La Fundación Defendamos la Ciudad, respecto a la construcción de un mall en esa antigua ciudad fundada en 1567, informa que las declaraciones del alcalde Nelson Águila son insuficientes porque él mismo, como máxima autoridad municipal, tiene todas las atribuciones legales para que esa construcción se someta a las normas de edificación del Plan Regulador Comunal vigente.
Patricio Herman de Defendamos la Ciudad manifestó : “nos sorprendió que dicho alcalde se conforme con cursar multas al Juzgado de Policía Local por las ilegalidades detectadas por él mismo. No puede ser posible que la constructora edifique más pisos y más metros cuadrados que los aprobados por la Dirección de Obras Municipales y por ello tenemos el deber de recordarle a dicho alcalde que el artículo 148º de la Ley General de Urbanismo y Construcciones expresa que, previa petición del Director de Obras, él debe decretar la demolición de toda construcción que no cumpla con las disposiciones legales.
En el evento de que el alcalde Águila sienta temor de firmar ese decreto, por las razones que sean, es deber del Seremi de Vivienda y Urbanismo, conforme al artículo 157º de esa misma ley, que ordene la paralización de las obras ilegales, con el auxilio de la fuerza pública, tal como le gusta al ministro del Interior para mantener el orden público. Y enseguida proceda a demoler todas las construcciones que contravienen el permiso de edificación y por lo tanto las normas del Plan Regulador Comunal .