El Pentágono estudia varios lugares en la costa occidental de Estados Unidos para desplegar nuevas plataformas anticoheteriles, en particular el sistema de Defensa de Área a Gran Altura (Thaad), destacan hoy medios de prensa.
La Agencia de Defensa Antimisiles (MDA) realiza las pesquisas correspondientes para ubicarlas en varios lugares en los estados de California y Washington.
El argumento de este proyecto es la ‘necesidad’ de enfrentar la supuesta amenaza del desarrollo de los medios balísticos de la República Popular Democrática de Corea (RPDC), cuyas autoridades aseguran que sus planes en este sentido tienen un carácter exclusivamente defensivo.
Al respecto, el congresista republicano Mike Rogers, integrante del Comité de Servicios Armados de la Cámara de Representantes, señaló que la MDA planifica instalar plataformas de lanzamiento adicionales en varios sitios aún no identificados, aunque están pendientes de aprobación los fondos para el proyecto.
Los expertos de la MDA valoran cuáles serán los lugares que cumplan los requisitos, en particular su impacto ambiental, dijo Rogers a la agencia noticiosa Reuters, pero no especificó cuáles son los lugares exactos que están dentro de estas evaluaciones.
Sin embargo, el subdirector de la MDA, Contralmirante Jon Hill aclaró que esa entidad no ha recibido la misión de ubicar los Thaad en la costa occidental norteamericana.
Por otra parte, el congresista demócrata Adam Smith expresó que el Gobierno del presidente Donald Trump considera instalar los Thaad, producidos por la compañía Lockheed Martin Corp, en varios sitios de la mencionada región, aunque está por determinar dónde, según Reuters.
El Thaad es un sistema regional de defense anticoheteril diseñado para derribar misiles balísticos de alcance medio e intermedio, que ya están en servicio en Corea del Sur e Islas Guam, aunque el Pentágono posee otras siete plataformas de ese tipo, algunas en Fort Bliss, Texas y otras cuya ubicación se desconoce.
El despliegue del Thaad en territorio surcoreano en marzo de este año provocó fuertes protestas de los gobiernos de la RPDC, China y Rusia, que perciben la medida como una amenaza a sus respectivos intereses de seguridad nacional.
Directivos de la corporación Lockheed Martin señalaron la disposición de la empresa a vender los que pida el Gobierno, el cual es en definitiva el que toma la decisión de probarlos y ponerlos en funcionamiento.
En años recientes el programa antimisiles del Departamento de Defensa ha estado bajo intenso escrutinio, debido en parte a las demoras en las pruebas y las fallas en su desempeño.
Está previsto que la MDA entregue al ejército estadounidense 52 interceptores Thaad hasta septiembre de 2018, lo que elevará a 210 el total de estas plataformas desplegadas desde mayo de 2011.