Diciembre 9, 2024

Macri, “pará la mano” corean millares en Buenos Aires

Buenos Aires.- Después de una multitudinaria manifestación contra el gobierno del presidente argentino Mauricio Macri, bajo la consigna pará la mano Macri, sacerdotes por la opción por los pobres realizaron este domingo una misa aquí en la Plaza de Mayo en la que pidieron la liberación de la dirigente social Milagro Sala y contra los despidos masivos, en momentos en que la Conferencia Episcopal Argentina denunció una sutil xenofobia de un sector de la sociedad contra las organizaciones sociales.

 

 

Encabezados por Eduardo de la Serna, los curas por la opción por los pobres dijeron que tenemos una hermana presa, política durante la misa celebrada, donde acampan organizaciones sociales en Plaza de Mayo en demanda de la liberación de Sala y contra los despidos masivos.

Mal que les pese, Milagro es su hermana, predicó el padre de la Serna dirigiéndose a los gerentes de la Casa Rosada a quienes recordó: nosotros no podemos no estar allí donde los pobres son maltratados.

El sacerdote Ignacio Blanco al frente de la misa sostuvo: tienen presa a una mujer del pueblo, porque no se bancan (aguantan) que una mujer se organice con sus hermanos, con los negros, mientras que el sacerdote Francisco Veiro señaló que Milagro está dando sus horas de libertad por el pueblo, por las tres T de Francisco, por tierra, techo y trabajo para su pueblo, y leyó un fragmento del discurso del papa argentino a los movimientos sociales en Bolivia el año pasado: No nos vamos a achicar, dijo en su arenga y demandó :”¡Libertad a Milagro Sala!”

Indescriptible fue la emoción en la emblemática Plaza de Mayo que cada día recibe a nuevos despedidos que van con sus familias a reclamar contra la injusticia. Los despedidos son nuevos desaparecidos, arrojados a la nada con una brutalidad nunca vista. Pará la mano Macri, gritaron los manifestantes.

El sacerdote De la Serna lanzó la consigna de hacer llegar al Papa el pedido de no recibir a Macri hasta que liberen a Milagro.

A su vez, el presidente de la Pastoral Social de la Conferencia Episcopal, monseñor Jorge Lozano dijo que han perjudicado más al país personajes ineptos e inmorales con importantes títulos académicos que los dirigentes humildes, y recordó que en estas últimas semanas he visto en las redes sociales y también en algún programa periodístico una especie de demonización de las organizaciones sociales y un trato hostil hacia algunos de sus dirigentes.

Lozano, obispo de Gualeguaychú, Entre Ríos, escribió una carta al diario La Nación en defensa de los movimientos sociales y la función que cumplieron durante la crisis de 2001 convocando a no caer en “lo que el papa Francisco llama ‘sutil xenofobia’, bajo el noble ropaje de lucha contra la corrupción o el clientelismo”.

En este contexto, Morón, provincia de Buenos Aires, fue escenario de otra protesta por los despidos masivos en la municipalidad de ese distrito, a los se agregó en las últimas horas una cantidad de ceses de periodistas de Radio Nacional.

Represión

Este domingo se conoció que el viernes pasado hubo un brutal ataque de la gendarmería con balas de goma a una murga que ensayaba para el próximo carnaval, con saldo de más de una decena de personas, entre ellos cinco niños, durante un operativo realizado en la villa miseria (ciudad perdida)1-11-14 del Bajo Flores, en esta capital.

Mientras un centenar de vecinos participaba del ensayo de la murga Los Auténticos Reyes del Ritmo a una semana del feriado de carnaval, la Gendarmería Nacional irrumpió supuestamente en un operativo improvisado chocando con su vehículo contra dos niños y sin mediar palabras les dispararon con balas de goma y al aire balas de plomo. El oficialista diario Clarín contó la versión de los gendarmes, negadas por todos los vecinos de que desde las alturas de algunos edificios efectuaron disparos que hirieron a dos gendarmes. El ataque brutal fue ocultado por los medios masivos de comunicación pro gubernamentales.

En tanto, organismos de derechos humanos reclamaronn la renuncia del ministro de Cultura de Buenos Aires, Darío Lopérfido, quien negó que hubiera 30 mil desaparecidos durante la última dictadura militar. El Centro Pen Argentina, rama de Pen Internacional con sede en Londres, atento a su lema Por la libertad y la responsabilidad de la palabra, cumple en expresar su profunda inquietud por la situación que están atravesando en el país los derechos humanos que son parte indivisible de la cultura, señala el comunicado del organismo.

Advierte sobre las ofensivas declaraciones públicas del señor Darío Lopérfido en relación a las víctimas desaparecidas de la última dictadura. El funcionario exhibió su orientación de claro corte negacionista y su ausencia de conocimientos al esgrimir viejos argumentos de la dictadura que cuestionan el número de desaparecidos en un intento de banalizar la tragedia vivida por la sociedad argentina, señala.

Asimismo manifiesta su solidaridad y apoyo a las declaraciones de los organismos de derechos humanos, entre otros Abuelas de Plaza de Mayo y Madres Línea Fundadora, cuya titular Nora Cortiñas pidió la renuncia del funcionario y también advierte sobre los despidos masivos de trabajadores de la cultura que sin el respaldo de un análisis imparcial de los respectivos legajos son llevados a cabo a diario de formas draconianas.

De la misma manera se refiere a declaraciones del actual secretario de Derechos Humanos, Claudio Avruj, acerca del cambio de paradigma dentro de su área y el rol que el gobierno quiere asignar a aquellos organismos que son parte activa de las políticas de Memoria, Verdad y Justicia desde hace 40 años, los mismos que vienen manteniendo un diálogo fluido con los diferentes gobiernos democráticos y manifiesta su esperanza de que todos estos temas encuentren un cauce democrático que los resuelva y dejen de generar innecesarios conflictos, y que la cultura de nuestro país pueda continuar con el mismo brillo que supo construir a partir de la recuperación de la democracia en 1983.

Este domingo un incendio accidental -según informó el Ministerio de Seguridad- afectó a la planta del Canal 13 del Grupo Clarín, lo que sacó del aire a varias señales televisivas. El fuego fue controlado y no hubo heridos.

 

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