El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, llamó hoy a los distintos sectores del país a reconocer su responsabilidad en el conflicto armado de más de 52 años, al indicar que el fin de este no depende únicamente del desarme de los combatientes.
“Todos debemos reconocer responsabilidad, en la medida que nos quepa a cada cual”, aseguró Santos, al firmar en Bogotá los decretos que crean la Comisión para el Esclarecimiento de la Verdad, la Convivencia y la No Repetición y la Unidad Especial para la Búsqueda de Personas Dadas por Desaparecidas en el Marco del Conflicto, mecanismos contemplados en el acuerdo de paz con las FARC.
El gobernante aseguró que el fin del conflicto se trata de responder a las víctimas y promover el reconocimiento de todos quienes tuvieron responsabilidad” y de que “se llegue a una verdad total, no a una verdad fraccionada o parcial”.
A renglón seguido, señaló que él sabe que “eso no les gusta a ciertos sectores que pretenden que el proceso (de paz) se limite tan solo al desarme de las FARC, precisamente porque no quieren reconocer responsabilidad”.
Santos recordó que la Comisión es un mecanismo extrajudicial que no pretende establecer responsabilidades penales individuales y que hace parte del Sistema Integral de Verdad, Justicia, Reparación y No Repetición que aprobó el Congreso la semana pasada.
El presidente reiteró que “no se trata de desatar una cacería de brujas o una cascada de señalamientos indiscriminados, sino de alentar a quienes hayan tenido alguna responsabilidad por las violaciones cometidas en el marco del conflicto, a reconocerla”.
Sobre la Comisión de Verdad, explicó que permitirá “conocer las graves violaciones a los derechos humanos e infracciones al Derecho Internacional Humanitario que ocurrieron por cuenta del conflicto”.
“Esto es lo que más piden las víctimas: una explicación de lo que pasó. No simplemente saber quién fue el responsable”, agregó el jefe de Estado, quien apuntó que además permitirá “conocer el impacto desproporcionado que ha tenido el conflicto sobre diferentes grupos y poblaciones”.
Según Santos, “el país aún no es consciente de lo que significó la violencia sexual ejercida en contra de las mujeres, o el desmedido número de asesinatos y violaciones de sus derechos que sufrieron los pueblos indígenas y la población afrodescendiente”.
Dijo además que la comisión permitirá conocer “el efecto devastador” del conflicto sobre la democracia y las instituciones, y las “dinámicas del conflicto en toda su complejidad”, entre las que mencionó “procesos positivos, como el creciente profesionalismo de los miembros de nuestra fuerza pública”.
“Más de 300 concejales fueron secuestrados, y más de 500 asesinados en los últimos 30 años, en el marco del conflicto.
Ninguna democracia puede funcionar así”, apuntó el mandatario.
Hizo igualmente alusión al exterminio del que fueron objeto en los años 80 y 90 por lo menos tres mil 500 integrantes del partido político de izquierda Unión Patriótica (UP), fundado en el 1985 como parte de un proceso de paz iniciado un año antes por las FARC,
“Tenemos que saber y entender lo que ocurrió en el pasado para asegurarnos de que nunca más, nunca más, se vuelva a repetir”, añadió.
Santos se refirió a sectores, en alusión al opositor partido Centro Democrático fundado por el expresidente Álvaro Uribe, que “se han opuesto rabiosamente a la Jurisdicción Especial para la Paz, porque le tienen miedo a la verdad”.
El uribismo ha sido fuerte opositor a las negociaciones de paz con las FARC en Cuba, luego al acuerdo y a la implementación de lo firmado por el Gobierno colombiano y esa guerrilla.
Al acto asistieron altos jerarcas de la Iglesia Católica, víctimas de secuestro, de violencia sexual y familiares de desaparecidos, entre otros.