La probabilidad de un conflicto militar entre EE. UU. e Irán es más alto ahora que en cualquier momento en más de dos décadas, afirman analistas militares, mientras las tensiones continúan escalando sobre el programa nuclear iraní y la estruendosa retórica.
Mientras que una guerra en toda regla podría no estar en el horizonte inmediato, las condiciones para una escaramuza militar están tan maduras como han estado desde 1.988, cuando Irán sembró minas contra buques estadounidenses en el Golfo Pérsico y EE.UU. destruyó plataformas petroleras.
“La probabilidad de un conflicto armado entre EE.UU. e Irán es ahora más alto que en cualquier momento desde 1.988, y el riesgo solamente aumentará durante el próximo año mientras el programa nuclear de Irán continúa desarrollándose”, dijo Mathew Kroening, miembro del Consejo de Relaciones Exteriores (CFR).
Los recientes incidentes entre Irán y Occidente proporcionan un nuevo entorno para la política de EE.UU., mientras el Congreso regresa al Capitolio el jueves y la temporada electoral presidencial 2012 se calienta.
El comité de Servicios Armados de la Cámara de Representantes sostendrá reuniones a puerta cerrada sobre Irán el miércoles, según afirman miembros del comité.
La carrera presidencial ha sido preparada para ser una elección sobre asuntos internos y la economía, pero Irán podría cambiar el cálculo político. Las tensiones también podrían poner en peligro el récord que ha construido Obama en política exterior durante sus tres primeros años, si Irán fuera a ejecutar a un ex infante de marina estadounidense que ha condenado a muerte, por ejemplo, o si Israel lanzara un ataque unilateral.
“Irán puede cambiar el asunto”, expresó Michael Rubin, un académico residente del American Enterprise Institute. “Obama puede que quiera hacer de esto un tema nacional y los republicanos también pero los iraníes ciertamente pueden tirar eso por la borda”.
Anthony Cordesman, analista del Centro de Estrategia y Estudios Internacionales y asesor del Pentágono, dijo que el escenario más plausible es que Irán empuje poco a poco la subida de precios del petróleo y haga hincapié en su capacidad de hacer amenazas “, sin dar lugar al tipo de enfrentamiento con EE.UU. que podría costarle su fuerza aérea, instalaciones de producción militar y todo un rango de otros objetivos”.
Traducción por Ivana Cardinale para Patria Grande