A las 8 de la mañana de este domingo 6 de febrero, un nutrido contingente policial procedió a desalojar las tierras de la familia Hito, donde se emplaza el Hotel Hanga Roa. Esta acción ocurre poco antes que se realice en el Juzgado de Garantía de Isla de Pascua, la audiencia de formalización contra 17 miembros de Clan Hito acusados por el Ministerio Público de usurpación de tierras.
Los agentes se desplazaban en dos furgones de Carabineros, y en dos minibuses Mercedes Benz, sin patente, pertenecientes al Grupo Schiess, inversionistas del Hotel. Vestían equipos de asalto e iban provistos de una orden de desalojo signada por el fiscal Samuel Yañez. En esta se sostenía que, “conforme a las normas contenidas en el artículo 83 del Código de Procedimiento Penal”, relacionadas con el accionar policial ante delitos flagrantes, se ordenaba el desalojo del recinto. El supuesto delito flagrante sería la acción de reivindicación de tierras que los Hito mantienen desde el 2 de agosto, hecho que es público y notorio.
El desalojo fue violento. Los policías detuvieron a Marisol Hito y a Angela Tuki Atán. Para hacerlo rompieron los vidrios de la puerta de entrada del Lobby del Hotel. Ellas fueron trasladadas por la fuerza a la Comisaria de Mataveri y luego liberadas, sin que se les hiciera el control de detención. De acuerdo al abogado de los Hito y ex fiscal de Isla de Pascua, Oscar Vargas, este “ilegal proceder” buscaba evitar que esta detención pasara por el control jurisdiccional del Tribunal de Garantía.
Los otros miembros de la familia fueron sacados del Hotel sin ser detenidos, como fue el caso de la matriarca del clan Magdalena Hito. Cabe tener presente que desde el 14 de enero pasado el Hotel estaba sitiado por Carabineros que actuaban por orden de Fiscalía. Esta decretó aquel día no permitir ingreso de personas al Hotel, en base a la proximidad de la audiencia. Después de algunos días sin dejar pasar ni alimentos ni remedios, autorizó el ingreso de estos, tomando registro y fotografías de quienes lo entregaban. Este bloqueo y hostigamiento a los Hito motivó pronunciamientos del relator para pueblos Indígenas de la ONU, James Anaya; de la Cruz Roja Internacional y de miembros del Congreso de Estados Unidos, entre otros.
Este terreno en disputa, fue prestado por los Hito al Estado hace 40 años, sin que nunca les haya sido devuelto. Más grave: el Estado de Chile lo vendió a un empresario no rapanui, en 1981, sin ser el dueño y vulnerando en forma alevosa la Ley Pascua -de 1966- que reserva la propiedad de la tierra a los rapanui y al Estado.
Volviendo al desalojo de este domingo: cuando en la Isla eran las 14 horas, el Hotel se encontraba acordonado por un gran número de fuerzas policiales que impedían acercarse a él. En ese contexto fue detenida por diez funcionarios policiales y arrastrada por el suelo Trinidad Ferrada de Tuki-Hito, miembro del mencionado Clan y principal colaboradora de Prensa Rapa Nui. Su delito: intentar fotografiar el accionar policial. La brutal acción trató de ser impedida por miembros del Clan lo que fueron repelidos por Carabineros sin que se produjeran mayores incidentes, debido a la actitud pacífica que en todo momento tuvieron los Hito.
Según la vocera de los Hito, Marisol Hito, “por la vía de los hechos consumados, el Gobierno del presidente Sebastián Piñera, y su ministro de Interior Rodrigo Hinzpeter han intentado consagrar –con el desalojo ilegal de hoy- la más importante norma no escrita de la institucionalidad chilena: el poder económico está por sobre las leyes, los pueblos y el bien común. Y eso es inaceptable”.
Francisco Marín, encargado de Prensa Rapa Nui y representante de los Hito en el Continente, expresó además su protesta ante el maltrato contra “Trini” y ante “la constante actitud de Carabineros de impedir que queden registros de sus procedimientos violentos”. Hizo un llamado a los organismos internacionales a cautelar la libertad de información en Rapa Nui la que -según su parecer- está siendo seriamente vulnerada.
Es importante destacar que en los últimos meses y en dos ocasiones el Ministerio Público solicitó al Juzgado de Garantía de Isla de Pascua permiso para ingresar al Hotel con el fin de registrarlo, lo que le fue denegado por el Tribunal.
Asimismo, la Corte Suprema determinó –el 14 de enero- rechazar un recurso de protección presentado en agosto pasado por los Schiess y que buscaba se ordenara el desalojo. El máximo Tribunal afirmó en la ocasión que no puede prosperar una acción cautelar por la toma de los terrenos, ya que el conflicto jurídico entre los propietarios del Hotel Hanga Roa y los integrantes de la familia Hito está siendo solucionado por otras vías legales. Se refería al juicio originado en una acción reivindicatoria de los Hito contra los Schiess que se tramita –desde 2007- en el Juzgado de Isla de Pascua.
La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) era la única instancia internacional que podía haber detenido este proceso de desalojos contra el pueblo Rapa Nui. Desde el 9 de septiembre la CIDH tramita una solicitud de medidas cautelares a favor del pueblo Rapa Nui que hasta el momento del último desalojo ilegal, nunca llegó, a pesar de la enorme evidencia existente. Y de los violentos desalojos ocurridos el 3 y 29 de diciembre pasados que provocaron el espanto y la repulsa internacional. Según Marisol Hito, esto “demuestra la precariedad del sistema interamericano de justicia y la desprotección a la que está expuesto el pueblo Rapa Nui (entre otros pueblos originarios), que está siendo avasallado sin que los organismos competentes, como la Comisión, hagan algo para detenerlo”.
Con este desalojo se termina –por ahora- la última de las recuperaciones de tierras realizadas por los rapanui y que tuvieron lugar tras el eclipse del 11 de julio pasado.
El actual proceso de recuperación de tierras es el más fuerte movimiento reivindicativo de los Rapa Nui, desde que en 1964 partieran las movilizaciones que derivaron en la dictación de la Ley Pascua de 1966.