El escenario actual de Perú se parece a aquel que ocurrió cuando se descubrió la grabación, en ese tiempo en cassette, entre el Vladimiro Montecinos y el diputado David Koury. Posteriormente, Alberto Fujimori presentó su renuncia, vía fax, ante el Congreso, que le fue rechazada prefiriendo el camino del juicio político.
En la actualidad, los fax y las cassetes están obsoletos, pues hoy contamos con modernas tecnologías, que permiten grabar hasta los suspiros de los individuos más anónimos. Desde hace unos días se han publicado varias conversaciones – telefónicas y presenciales – con el fin de “comprar” a varios congresistas con la promesa de llevar a cabo obras públicas en sus regiones y dinero contante y sonante, con la sola intención de conseguir el voto en contra de la vacancia. En este cohecho aparecen implicados Kenji Fujimori, hijo predilecto de su padre quien a su vez, es asesino y ladrón, admirado, incluido ahora, por Montecinos – tiene tanto derecho al indulto como su socio, Alberto); otros de los comprometidos en este affaire es el fujimorista Buenaventura Ramírez y el ministro de Transportes, Bruno Guiffra, entre otros.
El diálogo sostenido entre el ministro de Transportes y el congresal Moisés Mamani – el segundo, un pájaro de cuentas, quien despidió a su asesora por el solo hecho de estar embarazada y que, además, tiene a su haber otras acusación en Puno – comienza con la citación por parte del ministro a la casa del Presidente. Mamani le comunica que a su teléfono le falta batería y, muy asustado, le dice que tiene otra llamada del congresa Daniell Salaberry, y manifiesta estar atemorizado de ser acusado por los fiscales; el ministro lo tranquiliza, pues está hablando con el gobierno, y le aconseja que no le responde a Salaberry; por último, le promete que la oferta será asegurada por el mismo Presidente – como si el mandatario no mintiera como carretonero -.
Martín Vizcarra, por su parte, debiera arribar a Lima el viernes 23, en horas de la mañana, en consecuencia, el Congreso tratará, durante la tarde de este jueves 22 el tema de la renuncia del Presidente. En la reunión de voceros de bancada, uno de ellos plantea rechazar la renuncia de PPK, presentada ayer, 21, en horas de la tarde, y vacarlo por incapacidad moral permanente – lo mismo que se hizo con Fujimori -. El problema que se presenta al vacarlo es que habría que esperar, al menos un día, para que el Presidente haga su defensa, asesorado por un abogado, sumado a otro para la intervención de los congresistas, y luego proceder a la votación, (el 20 había 104 diputados por la vacancia, hoy habría prácticamente unanimidad, a excepción de Mercedes Araos, Buenaventura Ramírez y Kinji. Aclaramos que en el día de ayer el presidente del Congreso, Luis Galarrettta, presentó ante la fiscalía una acusación en contra de los implicados en el delito de soborno).
La renuncia del Presidente PPK es un verdadero insulto al Congreso y a los ciudadanos peruanos, pues en ningún momento pidió perdón por sus presuntos delitos, ni siquiera por “sus errores”, y adoptó la estrategia de culpar a la oposición, que le ha impedido gobernar, es decir, el “famoso chivo expiatorio que utilizan todos los jerarcas y magnates cobardes.
Si se atrasara el vuelo o bien, Martín Vizcarra se negara a asumir el mando, debiera hacerlo la actual Primera Ministra, Mercedes Araos, muy fiel a PPK y que ha expresado que no asumiría el cargo. Es muy difícil que se repita lo ocurrido con Alberto Fujimori, en el sentido de que ambos vicepresidentes sean rechazados por el Congreso y deba tomar el mando el presidente del Parlamento, es decir no es posible un nuevo Paniagua, quien era la única persona que no tenía vetos de congresales.
Al conocer la renuncia del primer mandatario, el fiscal Pablo Sánchez presentó ante el juez una petición de arraigo con PPK, y el juez deberá decidir si procede, una vez que Kuczynski sea un simple ciudadano, (se trata de evitar que se repita el caso de Alejandro Toledo).
Hoy Kuczynski es Presidente de la República, por consiguiente, no puede abandonar el país sin el permiso del Congreso, y de hacerlo, inmediatamente se le aplicaría la vacancia. A diferencia de Fujimori, PPK no podrá exiliarse en el país que reside su amigo personal, Sebastián Piñera, tampoco en su segunda patria, Estados Unidos, (algunos chilenos saben de la amistad entre los hijos de Piñera y Kuczynski por Exalmar).
El Papa, que no desaciertos por cometer en su visita a Chile, en Perú dio en el clavo al constatar que la mayoría de los ex Presidentes estaba preso, fugitivo o requerido por la justicia, (claro que le faltó que el Espíritu Santo le soplara que PPK iba a seguir el mismo camino).
Rafael Luis Gumucio Rivas (El Viejo)
22/03/2018