México DF.- En entrevista con Clarín.cl Rafael Barajas (1956), habla del libro Narcotráfico para inocentes. El narco en México y quien lo USA: “Así como la gente se hace adicta a las drogas, la economía global es adicta al dinero del narcotráfico. México padece una profunda adicción al dinero de las drogas; aquí se mueven 45 mil millones de dólares anuales, el 12.5% del dinero de la droga mundial. La guerra de Felipe Calderón no es una guerra fallida, ha cumplido sus objetivos: consolidar las rutas de la droga a Estados Unidos y la contención de un estallido social, mediante la militarización del país. No creo que México sea un Estado fallido, es un Estado coludido con el crimen organizado, infiltrado por el narcotráfico”.
Autor de: Cómo sobrevivir al neoliberalismo sin dejar de ser mexicano (1996); La historia de un país en caricatura (2000); La canallada del desafuero para principiantes (2005); El país de El Ahuizote (FCE, 2005); La Bola de la Independencia (2007);.El país del Llorón de Icamole (2008); Sólo me río cuando me duele (2008); Dulce Venganza (2009); Cómo la hacen de Pemex (2010); Felipe de Jesús El Pequeño (Planeta, 2010); Narcotráfico para inocentes. El narco en México y quién lo U.S.A. (El Chamuco, 2011), entre otros libros de humor gráfico. En 2010, El Fisgón recibió el Premio La Catrina –durante la Feria Internacional del Libro de Guadalajara- y desde 2006 codirige la revista El Chamuco.
El Fisgón, en tono de broma declaró al Clarín: “Si hubiera titulado mi libro ‘Narcotráfico para principiantes’ seguramente lo habrían comprado muchas personas interesadas en poner su negocio, lo hubieran visto como un manual de cultivo para microempresarios emprendedores (risas)”; sin embargo, hablando en serio, Rafael Barajas afirmó: “No se está persiguiendo en serio al crimen organizado, porque mientras sigan fluyendo los recursos económicos, el crimen tendrá dinero para comprar drogas y armas, para corromper políticos, para comprar sicarios y funcionarios. La militarización permite controlar a la población, aquí se preveía un estallido social de gran alcance, en respuesta a las reformas neoliberales y al fraude electoral del 2006, pero la militarización cortó de tajo al movimiento social, la militarización impide toda rebelión social, es una forma extrema que tiene el gobierno para utilizar al Ejército”.
MC.- ¿Por qué publicaste “Narcotráfico para inocentes” en la editorial del Chamuco?, ¿para evitar la censura?
RB.- Inauguramos la editorial El Chamuco porque siempre será preferible tener el control total de tus proyectos, de principio a fin, para estar al pendiente de la producción y la venta de tus libros. Creemos que ha cambiado el mundo editorial, nosotros tenemos una relación directa con nuestros lectores, y con El Chamuco podemos hacer y dibujar lo que se nos da la gana.
MC.- ¿Cuál es la hipótesis a dibujar y documentar en Narcotráfico para inocentes?
RB.- Mi libro pretende explicar –a partir de datos duros- cuáles son las lógicas detrás del narcotráfico y de la guerra de Calderón. La hipótesis está fundamentada en una idea de Galileo: “Todo es fácil de entender, lo que hay que saber es qué mecanismos mueven las cosas”. En mi libro analizo qué hilos se mueven detrás del tráfico de las drogas, no es un libro de grandes revelaciones, no te voy a decir que el Chapo Guzmán es en realidad Batman, lo que sí hace el libro es recopilar la información –datos dispersos de dominio público-, partí de cosas muy básicas: quién está detrás de la guerra de la droga a quién beneficia, qué pasa con el dinero de la droga en México, son preguntas elementales que de alguna manera están contestadas en la prensa, pero todavía no está organizada la información; la mayoría de los datos están tomados de investigaciones académicas, algunas obras clásicas como: “Las políticas de la heroína en el sudeste asiatico” de Alfred Mc Coy, en informes del Congreso Norteamericano y en los trabajos periodísticos muy bien acreditados –como el libro de Anabel Hernández “Los señores del narco”-, traté de organizar el rompecabezas, porque las piezas estaban desperdigadas.
MC.- El caricaturista Rius inauguró –en 1960- la serie de humor gráfico y pedagogía: “Para principiantes”, ¿Narcotráfico para inocentes, o para principiantes?
RB.- Si hubiera titulado mi libro “Narcotráfico para principiantes” seguramente lo habrían comprado muchas personas interesadas en poner su negocio, lo hubieran visto como un manual de cultivo para microempresarios emprendedores (risas), y esa no es la intención del libro. Obviamente lo bauticé “Narcotráfico para inocentes. El narco en México y quien lo U.S.A.” porque es un libro para nosotros, la gente que no está metida en el negocio de las drogas.
MC.- ¿Qué puntos de referencias explicarían la guerra de Felipe Calderón?
RB.- El primer antecedente se remonta a la guerra del opio de Inglaterra contra China (1839-1842), y la información más reciente proviene de Internet, a través de WikiLeaks, ahora tenemos la confirmación de cómo opera la Embajada de Estados Unidos. Uno de los cables de WikiLeaks (folio: 06México4937) refiere que -el 1 de septiembre de 2006- Calderón fue a la Embajada norteamericana a pedir ayuda, porque se encontraba en una situación muy precaria –desde el punto de vista político-, en el cable, el Embajador Carlos Pascual evaluó que -en efecto- Calderón se encontraba en un estado de vulnerabilidad y Estados Unidos decidió apuntalarlo, creando una misión de la Embajada que trabajó con el equipo de Calderón en los asuntos que son prioridad para Estados Unidos (cable de WikiLeaks publicado por La Jornada 21.02.2011). No sabemos quién integró el equipo, ni cómo trabajó, pero el tema prioritario para Estados Unidos es la “guerra contra el narcotráfico”; en mi libro explico el papel de Estados Unidos en las guerras de la droga a lo largo de la historia.
MC.- Analicemos el principio, ¿cómo participó Estados Unidos en la guerra del opio?
RB.- En la guerra de Inglaterra contra China participaron comerciantes norteamericanos, el gran promotor de la guerra fue William Jardine, propietario de la empresa norteamericana Jardine-Matheson y su operador fue Warren Delano –abuelo de Franklin Delano Roosvelt-, si haces una revisión de las guerras de la droga durante los últimos 60 años, te darás cuenta que en todas participó Estados Unidos: en China, Vietnam, Afganistán, Japón, Camboya, Laos, Birmania, Tailandia, e Indochina, también en la “French Connection” entre la mafia corsa y siciliana, y por supuesto en Sudamérica con el Plan Colombia y en Centroamérica con la Contra nicaragüense y los Kaibiles guatemaltecos, la pregunta sería: ¿México es la excepción?, la historia confirma que México no es la excepción de la regla.
MC.- ¿De qué forma intervienen los Estados Unidos?, ¿cuál es su modus operandi?
RB.- El Congreso Norteamericano y académicos han documentado que las Agencias Secretas Norteamericanas organizaron muchas de las redes y rutas del tráfico de drogas durante 60 años, esto no te resulta novedoso, lo sabemos. En México los gringos están metidos en todos los niveles, desde Washington hasta la CIA y el Pentágono, lo que acabos de ver del Operativo Rápido y Furioso no es un accidente, no es un operativo de armas fuera de control, es la norma, así funcionan, así se organizan. El gran operador de las redes de la venta de cocaína entre México y Estados Unidos es un señor de nombre Alfredo Sicilia Falcone y cuando lo detienen confesó: “yo soy un informante de la CIA y ellos están al tanto de mis actividades, la CIA me ayudó a instalar el negocio para ayudar a la Contra nicaragüense”. Al revisar los documentos del Congreso de Estados Unidos sobre el Caso Irán-Contras encontrarás abundantes testimonios de cómo los narcotraficantes colombianos –del Cártel de Medellín- y los narcotraficantes mexicanos –del Cártel de Guadalajara- fueron respaldados por la CIA a cambio de un derecho de piso: apoyar con armas y financiamiento a la Contra nicaragüense. La lista del intervencionismo norteamericano es interminable.
MC.- ¿Qué rol juega Estados Unidos en lavado de dinero del narcotráfico mexicano?
RB.- Así como la gente se hace adicta a las drogas, la economía global es adicta al dinero del narcotráfico. México padece una profunda adicción al dinero de las drogas; revisa los datos: aquí se mueven 40 mil millones de dólares anuales –el 12.5% del dinero de la droga mundial-, pero dónde se maneja esa plata: un Estudio Binacional de aduanas México-Estados Unidos asegura que el 90% de los recursos del narco ingresaban en efectivo desde Estados Unidos y que el 50% llegaba al sistema financiero mexicano. En 2001, un juez de Florida multó con 110 millones de dólares al Banco Wachowia por lavar 378 millones de dólares del Cártel de Sinaloa entre 2004 y 2007; Ed Woods, el policía del Caso Wachowia, citado por Ed Vuillamy, afirmó: “los puntos de lavado de dinero son el Citygroup y Wall Street” (The Observer 3.04.2011), entonces cómo le hacen los criminales para mover esas cantidades en efectivo, el tema de fondo es: si de golpe se retira el dinero del narco en el sistema financiero mexicano, la macroeconomía sufriría un colapso total; eso te explica por qué no se persigue el lavado de dinero, la detención de criminales de cuello blanco es un chiste, aquí los Servicios de Inteligencia sólo arrestan a las señoras que llevan una bolsa de billetes, pura gente menor está en la cárcel. El lavado de dinero es factor de estabilidad del sistema financiero.
MC.- ¿La guerra “contra el narcotráfico” es un pretexto para militarizar al país?
RB.- Lo que te estoy contando sobre el lavado de dinero, me obliga a pensar que no se está persiguiendo en serio al crimen organizado, porque mientras sigan fluyendo los recursos económicos, el crimen tendrá dinero para comprar drogas y armas, para corromper políticos, para comprar sicarios y funcionarios. La militarización permite controlar a la población, aquí se preveía un estallido social de gran alcance, en respuesta a las reformas neoliberales y al fraude electoral del 2006, pero la militarización cortó de tajo al movimiento social, la militarización impide toda rebelión social, es una forma extrema que tiene el gobierno para utilizar al Ejército.
MC.- El régimen de Felipe Calderón criminaliza a los Defensores de Derechos Humanos; Rafael eres uno de los promotores del Juicio a Calderón ante la Corte Penal Internacional de La Haya, ¿percibes alguna criminalización por tus investigaciones y opiniones gráficas?
RB.- La sociedad está criminalizada en general, los caricaturistas no estamos criminalizados en particular; es verdad que los moneros no gozamos de los afectos del gobierno –no tengo la menor duda-, sin embargo las autoridades criminalizan a la sociedad cuando arrestan a jóvenes twitteros en Veracruz, hay una persecución sistemática en contra de la población que protesta, recuerda el Caso de la familia Reyes Salazar, los asesinatos de Nepomuceno Moreno, y de Marisela Escobedo; Josefina Reyes documentaba los abusos del Ejército y la línea de investigación sobre su asesinato involucra a los militares; a Marisela Escobedo le dispararon frente al Palacio de Gobierno de Chihuahua, ambos crímenes quedaron impunes, así van inhibiendo la protesta social; es increíble el Caso de Nepomuceno Moreno porque la primera línea oficial fue difamar a don Nepo, inventándole supuestos vínculos con el narco en Sonora, es la vieja lógica gubernamental de criminalizar a las víctimas.
MC.- Finalmente, ¿sobrevivimos en medio de un Estado fallido?
RB.- La guerra de Calderón no es una guerra fallida, ha cumplido sus objetivos: consolidar las rutas de la droga a Estados Unidos y la contención de un estallido social, mediante la militarización del país. No creo que México sea un Estado fallido, es un Estado coludido con el crimen organizado, infiltrado por el narcotráfico.