Febrero 14, 2025

El cambio climático: un reto político

El calentamiento global es una de las mayores amenazas que pesan sobre el planeta. Éste fue uno de los consensos entre mas de cien participantes de alto nivel que concurrieron al seminario “Cambio climático un reto político”convocado por la Presidencia del Senado y la Fundación Friedrich Ebert.

 

Entre los expositores invitados destacaron el brasileño Luiz de Carvalho y Dimitri Zenghelis, coautor del reputado informe Stern.  Zenghelis planteó que no sólo asistimos a cambios sustantivos en la geografía física del planeta, sino también a transformaciones sobre la geografía humana, con transmigraciones provocadas por los efectos del calentamiento global. El analista británico subrayó que cuanto más se demore en tomar medidas efectivas al respecto, mayores serán los costos económicos y humanos. También señaló que los mercados han agravado la situación al carecer de una visión global de largo plazo. Sin embargo Zenghelis destaca la disposición que habría por parte de importantes sectores de la economía privada para  invertir en la producción industrial “verde” si, por su parte, los Estados dieran señales de apoyo en este sentido. En definitiva, a su juicio, es indispensable el rol regulador de los Estados para reducir las emisiones de CO2, causantes del efecto invernadero.


Por su parte, Luiz de Carvalho, asesor especial del  Ministerio del Medio Ambiente de Brasil, postuló que es necesario no sólo hablar de desarrollo sustentable, sino también inclusivo. Con ello alude a la necesidad de enfrentar de modo integral las cuestiones más álgidas del desarrollo,  encarando simultáneamente los problemas vinculados a la pobreza y los medioambientales. Al plantear la planificación del gobierno brasileño en la materia, de Carvalho destacó el sistemático esfuerzo puesto en excluir al máximo el uso del carbón, uno de los combustibles más contaminantes. Según el experto, las mayores emisiones en Brasil son causadas por deforestación, proceso que viene en franco retroceso en su país, que ya ha logrado alcanzar el 70% de las metas de reducción de emisiones de dióxido de carbono.


En lo que respecta  a Chile,  diversos participantes subrayaron la debilidad del Estado a la hora de hacer cumplir las regulaciones. Flavia Liberona, de la Fundación Terram, fue aun más lejos al señalar que, en realidad no se trata de una mera cuestión de cumplimiento, sino que los gobiernos, en general, han carecido de regulaciones mínimas en la materia. En consecuencia, aunque quisieran imponer restricciones,  a menudo carecen de los instrumentos legales para hacerlo. Desde una perspectiva crítica, Santiago Escobar, coordinador editorial de El Mostrador, denunció en su exposición el encubrimiento de graves problemáticas medioambientales por parte de diversos medios de comunicación. Este punto  fue profundizado por Marcos Enríquez- Ominami, presidente del PRO,  que apuntó a la estrecha conexión que existe entre ciertos canales de televisión y periódicos y determinados grupos económicos particularmente interesado en silenciar  conflictos ambientales.


Desde la mirada de la sociedad, varios participantes acusaron la exclusión de las organizaciones ciudadanas en la toma de decisiones que les afectan directamente. Ello es especialmente conflictivo en la zona norte del país, en donde escasea el agua. De acuerdo con lo señalado por Carlos Pérez, consejero regional de la provincia de Copiapó, algunas mineras situadas en la alta cordillera consumen las mejores aguas, en tanto que la población recibe poco agua y de menor calidad en lo que respecta a su pureza.


Una de las conclusiones que generó mayor consenso en el evento fue la evidente necesidad de buscar vías de comunicación ciudadana en este ámbito. Esto implica no sólo que la ciudadanía pueda acceder a información transparente y de calidad, sino también poder activar canales para plantear sus inquietudes y demandas  frente a los organismos e instituciones competentes en la materia. La participación ciudadana es, indudablemente, un componente fundamental para la construcción de una política pública viable en el mediano y largo plazo.

Agregar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos requeridos están marcados *