Diciembre 4, 2024

Corrupción: Cómo ante nuestro ojos se fragua el arreglín

 

Quien crea que los Tribunales son para administrar justicia, no sólo se equivoca, es probablemente hoy en día un ingenuo manipulado por el poder.  El Fiscal Nacional tuvo que asumir los casos PENTA y SQM, porque al interior del Ministerio Público se desató una feroz lucha  por su propia sucesión, pues debe dejar el cargo en octubre de este año.

 

 

Pero como  lo dijera Sebastián Piñera, “nada es gratis en la vida”, el Fiscal Nacional extendió una boleta o factura ideológica y hace unas  semanas se auto proclamó, en la Revista del Sábado de El Mercurio, ni mas ni menos, que candidato al Parlamento para las próximas elecciones. El Poder lo apoyará y deberá tener cuidado extremo en el financiamiento de esa campaña.

 

El Fiscal Nacional en el caso PENTA consiguió (en el 8vo. Juzgado de Garantía) la prisión preventiva para Carlos Lavín y Carlos “choclo” Délano.

Le tocó en suerte ver la apelación de todo aquello, a la Cuarta Sala de la Corte de Santiago

El Presidente de la Cuarta Sala (candidato en ese momento a Fiscal de la Corte Suprema) votó para que los presos se fueran a sus casas. Ya supondrán ( y suponen bien) que el Ministro de Corte aquél fue nombrado por el Gobierno inmediatamente Fiscal de la Corte Suprema.

La sorpresa la dio un Ministro de reconocida inclinación nazi, el mismo que relativizara el Holocausto en una entrevista a El Mercurio, el diario de Agustín Edwards, expulsado del Colegio de periodistas por graves faltas éticas. Dicho Ministro votó en favor de la tesis del Ministerio Público. Es una casualidad ( no más que eso) que su hija figure como periodista en la planta profesional del Ministerio Público, con un sueldo estupendo. El también ex Presidente  involucrado en los actos de corrupción a través de sus hijos políticos pareciera que vuelve a tener razón: “Nada es gratis en la vida”.

Cuarenta y seis (46) días alcanzaron a estar en prisión Délano y Lavín. El mismo Octavo Juzgado de Garantía les  revocó el decreto de prisión.

Cuando el asunto subió (en apelación) a la ya nombrada Cuarta Sala, el voto del Ministro y nombrado Fiscal de la Corte Suprema estaba asegurado. El Ministro de Corte de Inclinaciones conservadoras y nostalgias pro nazis, en una hábil maniobra se fue de vacaciones. 

Carlos & Carlos ganaron 2×1 y se fueron tranquilamente a  sus casas.

Le tocó su turno al gerente general de Soquimich, desde donde la  corrupción y repartija de dineros basada en defraudación tributaria fue transversal hacia todo el duopolio político.A unos más, a otros menos, pero a todos. 

El Fiscal Nacional esta vez no se tomó siquiera la molestia de ir al Tribunal ni a la Corte.

Lo cierto es que el pobre Fiscal Gajardo se las tuvo que arreglar solo. Perdió “como en la guerra” y  así el Gerente de la empresa del ex yerno de Pinochet después de la formalización, con la mejor de sus sonrisas y la ratificación de la Corte de Apelaciones…se fue también para su casa.  

Y así es como en estos tiempos de crisis institucional “funcionan las instituciones” del país, hoy convertida en una frase manida y repetida sin cesar por todo tipo de autoridades políticas del ejecutivo,legislativo y de la justicia. Sin mucha estética se fragua y se abre paso un “arreglín” entre el poder político y el poder del dinero. Muchos creen que al final por sobre vivencia de la casta político empresarial involucrada se volverá a “echar tierra” y se aplicarán penas muy acotadas dejando una gran estela y traza de impunidad.

Por otro lado, la situación del ex director del Servicio de Impuestos Internos  Michel Jorrat se hizo tan insostenible por sus vinculaciones con el auto denominado “operador” recaudador de la Concertación NM Giorgio Martelli que el Gobierno se vio obligado a pedirle la renuncia.

Frente a todo lo anterior, lo único que parece ser claro es que no saldremos de esta profunda crisis institucional sin la realización de una Asamblea Constituyente, electa democráticamente para elaborar una Nueva Constitución y nuevas instituciones. 

Resulta indispensable elegir una Asamblea como instancia portadora de un verdadero ejercicio democrático ciudadano. Como preámbulo a una democracia participativa que deje atrás la democracia representativa y de los acuerdos hoy en crisis y en manos de una casta. No se trata de una mera discusión sobre métodos para elaborar una nueva Constitución, la Asamblea Constituyente es hoy frente a la crisis y el descrédito de la vieja política binominal una instancia indispensable para la recuperación de  nuestra soberanía ciudadanía del conjunto de las y los chilenos.

Esteban Silva

Presidente Fundación Constituyente XXI

 

Agregar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos requeridos están marcados *