El secretario del Tesoro de Estados Unidos, Jacob Lew, advirtió que el Congreso juega con fuego si no eleva el límite de deuda. En una entrevista con la cadena CNN puntualizó que si para el 17 de octubre el Congreso no eleva el techo de deuda, actualmente en 16.7 billones de dólares, podría tener consecuencias catastróficas para la economía mundial, y aseguró que el gobierno estadunidense, que se financia con créditos, no podrá pedir más préstamos.
Boehner endurece posición
Por su parte, el presidente de la Cámara de Representantes, John Boehner, dijo que no habrá una votación sin condiciones sobre el aumento del techo de deuda. No vamos a pasar un aumento del límite de la deuda, afirmó.
En declaraciones cruzadas en la televisión, gobierno y oposición se mantuvieron en sus posiciones en el sexto día de cierre administrativo por el bloqueo presupuestario, cada vez más ligado al plazo sobre el techo de deuda.
Sin un acuerdo sobre el tema del endeudamiento, Estados Unidos podría entrar en moratoria por primera vez en su historia, lo que, según funcionarios estadunidenses y de organismos internacionales, tendría consecuencias graves para el país y las economías del mundo.
El tope de endeudamiento, que se alcanzó en mayo, es de 16.7 billones de dólares, y el déficit mensual ronda los 60 mil millones de dólares que deben ser obtenidos en los mercados financieros.
Ahora el gobierno de Estados Unidos mantiene el límite de deuda gracias a varios trucos presupuestarios, pero este margen de acción se agotará a más tardar en noviembre, cuando está previsto el pago de intereses de deuda. El Tesoro estadunidense considera que las reservas rondarían solamente los 30 mil millones de dólares, mientras las salidas netas de tesorería alcanzan a veces 50 mil o 60 mil millones por día.
La administración demócrata reanudó su llamado a los republicanos del Congreso para que levanten sin condiciones el límite del endeudamiento público antes del 17 de octubre y voten el presupuesto de 2014, sin el cual la administración seguirá sin recursos para hacer frente a sus gastos.
Nunca estuvimos en la situación de que Estados Unidos funcionara sin capacidad para obtener préstamos. Es muy peligroso. Es irresponsable porque la realidad es que no hay opción si no podemos pedir prestado y nos quedamos sin liquidez. Esto significaría que por primera vez Estados Unidos dejaría de pagar sus facturas a causa de una decisión política, explicó Lew.
Por su parte, Boehner dijo a la cadena ABC que los problemas de fondo deben ser abordados antes de aumentar el límite de la deuda. Mi objetivo no es provocar un cese de pagos en Estados Unidos. Mi objetivo es tener una conversación seria sobre las cosas que aumentan el déficit y la deuda. Y el rechazo del presidente a sentarse a conversar hace que pese sobre nuestro país el riesgo del cese de pagos, afirmó Boehner en comentarios que endurecen la postura de fines de la semana pasada, cuando habría dicho a republicanos en privado que trabajaría para evitar un incumplimiento de pagos, incluso si eso implicaba depender de los votos de los demócratas.
Ante la situación, el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, decidió no acudir a la cumbre del Foro de Países Asia Pacífico que comienza este lunes en la isla de Bali y canceló una gira por la región.
El sábado los legisladores lograron un acuerdo para limitar los efectos del bloqueo y que los 900 mil empleados federales obligados a tomar vacaciones forzosas sin sueldo reciban su paga de forma retroactiva. Por su parte, el secretario estadunidense de Defensa, Chuck Hagel, anunció la restitución de la mayor parte de los 400 mil empleados civiles del Pentágono obligados a tomar vacaciones sin sueldo.