Al menos mil 500 fallecidos y 88 mil personas desparecidas se han contabilizado en Japón, después del devastador terremoto de magnitud 8,9 en la escala de Ritcher y el tsunami que se registró este viernes, informó la agencia de noticias oficial Kyodo.
Unos 200 cadáveres fueron encontrados en Sendai, en la prefectura de Miyagi (noreste de Japón).
La policía nipona supone que los cuerpos corresponden a pobladores de la zona, que muerieron ahogados producto del tsunami que, con olas de hasta 10 metros, arrastró docenas de vehículos y viviendas
La evaluación policial es provisional, pues les resulta difícil reunir los datos de las regiones afectadas por los desastres naturales.
“Los daños son tan importantes que necesitamos más tiempo para juntar datos que están muy dispersos”, afirmó un vocero de la policía.
El canal público de televisión, NHK, indicó que el número de muertos podría ser aún más elevado.
El terremoto es considerado el más fuerte, sufrido, en la historia de Japón. El temblor de magnitud 8,9 tuvo tres réplicas de -al menos- magnitud 7. El hecho, paralizó temporalmente el transporte en gran parte de Japón, suspendió el servicio de tren bala o Shinkansen y cerró los dos aeropuertos de Tokio.
Algunos servicios ya han sido parcialmente restablecidos, indicaron las agencias de noticias internacionales.
Tokio, ciudad con más de 30 millones de habitantes, comenzó a temblar a las 05H46 GMT debido a un sismo que se produjo en el Océano Pacífico, a 20 kilómetros de profundidad y 130 kilómetros de la costa.
Sendai, a unos 350 kilómetros de Tokio y con un millón de habitantes, ha sido una de las ciudades más golpeadas por el seísmo.
Las autoridades comenzaron la búsqueda los cientos de desaparecidos, entre ellos los pasajeros de un barco que transportaba por lo menos un centenar de viajeros, y dos patrulleras de la guardia costera arrastradas por las aguas.