Casi todos los analistas y los políticos estamos convencidos que ningún candidato obtendrá la mayoría absoluta en la elección presidencial del 19 de noviembre. Lo más probable es que pasen a segunda vuelta el candidato Piñera y uno de los candidatos de la Nueva Mayoría, es decir, Guillier o Goic, sin descartar que pueda pasar Sánchez. Si pasa Kast con Piñera, no hay mucho que decir.
Pero en el evento de una confrontación entre el ex presidente y uno de la Centro Izquierda como se ha dicho, se hace indispensable acordar desde antes la fórmula de apoyos. A Goic, como espero o a alguno de los otros. Eso hay que acordarlo y dejarlo claro desde antes, para no perder un minuto y partir al amanecer siguiente en la campaña para ganar en diciembre.
Lo oportuno es asegurar el acuerdo ahora y no después, pues las vacilaciones pueden favorecer a aquellos que prefieren un triunfo de la derecha que apoyar a uno de los candidatos rivales de la misma postura, como ya sucedió en 2010. Hay que evitar que se repita esa desgraciada situación, que puede expresarse en lo que han dicho o insinuado los dirigentes con tribuna permanente en los medios de derecha al decir que tienen que pensar, porque tal vez haya que abstenerse o votar en blanco, lo que es una manera de decir que prefieren al de la derecha que al contrincante ocasional pero que es del mismo bando.
Estos dirigentes, algunos de ellos de la Democracia Cristiana, han expresado duros calificativos en contra de quienes suscribimos una declaración junto a militantes de varios partidos pidiendo la ratificación pública de la voluntad de apoyo mutuo entre las candidaturas de Centro Izquierda. Digo ratificación, porque la Junta Nacional de la DC lo ha dicho ya tres veces: nuestro domicilio es la Centro Izquierda y no vacilaremos.
Decir que es inoportuna nuestra declaración no es sino pretender dejar un vacío donde no lo hay ni debe haberlo, para abrir paso a posiciones vacilantes que nos pueden distancias de nuestro ideario y de nuestros compromisos que son mayores que un pacto electoral ocasional. Hay quienes, sin tapujos ni asumir falta de oportunidad o recato, han sugerido la posibilidad de abstención o voto en blanco, lo que claramente favorece al candidato de la derecha. Fue lo que nos hicieron rebeldes izquierdistas en 2009 cuando el candidato era Frei. Eso no debe volver a suceder, ya lo dijimos.
Nuestra declaración es acertada, prudente, oportuna y clara. Si pasa Goic como yo espero, los otros partidos la apoyarán. Si pasa Guillier, la DC lo apoyará. Eso es lo que buscamos y queremos decirlo ahora, para no perder un minuto. Proponer este acuerdo explícito actual no es debilitar ninguna postulación, sino fortalecer ambas, porque nos mostramos cada uno con su propia identidad, pero mostrando al país la fortaleza de estar dispuestos a seguir en el camino de las reformas. Y de ese modo decir a quienes hace rato están proclamando el fin de una alianza para llevar las aguas hacia la derecha que su estrategia no cabe en la DC ni en los demás partidos.
Por supuesto que todos entendemos que si la DC nada dice está siguiendo su línea trazada y que no es necesaria ratificarla a cada rato. El valor de esta declaración es que la firmamos personas de todos los partidos y de ese modo también ellos – radicales, socialistas, comunistas, MAS e IC – están diciendo que se comprometen a apoyar a Goic en su caso, lo que hasta ahora no habían dicho.
Unir fuerzas para fortalecer los caminos y conseguir que el próximo sea un gran gobierno que haga las reformas necesarias, es la tarea en la que estamos empeñados.