Diciembre 5, 2024

Élites y ciudadanos: 2015, los tiempos de la politización

Este nuevo Informe de Naciones Unidas para el Desarrollo abarca el tema de la politización de la sociedad chilena: la estamos lejos de “no estoy ni ahí” – expresión creada por el tenista Marcelo Ríos – que significa el desprecio, en este caso, de la política. A diferencia de los primeros Informes, en que en que se minusvaloraba la democracia y que Chile aparecía después de Argentina y Venezuela, por ejemplo, hoy sólo aparece la valoración de  la democracia debajo de Uruguay y Costa Rica, modelos para toda América Latina.

 

 

En el último de 2015 aparece un fuerte rechazo a la corrupción por parte de la ciudadanía y, como se puede analizar en el cuadro adjunto, una de las preocupaciones principales es el cambio urgente del sistema judicial. Es posible que la opinión desfavorable a los jueces se deba, fundamentalmente, a la alta percepción de inseguridad respecto a la delincuencia y lo que se considera una justicia muy laxa y favorable a los autores de actos punibles.

 

Se  necesitan cambios profundos

Sistema  Judicial    52 %

Cantidad de impuestos para  las grandes empresas 42 %

Capacidad  de negociaciones de los trabajadores respecto  a los empresarios 34 %

Constitución política  37%

Modelo Económico    27%

 

 

Respecto a los cambios profundos, deseados por la ciudadanía aparece, en primer lugar, el sistema previsional – hay que considerar que el resultado de  encuesta se dio en 2015, cuando aún no se existía ninguna de las marchas masivas en contra de las AFPs -; el segundo lugar lo ocupa el sistema de salud; el tercero, el financiamiento de la educación; los tres ítems prueban que el diagnóstico de las reformas propuestas por el gobierno de Michelle Bachelet eran aceptado, y que el problema ha estado no sólo en su implementación, sino también en la incapacidad de movilizar a los ciudadanos a su favor. Así, el reformismo del actual gobierno fracasó por haberse convertido en un “despotismo ilustrado” y, además, por el bombardeo de la “quinta columna” concertacionista y democratacristiana en particular.

En el cuadro siguiente aparece una buena valoración respecto a la necesidad de una nueva Constitución y, sobre todo, el empleo de métodos de democracia participativa que permitan superar la crisis de representación, propia de la democracia electoral.     

Necesitan Cambios Profundos

Sistema  de  Pensiones

81 %

Salud

79%

Financiamiento Educación

 77%

Binominal

63%

Capacidad de negociación de los trabajadores

53%

Impuestos a las grandes empresas

67%

Impuestos que pagan las personas

58%

Sistema Judicial

74%

Constitución política 

67%

 

Similitud de la polarización política con la UP

Elite

43 %

Ciudadanía

 25%

 

Como se puede ver en el anterior cuadro, la élite tiene una visión más catastrófica de la crisis institucional, asimilando lo que acontece actualmente a los últimos días del período de la Unidad Popular. Es evidente, por tanto, que el decadentismo y el catastrofismo difundido por Ricardo Lagos y Andrónico Luksic es sólo una falsa conciencia de la oligarquía, “una visión del mundo al revés”, tal cual define la ideología Carlos Marx. La campaña del terror sólo logra asustar a sus mismos difusores; por otro lado, la ciudadanía ve la situación de manera muy distinta y, con mucho realismo y buen juicio, no compara en lo mínimo el gobierno de Bachelet con el de Allende. (Como diría mi madre, los caballeros, de puro miedo, se convirtieron en rotos, es decir, no hay peor estupidez que el miedo al comunismo, sobre todo, luego de la caída del Muro de Berlín).  

Preferencias  de cambios elite  y ciudanía

 

Elite

Ciudanía

Diferencia

Salud

25%

72%

47%

Educación

26%

 74%

48%

Agua electricidad

22%

60%

38%

Telefonía

6%

37%

31%

Televisión

3%

37%

34%

Explotación del cobre

23%

73%

53%

Transporte  público

31%

65%

34%

Sistema de pensiones

30%

80%

50%

Nuevamente, se ve una profunda brecha entre las opiniones de la élite y de la ciudadanía en general: a los primeros no les preocupa ni la educación, ni la salud, ni las pensiones, ni la vivienda, ni la explotación del cobre, pues al parecer, sólo les importa los negociados y las finanzas; a los segundos, en cambio, se preocupan de todos los ítems anteriores, pues forma parte de su cotidianidad. Por consiguiente, podríamos definir a la plutocracia como un ente parasitario y, a los ciudadanos, como productores. En términos saintsimonianos, de los parásitos se puede prescindir – en su tiempo, los nobles y los curas y, los segundos, los trabajadores, imprescindibles para el avance de una sociedad.   

Cantidad de manifestaciones

 

2013

El poder esta

 

Más centrado

24%

Igual

46%

Cantidad de Manifestaciones

 

2010

200

2011

700

2012

 250

 

Huelgas

2010

250

2011

150

2012

200

2013

230

 

Los dos cuadros anteriores nos muestran la importancia de la movilización estudiantil de los años 2011 y 2012, que marcaron un cambio radical de la sociedad, contribuyendo al despertar de la ciudadanía y tomar conciencia política y, a su vez, atreverse a criticar a la  casta política.

Politización

Interés por la política 

20%

Ubicación política  Izquierda centro derecha

55%

Conversa sobre política

25%

 

Posición política

 

Tiene posición política

No tiene posición  política

Total

Escala  1 a 10

Organizar un plebiscito

8

7,2

7,6

 

 

Consultas a expertos

6,7

6,4

6,6

 

Organizar  asambleas

7,7

7,3

7,6

 

Dejar que los gobernantes tomen las decisiones

4,7

4,8

4,8

 

 

La ciudadanía, ante las crisis de representación e institucional, empieza a buscar formas de participación basadas en la democracia directa, como es el caso de privilegiar la organización de plebiscitos y asambleas para proponer un nuevo pacto social, dejando de la do la consulta a los expertos, la tecnocracia y la verticalidad del poder presidencial.

Figura política  que admire y se sienta representado

 

No   sabe y no responde

45%

Responde un nombre

55%

 

Marchas. Paros  y Tomas

Positivo para el país

33%

Negativo

36%

Ni negativo ni positivo

28%

N S  N R

3%

Total

100

 

Respecto a las marchas, paros y tomas, la ciudadanía se encuentra dividida en dos mitades: una que apoya estas actividades y otra más conservadora que las rechaza. (Recordemos que esta encuesta es anterior a la masiva marcha en protesta contra las AFPs).

Cambios  profundos

 

Cambios profundos

Cambios moderados

No necesitan Cambios

Pensiones

81%

15%

2%

Salud

79%

16%

3%

Educación

77%

19%

2%

Binominal

53%

25%

9%

Negociación trabajadores

59%

31%

5%

Impuestos grandes empresas

67%

19%

8%

Impuestos a las personas

58%

27%

10%

Sistema Judicial

74%

18%

4%

Constitución política

66%

20%

5%

 

Tipos de demandas

 

2005-2006

2007-2008

2009-2010

2011-2012

Demandas Acotadas

70%

76%

81%

55%

Transformación política

30%

24%

19%

45%

 

Urgencia del Cambio

2004 La soluciones Necesitan tiempo

61 %

2013

37%

Soluciones rápidas

37%

61%

 

 

 

 

Con baja y alta demanda de cambio

 

Personas con bajo malestar social

Con alto malestar

Con  baja demanda de cambio

3%

2%

Con  alta de demanda de cambio

43%

50%

 

En este estudio del PNUD se hace un retrato bastante optimista de la ciudadanía chileno en el sentido de manifestar la búsqueda de formas democráticas más avanzadas y participativas, actitud que contrasta con el fuerte abstencionismo electoral: se muestra dispuesta a participar, pero no usa los instrumentos para llevarlo a la práctica, dejando en manos de las castas políticas y económicas los procesos electorales. Por otro lado, la mayoría de los ciudadanos confiesa no haber participado en ningún tipo de organización social y se refugia en la familia y en el individualismo.

                  Rafael Luis Gumucio Rivas (El Viejo)

                  14/09/2016

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