Diciembre 6, 2024

Carúnculas en la DC*

En los últimos días la candidatura tambaleante de la DC a la Presidencia se afirmó. Seguirá y seguirá tambaleándose. El problema de la DC chilena, multicausal, no se llama o se llamaba Rincón. Se llama hoy Merkel. Y oportunismo. Y zigzagueo. Y síntomas de corrupción. Y carúnculas. Mañana se llamará de otra manera. Son varios y diversos los pisos que se recorren cuando uno se precipita de la altura a la tierra.

 

 

El retorno de Goic -al mejor estilo de Hernán Büchi Buck, en su teatro de 1989, cuando comunicó su renuncia a su candidatura presidencial por sufrir “contradicción vital”, subió a “escuchar la voz de la montaña” y bajó del monte para continuar su candidatura- sirvió para frenar por ahora el quiebre del partido, anunciado en un momento de calentura por Mariana Aylwin. Y por perseverar en la línea marcada por Ángela Merkel desde Berlín destinada a romper la alianza de centro con el PC y aventurarse en un camino aún más cercano con la derecha que apoyó a Pinochet y se opuso a la apertura democrática abierta en 1988.

 

Nunca las órdenes extranjeras avanzan sin dificultad. Más aún en un partido multiclasista, con débiles dirigentes, claramente zigzagueante, al que se le agotó hace décadas la doctrina, con síntomas de corrupción (acciones del senador Pizarro y los diputados León y Rincón para partir) y en franco deterioro ciudadano (de más del 40% de apoyo a más o menos el 5% real en la última medición electoral) y al 1 ó 2% en las encuestas actuales.

 

En casos de hundimiento del barco hay muchos que creen poder salvarse agarrando un salvavidas electoral equivocado fechado en épocas ya inexistentes, y por tanto destinado a desinflarse y desaparecer con cualquier olita.

 

No es “el camino propio” lo que hunde a la DC de hoy.

El actual “camino propio”, tan alabado por sus dirigentes más derechistas, es percibido por la ciudadanía como oportunista (abandonan una alianza de centro en deterioro) y su discurso y acción como super zigzagueantes (dejan la alianza pero siguen en el gobierno, están con el aborto y no están con el aborto, están con la gratuidad y no están con la gratuidad, ocupan -con Burgos- el Ministerio del Interior y otros pero están contra el gobierno, son críticos de todas las reformas que se han aprobado con su más destacado y decidido concurso, el más destacado y decidido de todos, según Ignacio Walker).

 

El “camino propio# de los años 60, postulado por Jaime Castillo Velasco y que fue formalmente tomado por Frei Montalva, que se había opuesto siempre a él, le permitió gobernar SIN ALIANZAS por seis años, y tiene muy poco que ver con el actual. De eso hace medio siglo.

 

Sergio Espejo, en medio de la reciente tempestad, presentó su renuncia, tan propia de gente decente cuando todo huele mal, y fue calificado por el ex ministro de Bachelet, Edmundo Pérez Yoma, como “histérico” y, por cierto, de conducta inconducente en política.

 

Olvidó Pérez Yoma, si alguna vez lo supo, que la propia Falange nació de una renuncia colegiada, que la DC se alimentó de ex conservadores como Horacio Walker, Héctor Valenzuela Valderrama y los hermanos Zaldívar, y que la DC ha sido fructífera en acusar y recibir renuncias de gente vamos a llamar “importante”. Recuerde algunos pocos don Edmundo:

 

Manuel A. Garretón Walker, diputado, fundador y figura de la Falange y embajador de Chile en gobierno del Frente Popular. En los años 40 ya algo olía mal en Dinamarca.

Jorge Rogers Sotomayor, dirigente de la Falange en años 50, “El último Falangista”.

Rafael Agustín Gumucio, senador y ex Presidente del PDC en los 60.

Alberto Jerez, senador DC.

Julio Silva Solar, intelectual, escritor y diputado de la DC.

Vicente Sota, dirigente y diputado DC.

Carmen Gloria Aguayo, dirigente femenina, ex candidata a senadora.

Jacques Chonchol, ingeniero agrónomo, hombre clave en Reforma Agraria chilena.

Juan Bosco Parra, intelectual y dirigente de la Izquierda Cristiana.

Luis Maira, diputado, embajador y dirigente nacional.

Sergio Bitar, destacado político, más importante que Pérez Yoma.

Sergio Aguiló, diputado y jefe de partido.

Pedro Felipe Ramírez, ex ministro y actual embajador.

Rodrigo Ambrosio, fundador del Mapu.

Enrique Correa, ex dirigente de izquierda.

Fernando Ávila, dirigente Mapu OC.

Jaime Gamuri, actual embajador en Brasil.

Juan Enrique Vega, ex embajador en La Habana y Ginebra.

Alejandro Bell, ex diputado.

Carlos Montes, actual senador.

Tomás Moulian, destacado académico, escritor y dirigente de izquierda.

José Miguel Insulza, ex Secretario General de la OEA.

Ricardo Hormazábal, ex Presidente de la JDC y del partido, diputado y senador, militante y dirigente de toda una vida, renunció hace poco a la militancia.

Y muchos otros.

Haga memoria, señor Pérez Yoma, colaborador irrestricto del primer gobierno de Bachelet, muy parecido al de ahora, con un par de diferencias: no habían en él comunistas y Merkel no se había pronunciado.

La presencia de comunistas en el gobierno chileno siempre es de temer.

Nunca han perseguido a nadie ni han estado allí cuando se han producido muertes por represión estatal, como sí ha sucedido con conservadores, liberales, radicales, udi, renovación nacional, socialistas en gobiernos de Duhalde e Ibáñez y…demócratas cristianos en los de Frei Montalva y el inicio de la dictadura de Pinochet.

 

(Carúnculas: Excrecencias carnosas que presentan los animales en el pico, cuello o frente, según la Enciclopedia de la Real Academia Española) y que suele utlizarse como sinónimo sencillamente de excrecencias).

 

 

 

 

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