El Banco Asiático de Inversión en Infraestructuras (BAII), patrocinado por China, para la construcción de proyectos de transportes y telecomunicaciones en Asia y otras regiones del mundo, anunció este sábado que Chile y Bolivia se convertirán en nuevos miembros.
El presidente del BAII, Jin Liqun, anunció la entrada de los países latinoamericanos. La afiliación a este deberá ser ratificada por los parlamentos de ambos países. Las naciones suramericana se suman a otros países no asiáticos en la entidad financiera: Baréin, Chipre, Samoa, Grecia y Rumanía.
El anuncio ocurrió tras una reunión de Jin Liqun con la presidenta de Chile, Michelle Bachelet, en la sede central de institución en Pekín.
“Esto aumenta a 77 el número de miembros y confirma la expansión del BAII a regiones como África, Sudamérica o Europa, lo que muestra el compromiso global y su buen momento, menos de tres años después de que fuera inicialmente establecido con 20 miembros”, destacó Jin en una comparecencia conjunta con la mandataria chilena.
Jin subrayó que Bachelet, con la que mantuvo un breve encuentro bilateral antes del anuncio de nuevos miembros, es la primera jefa de Estado que visita la sede del BAII.
“Chile es un importante miembro del Foro de Cooperación Asia-Pacífico, y mejores infraestructuras (en esa región) le darán mejor acceso a más mercados. Al mismo tiempo, más inversión en infraestructura chilena acercará más a Latinoamérica y Asia”, subrayó el presidente del BAII.
La entidad financiera es una de las herramientas con las que China desea llevar adelante sus ambiciosos planes de desarrollo económico en Asia y otras regiones.
Bachelet, por su parte, dijo que “será una institución de gran beneficio para proyectos de conectividad e infraestructura”, citando ejemplos de planes donde la ayuda financiera puede ser decisiva, como el cable transpacífico de fibra óptica o los corredores bioceánicos Atlántico-Pacífico.
La mandataria también manifestó su optimismo ante una entidad relativamente joven que “puede ser un buen complemento al orden financiero internacional”. Los analistas ven al BAII como un posible rival de entidades como el Banco Mundial o el Banco Asiático de Desarrollo.
Ya son cinco los países de la región latinoamericana que forman parte del proyecto financiero, que cuenta con Brasil, Perú y Venezuela como miembros. Sin embargo, todos estos apenas tramitan su proceso de ingreso, que requiere la ratificación parlamentaria y un depósito pago inicial de su participación en el capital de la entidad.
El BAII comenzó a operar en octubre de 2014 y tiene entre sus miembros al Reino Unido, Francia, Alemania, España, Rusia, Italia y Corea del Sur. Japón y EE.UU. no forman parte de la entidad.