La jefa de gobierno alemán, Ángela Merkel, instó a Ucrania a avanzar en la formación de un nuevo gobierno y en una reforma de la constitución tras reunirse el lunes con dos líderes opositores ucranianos.
“El acuerdo sobre una amnistía para los manifestantes es un paso positivo. Ahora no hay que detenerse aquí. Hay que avanzar con fuerza en la composición”.
“La canciller aseguró que Alemania y la UE harán todo lo posible para contribuir a una salida positiva de la crisis”, añadió la jefa de gobierno después de reunirse con los líderes opositores VitaliKlitschko y Arseni Yatseniuk. “La situación continúa extremadamente tensa”, añadió Merkel.
Durante el encuentro, los líderes solicitaron a la canciller alemana ayuda financiera y sanciones contra el entorno del presidente ucraniano, Viktor Yanukovich.
“Nuestros socios europeos están dispuestos a apoyarnos”, dijo Yatseniuk, quien evocó una ayuda financiera de 610 millones de euros.
“Pienso que la Unión Europea y Alemania tienen mecanismos para introducir sanciones”, declaróKlitschko.
Rusia anunció poco después la entrega “esta semana” a Ucrania de 2.000 millones de dólares del plan de rescate acordado en diciembre, pero suspendido en espera de la formación de un nuevo gobierno en Kiev, según el ministro ruso de Finanzas, Anton Siluanov.
Según su entorno, Yanukovich podría anunciar a partir del martes el nombramiento de un nuevo primer ministro, un anuncio muy esperado por Moscú y Bruselas.
Ucrania vive una contestación sin precedentes desde que el presidente ucraniano rechazara a finales de noviembre un acuerdo de asociación con la Unión Europea para acercarse a Rusia.
Moscú, que empujó a Kiev a renunciar a ese acercamiento con la UE, acordó a Ucrania en diciembre un crédito de 15.000 millones de dólares, de los cuales ha entregado ya 3.000, y un descuento importante sobre el precio del gas ruso.
Los occidentales anunciaron por otra parte que preparaban una ayuda financiera para Ucrania, que está al borde de la quiebra, aunque reconocieron que tendrán dificultades para igualar la oferta rusa.