La entrevista realizada por Mauricio Becerra al Ex Presidente Ricardo Lagos, publicada en el último número de El Ciudadano, debe ser de las mejores realizadas a este personaje. En ella, Mauricio insta a Lagos a expresar su opinión y evaluación en temas de vital importancia para el Chile de hoy y venidero; cuestionario impecable, que es imposible que se pueda realizar en otro medio informativo, normalmente pauteado por editores proclives a la adulación y a la pregunta fácil y “humana”.
En ella, a través de sus declaraciones, se deja en claro que Lagos y por extensión la Concertación, jamás va a escuchar las quejas de la galería, más aún, irrita su extrema satisfacción por “la gran obra” realizada.
Es obvio que no hay diálogo posible ni decente con autoridades y políticos con cero autocrítica y nula capacidad de ver el terrible daño que le han causado a Chile. Ciertamente, para ellos una carretera en más importante que cualquier ley que otorgue más participación a sus súbditos.
Es la política nefasta del Co-gobierno y democracia en la medida de lo posible, que nos han regido en estos largas años.
Seguramente, si acepta ir a elecciónes, Bachelet, seguirá el mismo derrotero, toda vez que jamás se le ha escuchado algo que indique lo contrario. Entusiasta exponente del Chile neoliberal y de los bonos conducentes al clientelismo y quietismo, no va a cambiar su visión de lo que el país reclama. Es la desgracia de un país gobernado por gente que está en el Olimpo; desde allá todo se ve perfecto.
La misión de los que quieren Chile distinto, es demoler la “gran obra realizada” denunciar el robo legalizado de los recursos naturales, aclarar a la ciudadanía los fundamentos de lo que en ellos se ha hecho carne (el abuso) y no aceptar excusas del tipo “no tuvimos mayoría”, “luché denodadamente, no se pudo”; dado que accedieron al poder a costa de la lucha de cientos de personas, muchos de los cuales hoy no están.
Afortunadamente, las declaraciones de estos políticos respecto a una Asamblea Constituyente o iniciativas de más participación y democracia, va separando aguas y permite identificar quienes se opondrán a cualquier intento de dignidad, allí están los Escalona, Tarud, el mismo Lagos… quienes ya van configurando el Programa Bachelet.
Por ello, es de la mayor importancia “la Cumbre Ciudadana” realizada estos días, allí dirigentes como Iván Fuentes tendrán que aclarar su postura frente a un conglomerado apestoso y rechazado.
Esta cumbre deberá incluir todas las miradas de país y pronunciarse sobre la vuelta al poder de gente que, en la práctica, no va a otorgar ninguna concesión ni cambios fundamentales. Debe ser oposición a todo ese engranaje Concertación- Alianza, si quiere llegar a su meta de “otro Chile”.
Otro Chile es posible, pero solo si se explicita la calidad del debate y no se contamina con los mismos de siempre, quienes llegan marcando pauta para terminar en nada.
Además, se requiere el concurso de miles, el pueblo decidirá: sigue con el montaje de la transición o quiere ser adulto y hacerse cargo de su futuro.
Sólo de esta forma, a la interrogación-pregunta de Lagos a Mauricio Becerra, al lector en realidad “Entiendes tú lo que es gobernar”? podríamos responder “ Entiende usted lo que es Dignidad”? y mandarlo para su casa.
Víctor González, Comunicador Visual.