Hay personajes que quieren representar el papel del padre José, “eminencia gris” de un monarca francés. En el gobierno de Aylwin lo fue Enrique Correa, en la derecha aspira a este honor el senador Pablo Longueira: nada más agradable que mandar a los que mandan.
Por lo demás, la tontería humana siempre le atribuye más poder a aquellos personajes que están tras bambalinas; hay casos de personajes ignorantes y grises, casi analfabetos, a quienes los tontos les atribuyen frases geniales, cuando no han hecho más que repetir los lugares comunes. No los mencionaré para no contaminar este escrito.
Pablo Longueira destaca por sus agudos análisis políticos respecto a una casta vulgar y mediocre que lo acompaña en la
El gobierno se encuentra en estado catatónico, al igual que la Concertación, con la diferencia de que la derecha debe seguir conduciendo el Ejecutivo hasta el año 2014, mientras que la Concertación puede firmar su defunción desde ya. Lamentablemente, nuestro presidente no tiene ningunas ganas de contentarse sólo con administrar o dormir la siesta en el trono presidencial, porque jamás aceptaría tener el papel de Emiliano Figueroa, de Juan Esteban Montero o de Carlos Ibáñez del Campo en su segundo período, nuestros famosos reyes holgazanes, sino que el presidente es la actividad misma: no puede quedarse nunca tranquilo y quiere tener el control de todo lo que ocurra. Esto de “las 24 sobre las 24” es completamente verídico, aun cuando el rendimiento sea nulo.
Pablo Longueira es a la
Confieso que me da un poco de vergüenza ver cómo su Excelencia le pide al profeta Longueira que le lea sus famosas láminas y que, además, se las explique. A veces pienso que sería más fácil que terminara por integrarlo al gobierno, como una especie de “primer ministro”, algo así como un dualismo – como ocurrió en el Imperio Romano o, en la actualidad, Rodríguez Zapatero y Pérez Rubalcaba, en España.
Al parecer, estamos iniciando una nueva etapa: un gobierno hegemonizado por la
La verdad es que queda poco tiempo para resolver estos enigmas políticos. ¿Será posible mantener la hegemonía de la
En todo caso, el golpe de Estado del evangelista y profeta Pablo Longueira, fue brillante y ha dejado con la boca abierta a toda la derecha, incluido su Excelencia.
Rafael Luis Gumucio Rivas
18/06/2011