Durante la noche del lunes se dio a conocer la noticia de que los trabajadores de Televisión Nacional agrupados en los sindicatos 1, 2 y 3 –que en total representan a 1100 de 1400 de los funcionarios de la red estatal- votaban la huelga y la iniciaban a las 00:00 horas de este martes.
Durante la mañana de ayer, la Central Unitaria de Trabajadores logró contactarse con los presidentes y voceros de los sindicatos para expresarles su respaldo y ofrecerles toda la ayuda necesaria. En ese contexto, los trabajadores invitaron a la presidenta de la Central, Bárbara Figueroa, para que se hiciera presente en el lugar y les entregara su saludo.
Acompañada por el consejero nacional José Hermosilla, Figueroa fue recibida por los presidentes de los sindicatos 1 y 3, Roberto Reyes y Pamela Morales, respectivamente, quienes les explicaron la situación y los motivos de la movilización.
Morales señaló que la principal piedra de tope de la negociación colectiva que están llevando con el canal es por el reajuste ofrecido por la empresa: “la huelga se votó porque no estamos de acuerdo con el reajuste, no en la cifra, sino en cómo está construida la propuesta, que está sujeta a que se alcancen ciertas metas de venta de publicidad, algo a lo cual nosotros cedimos, pero esperando que la empresa elevara el monto como un gesto hacia nosotros también. Eso no sucedió, aunque debemos reconocer que en el resto del contrato colectivo se ve reflejado el esfuerzo de ambas partes, así como también en el bono por término de conflicto. Sin embargo es en el reajuste que tenemos un punto de quiebre, pese a que en términos porcentuales no estamos tan lejos las dos partes, ellos ofrecen un 2,5% y nosotros exigimos un 3%, pero lo que finalmente nos motivó a movilizarnos es la insensibilidad de parte de la empresa de no darse cuenta de que esto no es un tema de platas, sino que venía acumulándose una molestia respecto a la gestión y a ciertas decisiones del canal”. La dirigenta recalcó que de parte de los trabajadores existe plena voluntad para retomar el diálogo con el canal y volver a sentarse en la mesa de negociación, siempre y cuando exista desde la contraparte una postura real por solucionar el conflicto.
En tanto, el presidente del sindicato N°1, Roberto Reyes, agradeció el apoyo recibido por la ciudadanía, diversos medios de comunicación y del mundo sindical, representados en la presidenta de la CUT: “hemos tenido la visita de radios y nos han enviado cartas sindicatos de los otros canales. Además nos han apoyado los rostros de TVN y algunos actores que han venido. Este apoyo, en conjunto con el que estamos recibiendo de parte de la CUT, es fundamental para sostener esta huelga y agradecemos las muestras de solidaridad y la fuerza que nos envían los televidentes a través de las redes sociales”, manifestó.
La presidenta de la multisindical insistió en la importancia de la unidad de los trabajadores como una férrea defensa de sus derechos y como la manera más certera de alcanzar sus propósitos, “porque no serán nuestros jefes, los empresarios ni quienes están hoy en La Moneda los que van a venir a promover los derechos de los trabajadores; eso tenemos que ganarlo nosotros con nuestro propio esfuerzo y con nuestras propias herramientas, que no sirven de nada si no estamos unidos y firmes”, enfatizó y recalcó que las primeras 72 horas de una movilización son las más complicadas y en las que los trabajadores se deben mantener más firmes para no ser doblegados ante las presiones de la contraparte.
Además, la timonel de la CUT entregó su visión respecto al momento actual en que se encuentra el país y cómo este escenario es propicio para que el mundo social comience a demandar un país mejor y más justo: “este Chile no es el mismo de hace seis o siete meses atrás, estamos viviendo un país distinto, ahora estamos en un Chile que quiere y demanda sus derechos. No estamos diciéndole a los que están en La Moneda que queremos cogobernar con ellos, pero sí estamos diciendo que con nuestra calidad de vida, con el transporte caro y malo que tenemos, con las condiciones de seguridad en las que trabajamos, con el miedo a perder la pega con que vive un montón de compatriotas, no es posible que además nos vengan a pedir que seamos generosos con ellos y seamos nosotros los que tenemos que ceder para que ellos mantengan su estatus de vida y prolonguen las desigualdades tan arraigadas que existen en el país. Como si nosotros no tuviésemos necesidades reales de educación, salud, vivienda, con los precios que tienen las cosas en este país, desde el pan hasta el pasaje en micro. Entonces estamos en una situación de agobio, estamos ya en un momento en que no se resiste más y si no lo expresamos mediante una movilización como esta que están llevando a cabo ustedes, pareciera que en este país no pasa nada y que estamos todos felices de vivir agobiados y endeudados. Y eso es lo que en estos últimos meses ha comenzado a cambiar y lo he visto en cada uno de los conflictos en que me ha tocado estar presente en estos tres meses”, finalizó Figueroa.