El 13 de junio del 2013 como producto de un descontento generado por parte de los trabajadores se constituyó el sindicato de la empresa. Las causas son las extensas y arduas jornadas laborales, el estrés producido por la cantidad de ventas y horas, las bajas remuneraciones en comparación a las ganancias millonarias que se han obtenido en siete meses de apertura de esta multinacional en nuestro país.
El proceso de negociación se dio inicio el martes 6 de agosto del 2013 donde se entregó el petitorio. Las propuestas apuntan hacia mejoras en la calidad de vida de los trabajadores sin distinción de cargo, mejor distribución de los turnos de trabajo, contar anticipadamente con la carta horario y disminuir la permanencia en la tienda, la cual se distribuye en turnos entre las 6 de la mañana y la medianoche.
Entre su apertura y el mes de agosto, la tienda ha sumado más 31,4 millones de dólares en venta, los cuáles no han sido traducidos en una mejora salarial. Por esto, exigen que la fuerza de trabajo sea remunerada en relación a cada trabajador.
El 29 de octubre, la Dirección de Trabajo no presentó las mejoras esperadas en cuanto a las remuneraciones. Los trabajadores que hoy están en tienda son reemplazos que autoriza el Código del Trabajo. Aquellos que no pudieron participar fue porque la empresa se los impidió al renovarle el contrato a plazo fijo en agosto.
“Somos conscientes de este proyecto colectivo el cual pretende mejorar las condiciones laborales paupérrimas a los que son sometidos los trabajadores del retail nacional” indica el comunicado del sindicato de trabajadores de una de las tiendas del retail más grande que ha llegado a Chile.