Declaré en la Comisión Valech y nadie me advirtió que sería un secreto por medio siglo. Por el contrario, los ex presos políticos queremos que se conozcan los padecimientos sufridos y los nombres de los oficiales que torturaron, asesinaron e hicieron desaparecer detenidos. El silencio solo favorece a los genocidas.
Los que conocimos la brutalidad en comisarías de Carabineros, Ministerio de Defensa, Estadio Chile, Estadio Nacional, Campo de Prisioneros de Chacabuco y Cuatro Álamos -y que finalmente fuimos expulsados de nuestra patria- queremos que esa experiencia sea reconocida por el Estado como parte de la historia de Chile.
Manuel Cabieses Donoso
Periodista