La Super intendencia de Bancos e Instituciones Financieras (SBIF) puso en consulta una nueva normativa que define un indicador de disponibilidad del servicio de la red de cajeros automáticos con el objetivo de fijarle un estándar mínimo.
“Debido a la importancia que este medio ha ido adquiriendo para los clientes bancarios y las dificultades observadas para asegurar una calidad de servicio adecuada y constante, se hace necesario dictar normas que establezcan algunas condiciones mínimas para el funcionamiento de los cajeros automáticos, especialmente en lo que se refiere a los tiempos de disponibilidad para efectuar giros de dinero”, explica la norma.
En sus disposiciones, determina que la disponibilidad del servicio de la red de cajeros de cada banco no podrá ser inferior a 95%; con lo cual las instituciones deberán adoptar las medidas de gestión necesarias para asegurar el cumplimiento de dicho estándar frente a un conjunto amplio de causales, con la sola excepción de aquellas asociadas a la reposición de un cajero siniestrado o a las intervenciones efectuadas con motivo de la adopción de cambios normativas en materia de seguridad pública.
De no cumplirse estas normas, las sanciones podrían llegar a cerca de un millón de dólares.
Asimismo, establece que será responsabilidad del directorio de cada institución proveer las directrices necesarias para asegurar la adecuada implementación de estos nuevos estándares de servicio.
Preocupados por la disponibilidad de dinero en efectivo que habrá en los cajeros automáticos del país, los diputados DC de la Comisión de Economía Fuad Chahin y Sergio Espejo reiteraron ayer, en la Cámara de Diputados, su petición a la Superintendencia de Bancos para que entre en vigencia, antes de las fiestas de fin de año, la circular que obliga a los bancos a tener cajeros automáticos habilitados, “manteniendo frecuencias adecuadas para la recarga de efectivo y que los cajeros se encuentren en perfectas condiciones de manera que los usuarios no tengan problemas en retirar efectivo durante los días de celebración.”
Al respecto, el diputado Chahin, como presidente de la Comisión de Economía, planteó que “sabemos que la banca de alguna manera está presionando y obligando a la ciudadanía a utilizar las tarjetas de débito y de crédito para maximizar las utilidades a través de Transbank, que es el monopolio de este tipo de empresas y por eso nosotros creemos que la única alternativa para detener esta situación es que la Superintendencia dicte una circular que obligue a los bancos a mantener los cajeros automáticos, a que dispongan de tiempos razonables para que sean recargados de dinero y que los cajeros tengan adecuada mantención de los cajeros para que estos no estén fuera de servicio cada vez que los clientes necesitan sacar efectivo”.