El gerente de la División de Estudios del instituto emisor, Luis Oscar Herrera, matizó las luces de alerta que el subdirector del Departamento del Hemisferio Occidental del FMI, Miguel Savastano, planteó ayer en una conferencia que dictó en las dependencias del Banco Central, informó el diario La Segunda.
“En términos generales, las preocupaciones de este informe son similares a las que están en nuestro IPoM. Pero podemos mirar las cosas del lado optimista”, dijo Herrera y enumeró: “Nuestra región salió victoriosa de la recesión del 2009, por primera vez implementó políticas macroeconómicas contracíclicas, tuvo una contracción suave y creció al 6% el año pasado”.
Agregó que los sistemas financieros están en una posición saludable y en proceso de expansión, que los términos de intercambio son ventajosos para el crecimiento de la región, y que la liquidez internacional es abundante. Además, “el informe anticipa que a región va a crecer en torno al 4,5% el 2011 y el 2012, lo que es positivo”, acotó.
Junto con reconocer los riesgos en el horizonte, Herrera matizó la amenaza de sobrecalentamiento para la región que plantea el FMI. “Esta visión, al menos en el caso de la economía chilena, requiere ser matizada.
Ciertamente hay riesgos, pero el diagnóstico tiene que ser contingente con la evolución de los datos”, añadió.
Sobre la inflación, el primer síntoma de preocupación del FMI, dijo que si bien es evidente que los riesgos hoy día son mayores, la evidencia “de un sobrecalentamiento todavía es débil”.
Agregó que obviamente se requiere más cautela, “pero de ahí a considerar que hay un atraso evidente en la política monetaria hay un paso que hay que tener claro”.
Sobre el otro riesgo, la ampliación del déficit de cuenta corriente en la región, Herrera señaló que aunque se han ido ampliando, están lejos de los niveles peligrosos que se vieron en la crisis asiática. Recalcó, además, que hoy los países cuentan con mayores niveles de reserva.
Respecto de la tercera preocupación, la aceleración del crédito, dijo que se debe considerar la diversidad en la región: “Tenemos algunas economías, Brasil o Perú, que tienen tasas de expansión de crédito elevadas y otros donde las tasas son más moderadas. En el caso particular de Chile, la situación reciente no ha mostrado una crecimiento excesivo del crédito interno o la deuda externa”.
En el único punto que coincidió fue con la necesidad de que se mejoren los datos históricos del mercado de la vivienda en la región.
Herrera afirmó que en este contexto es claro que las políticas monetarias de los países de la región deben ir a un nivel neutral, aunque en las actuales circunstancias no es claro que es lo neutral.