Diciembre 9, 2024

Piñera repite el Fraude Estadístico denunciado en 2007 por Felipe Larraín

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piera_larrain_longueiraEsta nota sobre el Salario Mínimo y la Pobreza en Chile fue escrita el 16 de julio de 2012,  días antes de la información sobre pobreza  2011 que difundió masivamente el gobierno de Piñera. Esperábamos que la Canasta de Consumo Familiar de 1987, o sea de hace casi 25 años y de la época de la Dictadura de Pinochet  fuese cambiada ya que existe un Acuerdo del gobierno y del Parlamento que debería ser  utilizada la Canasta de Consumo Familiar de 1997, o la más reciente de 2007. Por eso,  en el nuevo título denunciamos que: ”Piñera repite el Fraude Estadístico denunciado en 2007 por Felipe Larraín”.


 

A continuación, nuestro documento del 16 de julio de 2012:


El gobierno del  Presidente Piñera ha distribuido y utilizado una carpeta con las  declaraciones de diferentes parlamentarios de oposición en relación a la aprobación del Salario Mínimo en el gobierno de Michelle Bachelet.  En la campaña comunicacional afirman  que esos reajustes fueron  menores al que propone su gobierno actualmente, y que sin embargo, fueron rápidamente aprobados.  Felipe Larraín, como Ministro de Hacienda,  entrevistado por  ‘La Tercera 15 de julio de 2012-, les recuerda a los parlamentarios de oposición que ellos, en el gobierno de Bachelet aprobaron reajustes mucho menores del Salario Mínimo que  él propone actualmente.  Incluso, Felipe Larraín declara lo siguiente:  “A un parlamentario de oposición le dije : ‘ Cómo vas a votar en contra cuando aprobaste un reajuste aún menor cuando tú eras gobierno ‘. ‘ Ah, es que ese era mi gobierno’, me confesó”


Si se trata de recordar declaraciones y estudios anteriores, recordamos que:


Felipe Larraín, en su Columna – domingo  14 de octubre de 2007-, en ‘Economía y Negocios’ de El Mercurio,  concluye en base a sus estudios, que la pobreza en Chile es el doble de las cifras oficiales entregadas por el gobierno de Michelle Bachelet. Incluso, el titulo de su Columna  fue:


“Una muy necesaria corrección Hay cuatro millones de pobres en Chile”.


Y señala:

“La encuesta de Caracterización Socioeconómica Nacional (CASEN), aplicada entre noviembre y diciembre de 2006 reveló importantes progresos”… “De acuerdo a ella, la pobreza cayó desde un 18,7% de la población en 2003 a un 13,7% en 2006, y la indigencia desde 4,7% a 3,2% en el mismo lapso”.


“Las cifras reales”


Felipe Larraín afirma categóricamente:


“El problema de fondo es que las cifras oficiales de pobreza son excesivamente optimistas y parecen no corresponder a lo que percibe la población. Simplemente, los pobres son muchos más que los de las estadísticas oficiales porque la vara con que se los ha medido, la llamada línea de pobreza, está obsoleta”.


“Para medir la pobreza se usa una canasta de satisfacción de necesidades básicas (CSNB), que se determina a partir de la Encuesta de Presupuestos Familiares. Ésta la realiza el INE y muestra lo que efectivamente consumen los hogares chilenos”.


“De aquí surge una canasta de alimentos básicos que permiten cumplir con las recomendaciones de organizaciones internacionales de 2.200 calorías diarias (aprox.) por adulto; esta canasta se costea y determina la línea de indigencia.”


“Luego se amplifica usando un factor (en torno a 2) para determinar el costo de las necesidades básicas no alimenticias (salud, vivienda, vestuario, etc.), lo que define la línea de pobreza”.


“Finalmente se compara el ingreso de las familias (incluyendo los subsidios monetarios que recibe del Estado) con el costo de estas canastas”


“Así, para determinar la línea de pobreza resulta clave usar información actualizada de lo que efectivamente consumen los hogares. Y la canasta oficial (en base a la cual se han reportado las cifras de pobreza) fue construida en 1990 utilizando los patrones de gasto de los años 1987-1988”.


A continuación Felipe Larraín señala:


“Posteriormente, en 1996-97 se realizó la Quinta Encuesta de Presupuestos Familiares, que está disponible y con la que se debió haber actualizado la canasta. Pero ello no se hizo, a pesar del compromiso explícito adoptado por Mideplan en 1999”.


Felipe Larraín, como académico, en su documento de 2007, afirma categóricamente  a continuación que:


“Ninguna razón resiste el más tímido de los cuestionamientos”.


“Para responder cuántos pobres hay efectivamente en Chile contamos con el acucioso trabajo desarrollado entre 2001 y 2003 por la Fundación para la Superación de la Pobreza en conjunto con el Departamento de Nutrición de la Universidad de Chile y la Jefa de Precios del INE, quienes estimaron una nueva canasta de satisfactores básicos con los patrones de gasto observados en la encuesta del año 1996-97. ¿Qué se encontró? En primer lugar, la línea de pobreza 2003, que de acuerdo a las cifras oficiales era de $43.712, pasaba a $66.388. Es decir, la pobreza en 2003, que estaba en 18,7% según cifras oficiales, es de 36,4% con la canasta actualizada…”


“…, usando cifras actualizadas, los niveles de pobreza e indigencia son del orden del doble de los oficiales. Como país y especialmente desde el punto de vista de los pobres, no conviene que vivamos en la quimera de que la pobreza afecta sólo al 13,4% de la población, cuando en realidad es el 29%”.


Una cifra irrealmente optimista le resta importancia en el debate público y probablemente en las políticas públicas. Por eso, reconozcamos los avances, pero usemos las cifras reales. En Chile existen unos 4 millones y medio de pobres que requieren atención urgente”


Felipe Larraín, por varios meses insistió  en la validez de sus estudios, en entrevistas, en discusiones académicas, con autoridades de gobierno y con diferentes políticos.


A continuación destacamos algunas afirmaciones  adicionales de Felipe Larraín:


“El próximo año ´[2008], estará lista la sexta encuesta de presupuestos familiares,[ del año 2007],  con lo cual vamos a poder actualizar una vez más la canasta. Lo que definitivamente no corresponde es seguir calculando la pobreza en base a información de 1987”.


Felipe Larraín afirma:


“La línea de pobreza urbana usando la canasta actualizada [2006] es de $71.500, cuando la línea oficial es de $47.100; eso ilustra por qué los pobres son muchos más”.


“… Esto es muy importante para las políticas públicas, porque si las políticas contra la pobreza se dirigen sólo al 13,7% de menores ingresos, van a dejar fuera más de 2 millones de chilenos que son pobres pero no aparecen como tales en las cifras oficiales.”


“Ha habido progreso… Pero no nos pasemos películas en colores que todavía son en blanco y negro”.


Según los estudios de Felipe Larraín de 2007,  la línea de pobreza urbana que él corrigió es de  $ 71.500 mensuales  por persona para el año 2006 y la línea de pobreza familiar, -4 personas promedio por  familia-, es de  $286.000 mensuales.


Actualizando los datos de Felipe Larraín, la línea de pobreza por persona  corregida por el incremento de los precios, – IPC-,   de aproximadamente 20%, desde 2006 a junio de 2012, resulta ser  de $85.800 mensuales y la línea de pobreza familiar resulta ser de $343.000 mensuales. (El IPC de los alimentos desde fines de 2009 a junio de 2012 es el doble del IPC global)


Los estudios de Felipe Larraín permiten resolver la contradicción entre una muy mala distribución del ingreso y gran disminución de la pobreza. En realidad, hay una mala distribución del ingreso con elevados niveles de pobreza, aunque la pobreza haya disminuido   en relación al período de la Dictadura.


La pésima distribución del ingreso y los altos niveles de pobreza  están determinados fundamentalmente por la distribución de la Producción  -PIB-,  entre las remuneraciones de los trabajadores y las ganancias de los empresarios y los impuestos netos de subsidios que capta el Estado.


Según la información, -Cuentas Nacionales 2012 del Banco Central, la participación de los salarios en Chile disminuye de 41,2% en 2003, a 35,8% en 2010. En los países desarrollados la participación de las remuneraciones en el Producto es superior al 60%. No hay país desarrollado que tenga salarios bajos.


Por otro lado en Chile, las ganancias (Excedentes de Explotación), crecen de 46,7% en 2003 a 54,2% en 2010 apropiándose de la disminución de la participación de los salarios y de la participación de los impuestos netos  que capta el  Estado chileno del PIB.


Chile: Participación porcentual de las remuneraciones y de las ganancias en el PIB

2003

2010

Remuneraciones

41.2

35.8

Excedentes de Explotación

46.7

54.2

Impuestos netos de subsidios

12.1

10

Fuente: Banco Central, “Cuentas Nacionales 2012”


El PIB chileno en 2010 es alrededor de 258.000 millones de dólares. Los trabajadores han dejado de percibir solo en el año 2010 cerca de 14.000 millones de dólares. El Estado ha dejado de percibir cerca de 5.500  millones de dólares. Ambas disminuciones  han sido captadas por las ganancias empresariales que han aumentado en  más de 19.000 millones de dólares en 2010. Todo esto debido a las variaciones de la participación del trabajo y del capital en el PIB. Grandes transferencias de remuneraciones a ganancias se han producido en los años anteriores a 2010 y hasta ahora.


La participación de las Remuneraciones en el PIB sería bastante menor si se descuentan las elevadas remuneraciones de los Ejecutivos de las Empresas, que en realidad, son parte de las ganancias o de los excedentes operacionales. A su vez,   los excedentes de las  empresas incluyen los ingresos de  los trabajadores por cuenta propia. Pero lo más importante es que en Chile las ganancias incrementadas son apropiadas por las grandes empresas, las que no solo explotan a los trabajadores, sino que a las empresas contratistas, y en general a las PYMES.


La pésima distribución del Ingreso en Chile,  los elevados niveles de pobreza  y la magra participación de las remuneraciones en el Producto, tiene una relación directa con el Salario Mínimo. El Salario Mínimo debería satisfacer  las necesidades básicas del trabajador y su familia.


El nivel del Salario Mínimo en los años anteriores debería haber estado relacionado con el nivel de ingresos para la Superación de la Línea de la Pobreza  Familiar de $286.000 mensuales para el año 2006, según los estudios realizados por  Felipe Larraín en el año 2007. El Salario Mínimo actual debería estar relacionado con el  nivel de ingreso señalado por Felipe Larraín actualizados a junio de 2012, que es de $343.000 mensuales, cifra que permitiría la  Superación de la Línea de Pobreza Familiar al año 2012.


Como actual Ministro de Hacienda,  la propuesta de Felipe Larraín y del gobierno del Presidente Piñera de $193.000 mensuales, solo representa un 56% del nivel actual de la Línea de Superación de la Pobreza Familiar.


Esta nota la consideramos como un complemento a los estudios sobre Salario Mínimo de la Fundación SOL, que podría  tenerse presente para ser aplicada  a través a de algunos años.


Sin embargo es muy probable que, el gobierno y Felipe Larraín persistan en su propuesta de $193.000 como Salario Mínimo   o con un mejoramiento pequeño, porque como dijo el reconocido  intelectual estadounidense,  Noam Chomsky en relación a los intelectuales en el poder:


“Ese tipo de gente es muy arrogante. Piensan que lo entienden todo y son muy peligrosos cuando se acercan al poder. Y las razones son obvias. Si cometen un error, tienen un problema, porque se les dio un puesto en el poder por su supuesta competencia e inteligencia. Entonces, ¿cómo pueden equivocarse? Por lo mismo tienden a perseverar en sus errores”.


Finalmente,  en esta nueva versión, la cita anterior se aplica al Presidente Piñera  y a  su Ministro de Hacienda, Felipe Larraín en relación al Salario Mínimo.


En relación al Fraude Estadístico en la medición de la Pobreza en Chile por parte del  Presidente Piiñera no nos sorprende. Es parte de su comportamiento como empresario y como político.  Sin embargo, nos sorprende el comportamiento ético de Felipe Larraín, como prestigiado académico,  y ahora, como político en el poder.


El Fraude Estadístico sobre la Pobreza se ha dado  durante los gobiernos de la Concertación y en el actual gobierno de Derecha. Esto refleja la profunda crisis de las instituciones políticas y de los políticos.

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