La Asociación por la Memoria y los Derechos Humanos Colonia Dignidad rechaza la entrega del premio Nacional de Medicina al psiquiatra Otto Dörr por su vinculación con el “enclave criminal de Colonia
Dignidad, cuyo carácter delictual ha quedado demostrado por diversos procesos judiciales por violaciones a los derechos humanos, asociación ilícita, abuso sexual a niños, entre otras”. La Asociación, afirma que el Doctor Otto Dörr formó parte del círculo de apoyo a la Colonia cuando se inició la investigación judicial por los delitos de pedofilia cometidos por Paul Schäffer contra niños chilenos, para lo cual contó con la ayuda y complicidad de jerarcas y miembros del enclave, como el doctor Harmut Hopp. De ello da cuenta una carta dirigida al Presidente de la República Eduardo Frei Ruiz-Tagle, suscrita por el Dr. Dörr junto a otras personas, en la que se abogaba a favor de la Colonia pues se consideraba que esta siendo asediada injustamente en virtud de los distintos procesos judiciales que le aquejaban.
DECLARACIÓN
El 28 de marzo se ha dado a conocer que el Premio Nacional de Medicina 2018 ha
recaído en el Doctor Otto Dörr. El otorgamiento de este reconocimiento se ha
hecho en virtud de “su exitosa trayectoria en el área clínica o de salud pública y
que, además, han tenido un rol destacado en docencia, administración académica
o investigación”, según indica el reglamento del citado premio.
Ante esta distinción, como organización de derechos humanos de la sociedad civil
que trabaja en la búsqueda de verdad y justicia por los crímenes de lesa
humanidad cometidos por la dictadura cívico-militar chilena en complicidad con
Colonia Dignidad, nos sorprende, escandaliza y lesiona gravemente que se premie
a profesionales sin considerar su vinculación con el enclave criminal de Colonia
Dignidad, cuyo carácter delictual ha quedado demostrado por diversos procesos
judiciales por violaciones a los derechos humanos, asociación ilícita, abuso sexual
a niños, entre otras.
El Doctor Otto Dörr formó parte del círculo de apoyo a la Colonia cuando se inició
la investigación judicial por los delitos de pedofilia cometidos por Paul Schäffer
contra niños chilenos, para lo cual contó con la ayuda y complicidad de jerarcas y
miembros del enclave, como el doctor Harmut Hopp. De ello da cuenta una carta
dirigida al Presidente de la República Eduardo Frei Ruiz-Tagle, suscrita por el Dr.
Dörr junto a otras personas, en la que se abogaba a favor de la Colonia pues se
consideraba que esta siendo asediada injustamente en virtud de los distintos
procesos judiciales que le aquejaban. En misivas enviadas a el diario El Mercurio
dice que la Colonia ha sufrido una “sistemática e injustificable persecución” a lo
largo de 30 años (véase El Mercurio de 17/12/1996) y en otra se refiere al avance
de la justicia como “persecución política y xenofobia” (véase El Mercurio de
30/07/1997). En aquellas cartas como en entrevistas sostenidas con otros medios
el Dr. Dörr, hace uso de su saber profesional para minimizar las agresiones
Av. Manuel Rodríguez 33, Santiago. E mail asociacion@coloniadignidad.cl
sexuales practicadas por Paul Schäffer implicando por una parte, que éste ha sido
más perseguido en comparación con las violaciones que en Chile quedan en la
impunidad, y por otra, que los delitos de Schäffer sólo se tratarían de una
conducta homosexual pues en una “comunidad de trescientas personas, en la cual
ciento cincuenta son varones, que haya un homosexual, es muy bajo.” (Véase
Revista Ercilla de 10/03/1997)
En otros medios de la época, el Dr. Dörr desestima la magnitud y alcance de los
distintos crímenes por los cuales Colonia Dignidad ha sido investigada, a lo que
llamó “caza de brujas” (véase Revista Gaceta Universitaria, 2006,[2]1, 36-43).
Aunque en esos momentos varios procesos judiciales se encontraban aún
abiertos, el Dr. Dörr dice que no se arrepiente de “haber sido una especie de voz
en el desierto para defender a los muchos otros colonos que nada tuvieron que ver
con estos crímenes”, y a quienes las autoridades atacaban de manera “indirecta e
hipócrita”, por el hecho de perseguir actividades delictuales más allá de la
pedofilia.
Frente a esto cabe preguntarse ¿puede y/o debe un profesional y académico
connotado mantenerse en tal ignorancia en relación con los crímenes cometidos
en Colonia Dignidad mientras se le solicitaba públicamente apoyar al enclave en
virtud de su prestigio profesional?. ¿Puede ignorar la información que para la
época y desde hacía décadas era de público conocimiento?. Como organismo de
derechos humanos creemos que no es posible, en tanto la conducta del Dr. Dörr
lesiona la moral pública y los mínimos estándares éticos. Consideramos de suma
gravedad el enaltecerlo por medio de un premio nacional, pues se contribuye con
el daño causado al desconocer los crímenes cometidos en y por la Colonia
Dignidad, al respaldar sus maniobras de limpieza de imagen e intentar influir en la
opinión pública y en las autoridades por medio de opiniones que han sido
escuchadas gracias a la trayectoria profesional del Dr. Dörr. Al haber hecho uso
de su imagen pública para apoyar a Colonia Dignidad, el Dr. Dörr colabora con el
negacionismo y relativización de los crímenes de lesa humanidad, y obstaculiza la
consecución del anhelado Nunca Más.
Av. Manuel Rodríguez 33, Santiago. E mail asociacion@coloniadignidad.cl
Las asociaciones que han otorgado el premio, y en consecuencia el jurado,
piensan que es posible separar las conductas morales del uso al que se destina el
conocimiento profesional o académico, y que no es posible exigir estándares
éticos junto con los logros médicos por los cuales el Dr. Otto Dörr ha sido
reconocido. Como organización de derechos humanos que lucha por verdad ,
justicia y memoria por los crímenes cometidos en Colonia Dignidad, nos resistimos
y oponemos a ese principio, por lo cual rechazamos el otorgamiento del Premio
Nacional de Medicina 2018 al Dr. Otto Dörr y solicitamos a la sociedades
involucradas en su otorgamiento y al jurado, reconsiderar la decisión que les ha
hecho otorgarle el Premio al Dr. Dörr.
Asociación por la Memoria y los Derechos Humanos
Colonia Dignidad