La Corte de Apelaciones de Santiago decretó la reapertura de la investigación judicial por el atentado en que agentes de la dictadura militar intentaron asesinar al ex senador Jorge Lavandero, propósito que en definitiva se frustró pero que le significó a la víctima lesiones gravísimas.
El 10 de Mayo de 1984 una veintena de agentes de la dictadura militar golpearon con laques y fierros a Lavandero, que era presidente de la conocida entidad opositora Proden y que había instalado el diario opositor Fortín Mapocho. El dirigente opositor fue encajonado en su automóvil en el sector alto de Santiago y después recibió un golpe con un fierro que le fracturó cráneo, recibiendo luego una brutal golpiza con objetos contundentes que le significaron 17 días en la UTI de la Clínica Indisa, seis meses de rehabilitación y la pérdida de la audición total en uno de sus oídos.
El atentado tuvo como propósito arrebatar a Lavandero una serie de documentos que acreditaban que la faraónica mansión que Pinochet se había construido en El Melocotón era con fraude al Fisco.
Ante el escándalo nacional e internacional el Ministro del Interior de la dictadura Sergio Onofre Jarpa solicitó al poder judicial un ministro en visita, designación que recayó en el Ministro de la Corte de Apelaciones de Santiago Arnaldo Toro. Este último llegó a identificar a los autores, pero según confesó a la víctima, no había “condiciones” para procesar a los autores. Bajo ese juez intimidado o complaciente la causa se archivó sin culpables.
Hace un par de semanas el ex senador Lavanderos presentó una querella por Crímenes de Lesa Humanidad con el patrocinio de los abogados Roberto Avila Toledo y Luis Toro, con la que consiguió la reapertura de la causa que ahora instruirá el juez Mario Carroza quien ya decretó el día de ayer varias diligencias.
El abogado Ávila señaló que “estamos optimistas, esperamos que ahora se castigue este brutal atentado. El caso está aclarado desde el punto de vista investigativo; sólo faltaba vivir en un país con Estado de derecho para hacer justicia y creo que en algo así estamos”.