La construcción de la Memoria Histórica se desarrolla desde diferentes espacios, incluyendo algunas instancias institucionales las cuales han asumido también esta tarea gracias al impulso de hombres y mujeres presentes al interior de las mismas, sensibles a la temática de los Derechos Humanos. En Valparaíso la Unidad de Memoria del Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio es un ejemplo de esta preocupación.
Precisamente en el local del Ministerio de la Cultura, ubicada en Plaza Sotomayor de Valparaíso, el viernes recién pasado, dentro del ciclo “Lecturas con Memoria”, se realizó la presentación del libro “El Largo Camino en Búsqueda de Justicia”, de la Agrupación de Familiares de Ejecutados Políticos” (AFEP), donde se sistematiza el trabajo realizado por esta organización durante más de cuarenta años, desde su fundación en el año 1976.
En el lanzamiento del libro actuó como moderadora Francia Jamett, encargada de la Unidad de Memoria y Derechos Humanos del Ministerio de las Culturas, quien manifestó la importancia de ir aportando en el rescate de la Memoria y expresó que para la realización de esta actividad contaron con el apoyo del Parque Cultural de Valparaíso (Ex Cárcel) y la Casa de Memoria de Valparaíso.
El panel que presentó el libro estuvo compuesto por Alicia Lira, Presidenta Nacional de la Agrupación de Familiares de Ejecutados Políticos; Alicia Zúñiga, Presidenta de la Comisión de Derechos Humanos de Valparaíso y de la Agrupación de Ex Prisioneras Políticas del Buen Pastor; y de la compañera Gabriela Correa, ex dirigente y fundadora del Comité de Defensa de los Derechos del Pueblo CODEPU V Región.
En primer lugar hizo uso de la palabra ALICIA LIRA, quien expresó:
“Somos una organización creada en el año 1976 que agrupa a un número de mujeres que se reúnen primero para protegerse, compartir sus tragedias y solidarizar con aquellos hombres y mujeres que estaban en prisión. El compromiso que tiene hoy día la Agrupación es seguir avanzando en los temas de Verdad y Justicia, pero no solamente en lo que tiene que ver con la dictadura, sino que en democracia, porque no debemos olvidar que existen tres Detenidos Desaparecidos en este país , en democracia. Nos duele un José Huenante, un joven de 16 años que el 2005 fue detenido por Carabineros en Puerto Montt y hasta la fecha no dice dónde está ni entrega su cuerpo. También nos interesan los Movimientos Sociales que dignifican al hombre y a la mujer como personas, sin dejar de lado lo que significa dar espacio y dignidad a los migrantes en nuestro país”
Luego fue el turno de ALICIA ZÚÑIGA, quien se refirió al contenido del libro de la AFEP:
“Este libro muestra todo lo que ha significado esta lucha larga que está llena de tropiezos, de piedras en el camino y que ha significado poner en relieve la tenacidad incansable de quienes integran las Organizaciones de Derechos Humanos, quienes siguen luchando por terminar con la impunidad, porque la impunidad le hace un gran daño al alma nacional. La impunidad está presente en cada uno de los momentos que se vive y en este libro se detalla las incansables gestiones que se han hecho a través del tiempo. Además están las denuncias, el terminar con el Decreto Ley de Amnistía, el terminar con la Ley Antiterrorista, que a cada rato nos mueve y nos conmueve con lo que ocurre en el sur de nuestro país con lo que pasa con el Pueblo Mapuche. Esto también sucede con los trabajadores, con los estudiantes, es decir, hay una tremenda amenaza en contra de los Movimientos Sociales(…) Esta organización, junto a otras organizaciones de Derechos Humanos ha significado contar desde el año 76 en adelante con una importante red de apoyo a esta lucha por la Verdad y la Justicia(…) En este libro está registrada buena parte de la historia nuestra de los últimos 40 años, y es una parte importante que necesitamos que el conjunto de la sociedad conozca, que el conjunto de la sociedad entienda. También que sea un insumo para la formación de las futuras generaciones de nuestro país (…) Tenemos que seguir trabajando en contra de la impunidad y seguir trabajando para evitar la dispersión en el mundo de los Derechos Humanos.”
Por último GABRIELA CORREA expuso su punto de vista, manifestando:
“El libro nos muestra una historia viva que nos hace volver al pasado, pero que lo tenemos muy presente, más aún con lo que pasó estos días en el Cementerio de Playa Ancha donde se estaba escarbando la verdad en busca del sacerdote Woodward. Este libro nos lleva a escarbar ese pasado que algunos quieren que nosotros olvidemos, entonces es un libro que nos interpela a estar presentes en las luchas de hoy (…) Lo importante es pensar cómo traspasamos esta historia a las nuevas generaciones, para romper estos silencios de muerte impuestos por la cultura dominante, porque la dictadura de alguna manera sigue vive, porque la democracia no la conquistamos ni la logramos, sino que estamos en una permanente transición, ya que sigue la Ley Antiterrorista, sigue la represión brutal, siguen habiendo Desaparecidos en “democracia” como recordaba la compañera Alicia Lira(…) La pregunta que debemos hacernos es como nos rearmamos, como nos reinventamos, para seguir en esta lucha todas juntas, sin hegemonizar, para poner todas nuestras voluntades sobre la mesa y todas nuestra fuerza para seguir trabajando por Justicia, Verdad y en contra de la Impunidad.”
Como manifesté al iniciar esta crónica, es importante valorar todos los esfuerzos que se hacen para poder ir armando el rompecabezas de la Memoria Histórica, principalmente aquellos desarrollados a partir de las propias organizaciones de Derechos Humanos, de los Familiares y de los ex Prisioneros y Prisioneras Políticas, pero al mismo tiempo no hay que desechar otros espacios disponibles, incluyendo en este caso a las instituciones del Estado, sin desconocer las limitaciones que estos tienen, pero en donde existen compañeros y compañeras que han logrado posicionar el tema de los Derechos Humanos.
Guillermo Correa Camiroaga, Valparaíso 25 junio 2018