El ex Secretario de Estado de Salvador Allende, Ricardo Lagos y Michelle Bachelet asegura que Ancalao tiene que actuar en la política nacional, no sólo en la política de Purén o en la política Mapuche, tiene que ser un líder nacional y, para allá va su camino.
El ex Ministro de Educación, Sergio Bitar presentó, recientemente, la segunda edición del libro “Mapuche: hijo de dos naciones”, del político Mapuche, Diego Ancalao Gavilán, oportunidad en la que el Secretario de Estado resaltó en cuanto al dirigente político de Purén que “lo más importante en los jóvenes es su educación por lo público, cualquiera que sea el partido en el que militen, si se interesan por la política y tienen orgullo de dedicarse a la política, eso es un plus y, eso lo tiene, Diego (Ancalao)”.
Según Sergio Bitar, militante del Partido por la Democracia (PPD), “Diego tiene raíz Mapuche y no desconoce sus raíces como Mapuche y, eso le da un plus. Él sabe que para resolver los problemas de su sector y representarlo tiene que actuar en la política nacional, no sólo en la política de Purén o en la política Mapuche, tiene que ser un líder nacional”.
Bitar, quien recordemos fue Ministro del ex Presidente, Salvador Allende –como Secretario de Estado en Minería-, de Ricardo Lagos –en Educación-, de Michelle Bachelet -en la cartera de Obras Públicas-, y ex senador por la Región de Tarapacá, asegura respecto de Diego Ancalao, vicepresidente nacional de la Izquierda Ciudadana, que “es súper bueno Diego. Además, tiene la inteligencia de hablar con mucha gente, porque hay que armar redes para poder tener fuerza y él las tiene y también, eso, le da un plus. A esto se suma, que es karateca y esa disciplina enseña a ser contemplativo, a no pelear y a contenerse”. Este aspecto, cabe destacar no es menor, particularmente, en medio de un ambiente político donde lo habitual y casi a diario es observar a los dirigentes políticos recriminarse unos a otros, caer en las rencillas y, en medio de esa batalla de intereses personales y partidistas, dejar de lado el interés de la ciudadanía.
Hay que señalar que en la obra, “Mapuche: hijo de dos naciones”, Diego Ancalao resume una serie de columnas, reflexiones y cartas publicadas en diversos medios de comunicación, creando una historia dónde es posible apreciar desde la crisis política, la indolencia de las autoridades y el grito de las comunidades Mapuche para no seguir postergadas. Esto último es, principalmente, lo que busca Ancalao y su libro, que desde su rol como un político joven, pretende canalizar las demandas ancestrales de un pueblo que, continuamente, a su juicio, es pasado a llevar y que por más que los políticos intenten avanzar, no logran entender las demandas como sólo lo puede hacer alguien que comparte su origen y sangre.