
2.- El FA tuvo un muy buen resultado pero… a costa de la Concertación-NM. No fue capaz de entusiasmar prácticamente a nadie de la significativa mayoría electoral abstencionista. Es más, este año ¡hubo más abstención que en 2009! Así, en la elección de diputados de 2009 votó válidamente el 45.83% del electorado. Y este año, el 41,91%. Además, hay que tener en cuenta que la Concertación-NM fue dividida y con candidatos extremadamente débiles. Por tanto, el FA tendrá que dar un salto cualitativo si pretende convertirse en un centro-izquierda ganador.. Evidentemente tiene mucho donde crecer; pero a la vez tendrá que superar muchas carencias que requieren más tiempo de analizar..
3.- Todo indica que Piñera ganará la segunda vuelta, pese a que sacó menos votos que los previstos. De partida tiene prácticamente segura la votación de Kast, lo que le da el mismo pie (44%) que en 2009. Por otro lado, no hay duda que Guillier es un muy mal candidato. Sin carisma; sin ideas; sin oratoria; sin capacidad política; con malas relaciones con los partidos que lo apoyan; con un comando muy débil; cometiendo sistemáticamente “errores no forzados” en sus declaraciones; etc. Además, es claro que un sector del PDC (dirigentes y bases) no está dispuesto a votar por él; y será muy difícil que logre acuerdos con el conjunto del FA y, menos aún. que entusiasme a sus bases. Por último, el temor a un triunfo de Piñera es hoy mucho menor que en 2009, donde todavía el espectro pinochetista tenía fuerza, más aún teniendo en cuenta que se trataba del primer gobierno estrictamente de derecha que podía establecerse luego de la dictadura.