Un proceso creciente de despertar y empoderamiento territorial, motivó la realización de más de 20 actividades en el día internacional del agua, exigiendo la Recuperación de las Aguas para las comunidades y los ecosistemas, informando que las razones de la sequía en Chile no son solo ambientales, sino que también políticas, por ello es tan importante asumir el rol que nos cabe como ciudadanos en estas temáticas.
La crisis hídrica que atraviesa el país es tan brutal como programada: todas las cuencas están sobre otorgadas, el modelo minero, forestal, energético y agroalimentario, pese a demostrar la insustentabilidad que le es inherente y el socavamiento no solo del agua sino que también de su ciclo, sigue siendo promocionado y profundizado por los gobiernos en desmedro de las líneas de desarrollo local, y vulnerando el derecho a la autodeterminación de los pueblos.
Esta conciencia es la que despunta cada vez con más claridad en los innumerables territorios que padecen las consecuencias de la falta de agua, por eso desde la creatividad y la fuerza de la vida, se realizaron este fin de semana diversas actividades que pretenden hacer conciencia de cómo nos están robando el agua y de lo urgente que es recuperarla. Sobre todo cuando los gobiernos, aprovechándose de las condiciones de escasez que sus políticas han generado, implementan soluciones hídricas de emergencia que terminan en entero beneficio de quienes “mojan a las autoridades” y no de quienes padecen de sed.
Cicletadas, asambleas, marchas, festivales, pasacalles, intervenciones artísticas e informativas y actos culturales, irrumpieron desde Arica a Chiloé, invitando a los vecinos y vecinas a que el agua nos despierte y nos devuelva la conciencia de ser todos y todas sujetos de derechos, que debemos exigir que el agua vuelva a ser un bien común y no un objeto de mercado.
Acciones multitudinarias como la marcha de más de 1.500 personas que desfiló por las calles de Temuco desnudando las consecuencias del modelo forestal, energético y agroalimentario; también actividades numerosas que, validando el atreverse y la importancia de manifestarse, como ocurrió en la región de Coquimbo, en la actividad informativa de La Serena o en la Asamblea del Agua que se realizó en la plaza del Palqui, en el Limarí; marcaron el sello de diversidad y empoderamiento de esta jornada de movilización.
Mientras en Santiago lienzos, músicas y colores se tomaban el paseo Ahumada informando para converger en una rogativa en el río Mapocho, en el Cajón del Maipo desfilaba una marcha denunciando al proyecto Alto Maipo, y en Melipilla las y los campesinos protagonizaban un Encuentro por el Agua. En la quinta región, en San Felipe, la información se entregaba a pedales en la cicletada por el agua, y al ladito, en Los Andes se hacía una intervención en el centro de la Ciudad, mientras que en la Provincia de Petorca, centenas de personas atravesaron las calles de la Ligua transformando la sed en grito articulador, y en Llay Llay e Isla negra se efectuaban charlas y conversatorios.
Más al norte, en Arica no solo se acusaban las aguas escaseadas, sino también las aguas y tierras impunemente contaminadas, y en Calama, el río Loa despuntaba un afluente de conciencia en el centro de la ciudad; en Copiapó, una caminata familiar por el lecho seco del río antes abundante, marcaba los pasos de la dignidad de un valle que se niega a morir. También en Atacama, en el Valle del Huasco, se realizó una rogativa por el agua, que tuvo caravanas de autos y terminó con una asamblea en torno a uno hoya común.
En el sur en tanto, se realizaron procesos de validación de la riqueza local y el reconocimiento cultural y ambiental del Río Claro en Molina, a través de un festival de música en Chillán se ovacionaron las aguas. En tanto en Valdivia se efectuaron actividades artísticas e informativas en el centro de la ciudad, mientras en Neltume se proyectaron documentales honrando a Berta Quintreman, en medio de la flora nativa que aún resiste y embellece los paisajes. Al cruzar a la Isla grande de Chiloé, el fin de semana de movilización, se transformó en toda una semana por el agua.
Al final de la jornada del día internacional por el Agua, se hace evidente que son muchos los territorios organizados que viven día a día la escases hídrica y que están dispuestos a salir a la calle a manifestarse y organizarse para cambiar la situación.
Asimismo, se continuarán articulando rumbo a la Tercera Marcha Nacional por la Recuperación del Agua y la Vida, que se desarrollará en Valparaíso este 22 de abril, desde las 11 de la mañana, y en donde se espera que todos los territorios ya activados y otros que empiezan a comprender que se necesitan todas las manos para torcer el destino de sequía y muerte que nos están imponiendo, se encuentren para exigir una y otra vez, que el agua se devuelva a los cauces que riegan a la vida, y deje de mojar los nefastos regueros del mercado.