Siete periodistas mexicanos fueron interceptados en una carretera y despojados de sus pertenencias y elementos de trabajo por una banda de La familia michoacana, según denuncia de Felap-México, Fapermex y otras organizaciones del gremio que solidarizaron con las víctimas y condenaron la agresión.
Texto del comunicado:
• La malsana impunidad propicia las continuas agresiones a los periodistas.
• Siete compañeros de medios locales, nacionales e internacionales fueron retenidos, agredidos y despojados de sus implementos de trabajo por 100 civiles armados en el norte del estado de Guerrero.
•El Gremio Periodístico Organizado de México, se solidariza con la condena general a la agresión contra la libertad de prensa y exige justicia pronta y expedita.
En un país como México, donde los asesinatos, desapariciones forzadas y demás agresiones a periodistas no son investigados y quedan en la más malsana impunidad, puede ocurrir todo, y obvio, propiciar más y más agresiones como la ocurrida en contra de siete colegas en la zona norte del sureño estado de Guerrero.
Dos de los compañeros agredidos son del diario “La Jornada”, mismo que dio a conocer los condenables hechos del que tomamos la información: Siete periodistas de medios locales, nacionales e internacionales fueron interceptados la tarde de este sábado en un retén instalado en la carretera Iguala-Ciudad Altamirano, a la altura del municipio de Acapetlahuaya, en la zona norte de Guerrero, por unos 100 civiles armados y encapuchados y visiblemente drogados que los despojaron de sus equipos de trabajo y pertenencias.
Sergio Ocampo y Jair Cabrera, corresponsal de La Jornada en Guerrero y reportero gráfico de esa casa editorial, respectivamente; Hans Máximo Musielik, de Vice News; Pablo Pérez García, de Hispano Post; Jorge Martínez, de la agencia Quadratín; Angel Galeana, de Imagen TV, y Alejandro Ortiz, del diario Bajo Palabra, fueron retenidos por espacio de 15 minutos.
Los pistoleros, presuntamente pertenecientes a la organización delictiva La familia michoacana, despojaron a los reporteros de sus pertenencias, equipos de cómputo, cámaras fotográficas y de video, teléfonos celulares, dinero en efectivo, así como una camioneta Patriot (propiedad de Sergio Ocampo), todo valuado en cerca de un millón de pesos.
A Hans Máximo uno de los civiles armados lo amagó con una pistola en la cabeza, y le advirtió: “si vemos que se detienen en el retén y dicen lo que les pasó, los vamos a comer vivos. Ahí tenemos halcones vigilando”. Después de sinfín de dificultades los comunicadores lograron llegar a Chilpancingo, capital del estado.
La Procuraduría General de la República, PGR; informó que a través de la Fiscalía Especial para la Atención de Delitos Cometidos Contra la Libertad de Expresión, FEADLE, atrajo el caso e inició las investigaciones.
El Gremio Periodístico Organizado de México: Federación de Asociaciones de Periodistas Mexicanos, FAPERMEX, Federación Latinoamericana de Periodistas, FELAP-MÉXICO; Club Primera Plana, y el Colegio Nacional de Licenciados en Periodismo, CONALIPE, se solidariza con los colegas agredidos, con sus medios y con la condena general a esta nueva agresión contra la libertad de prensa y expresión, en ese contexto, exige justicia pronta y expedita.
Mexicali, Baja California, 3 de mayo de 2017.