Luis Manuel Medina Pérez, locutor, y Leónidas Antonio Evangelista Martínez, director de la emisora 103.5 FM de San Pedro de Macorís, en el este de República Dominicana, fueron asesinados el 14 de febrero por sicarios que irrumpieron en la radio mientras Medina transmitía el programa informativo Milenio Caliente, de acuerdo a información de prensa de diferentes medios locales, que lamentablemente omitieron el importante dato de la edad de las víctimas.
Según el presidente del Colegio Dominicano de Periodistas (CDP), Olivo De León, dos asesinos llegaron a la emisora, ubicada en un centro comercial y, sin mediar palabras dispararon a Medina en el locutorio, a Martínez en su oficina y a la secretaria Dayanina Isabel García Hernández hasta que la dieron por muerta, pero se encuentra hospitalizada con heridas graves.
Un vídeo divulgado en Facebook recoge el instante en el que se producen los disparos, mientras Medina leía noticias vinculadas al presidente de República Dominicana, Danilo Medina, y al escándalo de corrupción con la constructora Odebrecht, según un vídeo divulgado en Facebook que registra el momento en que se producen los disparos.
Opiniones
“Para nadie es un secreto que desde un tiempo hasta esta parte, muchos comunicadores en el país han sido objeto de amenazas, agresiones físicas, verbales y legales, encausamientos, chantajes, hostigamientos y hasta intimidados por difundir versiones de hechos que a su juicio constituyen verdades que pueden afectar intereses políticos, económicos o personales, sin medir los riesgos que ello conlleva”, escribió Jesús Rojas en la publicación digital Acento.
“El cobarde ataque a la Emisora FM 103 de San Pedro de Macorís no debe quedar impune”, prosiguió Rojas. “Las muertes de Luis Manuel Medina Pérez y de Leonidas Martínez tampoco deben convertirse en estadísticas frías de la violencia común, pública, privada, de sicariato o de delincuencia común que tienen en vilo a gran parte de la población, y de paso confirma que el ejercicio del periodismo en el país sigue siendo uno de alto riesgo.
“Las autoridades y la Procuraduría General de la República tienen ante sí el desafío de llegar hasta el fondo de las verdaderas causas y autores materiales e intelectuales que culminaron con el asesinato de los comunicadores de San Pedro de Macorís, si es que el estado de derecho ha de prevalecer y si son válidas las garantías a la libertad de expresión en la República Dominicana. La prensa nacional no puede aceptar volver a un pasado que se creía superado… ¡De ninguna manera!”, concluyó Jesús Rojas.
Postura del Colegio de Periodistas
Según Olivo de León, presidente del CDP, “en los últimos días, tanto el director como el locutor, que eran personas de una trayectoria de lucha social y comunitaria, fueron los propulsores de una marcha contra la impunidad, la Marcha Verde. Y también, de la firma del ‘libro verde’ donde los ciudadanos ponen sus nombres pidiendo el cese de la hostilidad y castigo a la corrupción. Estas actividades las habían organizado las últimas semanas. Además, denunciaron la contaminación de un río por parte de una empresa y por cuya denuncia autoridades del ministerio de Medio Ambiente examinaron las aguas y vieron que estaba contaminada, que tenía un líquido azul que era depositado por esta empresa”.
El presidente del CDP instó a las autoridades a investigar los asesinatos y aseguró que tienen un gran reto en sus manos: “Descubrir a los asesinos, de dónde provino la orden y el pago para asesinar a estos dos profesionales de la comunicación. El Gobierno debe asumir parte de su culpa, por esta situación que no tiene precedentes en la historia periodística de los medios de la República Dominicana”.
Con los asesinatos de Medina Pérez y Evangelista Martínez en el día de San Valentín ascienden a cinco los periodistas asesinados en América Latina y el Caribe en estos primeros 45 días de 2017. Los otros asesinatos fueron:
15 de enero, Venezuela: Arnaldo Enrique Albornoz Bracho, de 34 años;
17 de enero, Honduras: Igor Abisaí Padilla Chávez, de 37 años;
19 de enero, Guatemala: Manuel Salvador Villagrán Trujillo, de 39 años.