En los últimos días de la campaña por el ballotage se acabó el cantinfleo y se encendieron casi todas las luces de la ciudad. Casi.
Vino a Chile a adherir a la campaña contra Piñera uno que lo conoce bien -porque lo ha visto de afuera y desde su mismo nivel- el ex Presidente de Uruguay y dirigente del Frente Amplio de ese país, José (Pepe) Mujica. Fue un golpe político de Mujica.
José Mujica es un político prestigioso de la izquierda latinoamericana. Fue guerrillero tupamaru, estuvo preso largos años, fue candidato a Presidente y, electo Presidente, llevó adelante un gobierno progresista en su país. Y es figura del Frente Amplio, compuesto en Uruguay, por la izquierda al PC, por el PC, socialistas y una pequeña DC de izquierda.
Junto con apoyar a Guillier, sin atacar a Piñera, mandó mensajes claros a nuestro Frente Amplio: “Cuando nos jugamos al todo o nada, suele ganar el nada”. Habló en el acto final de Guillier.
En ese acto también estuvo presente Alberto Mayol, en una clara postura de apoyo a Guillier que no se frenó sólo en decir que votaría por él, como lo hicieron a tres días de la elección Sharp y Jackson, que se sumaron así a Beatriz Sánchez, y Boric, que, en un decir enredado contó que también votaría por Guillier “con condiciones”. ¿Cómo se marca un voto “con condiciones” evitando que sea anulado? No existe en la urna el voto “con condiciones”.
Para balancear la situación, Piñera sacó a luz un viejo video de Macri, el apoyo de Marlen Olivarí y tergiversó -para variar- una conversación tenida con un prestigioso médico.
El video de Macri no es novedad ni le sirve para sumar. Los chilenos que admiran a Macri ya votaron por Piñera o Kast en la primera vuelta, y están en el 44% que tiene ya Piñera en la segunda. Macri enfrenta hoy al movimiento social argentino en su intento por meter la mano al bolsillo a los jubilados,como lo hizo en el Chile de Pinochet el hermanito mayor de Piñera. También tiene, como Piñera, altas sumas de dólares en paraísos fiscales.
El apoyo de Marlen Olivarí era lógico y justo. La hermosa vedette, hoy también cantante, es amiga de una vedette, respetable pero no tan hermosa, que fue cuñada de Piñera, y que gozó del palacio presidencial de Viña del Mar.
Y el famoso médico Adams, el hombre de la “risoterapia”, respondió a Piñera que había publicado su apoyo: “Nunca le manifesté mi apoyo; no lo apoyo y no lo apoyaré”. Piñera no se rió.
Días finales con más luces que sombras.
Es posible la victoria sobre Piñera. La derecha la tenía ganada hace unas semanas pero parece estar perdiendo por cabeza.
La verdad, verdad, parecen venir tiempos mejores.
Las derrotas más reaccionarias siempre abren tiempos mejores.
Depende de nosotros.