La periodista Sanjuana Martínez, de Monterrey, Estado Nuevo León, México, fue detenida aparatosamente el 5 de julio por orden de la jueza civil Luz María Guerrero Delgado, del Juzgado 15 de lo Familiar Oral, que procesa su divorcio del juez español Carlos Castresana Fernández, según informes de la prensa local.
Sanjuana Martínez es colaboradora del diario La Jornada y de la revista Proceso, muy conocida por su postura crítica ante el poder y su lucha a favor de mujeres y niños víctimas de maltrato. El 2 de julio publicó un análisis en Sin Embargo sobre el cohecho al por mayor y otras irregularidades desplegadas el día anterior durante las elecciones presidenciales (ver http://www.sinembargo.mx/opinion/02-07-2012/7923).
Oficialmente el arresto de la periodista por “juicio de convivencia” tiene carácter administrativo y se trata de un proceso civil, no penal, por lo que llama la atención que haya sido conducida a una celda como delincuente. Algunos sectores anotan una suerte de venganza personal de la jueza que ordenó la detención porque ya tuvo conflictos anteriores de tipo político con la periodista Sanjuana Martínez.
La policía nunca notificó a la interesada el motivo de su detención ni exhibió orden de aprehensión. Cuando Sanjuana Martínez ya se encontraba detenida, su abogada pudo conocer una copia de la orden de captura de la jueza Guerrero Delgado. El motivo que menciona la magistrado es el divorcio de la periodista y el juez Carlos Castresana, quien interpuso una demanda para quitarle la custodia de sus hijos. La jueza ya había amenazado a la periodista con quitarle tales derechos.
El conflicto de la periodista con la jueza se originó cuando Sanjuana Martínez hizo un reportaje –denuncia del allanamiento del albergue para mujeres víctimas de violencia física “Alternativas Pacíficas”, ordenado por Guerrero Delgado en septiembre de 2008 para llevarse a dos menores. El allanamiento favoreció a un agresor, cuya esposa estaba refugiada allí como víctima de violencia conyugal, pero le quitaron a sus dos hijos. La policía también detuvo a María del Mar Álvarez Morales, directora de la ONG.
Hace más de un año, la periodista buscó ayuda legal en la organización “Alternativas Pacíficas” porque su ex marido, el juez Castresana, la amenazó con llevarse a sus hijos a España, según el portal SinEmbargo.mx. La periodista ha escrito varios libros de investigación y denuncia de violaciones a los derechos humanos y delitos de lesa humanidad cometidos por curas pederastas contra niños y niñas de México, entre otros “Prueba de fe, manto púrpura. Pederastia clerical en tiempos del cardenal Norberto Rivera” y “La cara oculta del Vaticano”, además de numerosos artículos sobre esos temas. También documentó la desaparición de niños del albergue Casitas del Sur en el Distrito Federal con el libro “Se venden niños” y recientemente presentó “La frontera del narco”, que describe el impacto de la violencia del crimen organizado en el norte del país.