Noviembre 1, 2024

Chile, cinismo de excelencia

milicosparada_86x100

milicosparada_86x100“Si tuviéramos que pasar a retiro a todos los oficiales que cumplieron funciones en la CNI, nos quedaríamos con el 20% menos de los oficiales en las fuerzas armadas”. Esta frase para el bronce espetada por el locuaz Francisco Vidal, nos lleva a plantear algunas cuestiones que de por sí, se caen de maduras:

 

 

Primero: que hay un reconocimiento por parte del ex ministro de Defensa, que las Fuerzas Armadas actuaron institucionalmente en una asociación ilícita terrorista y no, como expresó reiteradamente el general Pinochet, que eran “salidas de madre de algunos oficiales menores”, sin que él estuviera informado, ni menos dado la orden.

 

Segundo: que con ese criterio, si en el caso hipotético, que en un hospital público el 20% de los médicos aplicara, conscientemente, un “medicamento” que lleve, irremediablemente a la muerte de los pacientes (eutanasia), no se les podría acusar de asesinato, porque el susodicho hospital, se quedaría con el 20% menos de médicos, (y con la falta que hacen).

 

Tercero: que, independientemente de las funciones cumplidas en una asociación ilícita terrorista, significaría un gran ahorro para el erario nacional, y  con ese dinero ahorrado, se podría contratar a unos médicos con ética, que reemplacen a los colegas que fueron despedidos por aplicar la eutanasia, por supuesto, con mejores sueldos. Y también por supuesto, invertir en salud y educación. Por lo demás,  sería una excelente oportunidad para limpiar a las Fuerzas Armadas de los funcionarios que enlodan el “prestigio” con que cuentan en la ciudadanía.

 

Ahora bien, para referirnos más concretamente a los conceptos que dan título a esta nota, es importante traer a colación el doble estándar (como se dice ahora) con que actúa la ultraderecha en nuestro país. De acuerdo con lo expresado por el actual ministro de defensa, por el ministro del interior, y por el propio Presidente de la República, “si los oficiales en cuestión no cometieron ningún acto en contra de los derechos humanos, no se les puede culpar por el sólo hecho de pertenecer a la CNI”.

 

Sin embargo, el propio señor Hinzpeter ha dicho textualmente: “tener vínculos con el terrorismo es un delito”,   al referirse a las personas  acusadas, hasta ahora sin pruebas, por el gobierno de Colombia. En el caso de los oficiales de “nuestras” Fuerzas Armadas, a reconocimiento de parte, relevo de pruebas.

 

Pero esto no es todo; el señor Piñera, con motivo de la formalización de detención de 14 personas “vinculadas” a los atentados con bombas, el día 20 de agosto de 2010, se manda esta preciosa obra de antología en el arte de la prosopopeya:

 

“Hoy en día, que ha quedado demostrado que existe vinculación entre grupos de terroristas de las FARC, creo que muchos tienen que dar explicaciones, porque al menos nuestro gobierno no va a tener ninguna contemplación, ninguna debilidad y va a combatir el terrorismo con toda la fuerza del mundo. Todo aquel que haya tenido conexiones de cualquier índole con grupos terroristas le debe una explicación a nuestro país. No solamente los que han tenido colaboración operativa en actos de terrorismo mismo, sino los que han tenido colaboración a nivel político. Porque a los terroristas hay que combatirlos en todos los frentes, no hay que darles ni un centímetro de ventaja y aplicarles siempre, en toda circunstancia y en todo lugar, todo el rigor de la ley”.

 

Entonces, señor Presidente, para no abrumarlo, vamos por parte:

 

Primero: que sólo en su imaginación y en la de su ministro del interior, ha quedado demostrada  esa tan anhelada  vinculación, pues hasta ahora, las también tan anheladas pruebas no aparecen por ningún lado. Lo que sí está totalmente demostrado, es su propio vínculo con un gobierno extranjero del cual fue presidente (gracias al soborno), un personaje acusado de narcotraficante, de tener vínculos con los paramilitares, asesino (ya se han encontrado por lo menos dos fosas comunes con miles de inocentes asesinados durante su mandato (los famosos falsos positivos)  etc., etc., etc. Es el mismo personaje invitado por su gobierno para dictar cátedra sobre seguridad, a su ministro del interior y a los alcaldes de la alianza oficialista. ¿Esos son los métodos que usted, señor Piñera empleará para “combatir a los terroristas en todos los frentes, en toda circunstancia y en todo lugar”?

 

Segundo: “nuestro país” está esperando la explicación de por los menos “ese 20% de oficiales” que sí cumplieron funciones en la CNI, una “asociación ilícita terrorista”.

 

Tercero: ¿su gobierno, efectivamente, “no va a tener ninguna contemplación, ninguna debilidad para combatir el terrorismo con toda la fuerza del mundo”, para “aplicar en toda circunstancia y en todo lugar, todo el rigor de la ley”, a ese ya tan mentado “20% de oficiales” que cumplieron funciones en la CNI, una “asociación ilícita terrorista”?

 

Cuarto: Si su respuesta a la pregunta anterior es afirmativa, ahora sí que “efectivamente” va a tener que emplear “toda la fuerza del mundo” (no sé si el gobierno de Colombia y el de Estados Unidos estarán dispuestos a proporcionarle esa fuerza para tan noble propósito) con el objeto de “no darles ni un centímetro de ventaja y aplicarles siempre, en toda circunstancia y en todo lugar, todo el rigor de la ley” a ese (otra vez), 20% de oficiales” que sí cumplieron funciones en la CNI, una “asociación ilícita terrorista”.

 

Por último, estimado Presidente, permítame darle un consejo: dígale a su vocera de gobierno y a su ministro de defensa (que también quiere mucho a Álvaro Uribe),  que no sigan dando como excusa que, “respecto a los oficiales de las Fuerzas Armadas se ha seguido la misma doctrina aplicada por los gobiernos de la Concertación”. Esto no sólo no es garantía de nada, (para qué le explico por qué), sino que, por el contrario, los desprestigia a ustedes aún más (¿es posible?). Creo que sería mucho mejor, que solicitara asesoría al senador Espina. En una de esas, ese “20% de oficiales”, es pura imaginación del parlamentario, pues si el afirma que sí son terroristas, es posible que no aparezcan las pruebas por ningún lado.

 

Que conste, señor Presidente, que no me he referido a la “vinculación política” de los civiles que colaboraron con la dictadura cívico-militar, pues, como usted comprenderá,  la CNI, asociación ilícita terrorista, no se mandaba sola, y dependía directamente del “gobierno” de la época, y el gobierno está constituido por personas de carne y hueso que, obviamente “han tenido colaboración a nivel político” con ese gobierno.  

 

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