Una fuente interna del Partido Demócrata estadunidense, asqueada
por la manipulación del Comité Nacional Demócrata para inclinar la balanza en favor de dar la candidatura presidencial a Hillary Clinton, entregó personalmente a Wikileaks todos los correos electrónicos que el portal difundió sobre los manejos de la campaña demócrata, y ninguna de estas filtraciones provino de un hackeo ruso, aseguró este jueves Craig Murray, ex embajador británico en Uzbekistán y actual asociado de Julian Assange.
En entrevista exclusiva con el diario británico The Daily Mail, Murray aseveró que fue él quien recibió en propia mano la información que le entregó “una fuente que tenía acceso legal a la información. Fue una filtración, no un hackeo”, como afirmó la Agencia Central de Inteligencia (CIA). Precisó que la entrega se realizó en un parque de Washington DC en septiembre pasado.
Las oficinas de inteligencia estadunidenses ya reportaron a miembros del Congreso que creen que Rusia realizó un ataque cibernético y filtró la información a Wikileaks para favorecer el triunfo del magnate Donald Trump en las elecciones de noviembre pasado.
Las filtraciones más importantes fueron correos electrónicos internos del Comité Nacional Demócrata y del asesor principal de Clinton, John Podesta. Estos correos revelaron, entre otras cosas, que el comité, supuestamente imparcial, se inclinó desde un principio a erigir como candidata a la presidencia a Clinton y desechar al precandidato insurgente Bernie Sanders.
Murray agregó que la fuente que filtró los correos estaba motivada por el asco que le causó la corrupción de la Fundación Clinton
y la forma en que se trató de perjudicar a Sanders.
Horas antes de darse a conocer las declaraciones de Craig, la Casa Blanca había atribuido al presidente ruso, Vladimir Putin, la responsabilidad directa de los ciberataques que interfirieron en las elecciones presidenciales de Estados Unidos, con lo que se elevó de nuevo la tensión entre las dos mayores potencias nucleares del mundo.
No creo que estas cosas ocurran en el gobierno ruso sin que Vladimir Putin lo sepa
, aseguró Ben Rhodes, principal consejero del presidente Barack Obama, al canal de televisión MSNBC.
Todo lo que sabemos sobre cómo funciona Rusia y hasta qué punto Putin controla el gobierno sugiere que, cuando hablamos de un ciberataque de estas características, estamos hablando de las esferas más altas del gobierno
, dijo Rhodes.
En respuesta, Trump volvió a insinuar que la Casa Blanca tiene intenciones partidistas al responsabilizar a Rusia de los ataques informáticos contra Clinton.
Si Rusia u otra entidad realizaban ataques informáticos, ¿por qué la Casa Blanca esperó tanto tiempo para reaccionar? ¿Por qué recién se quejaron tras la derrota de Hillary Clinton?
, preguntó en Twitter.
La acusación ya había sido rechazada este jueves por Moscú. Los absurdos no se basan en ningún fundamento
, declaró Dimitri Peskov, vocero del Kremlin.
“El mismo candidato republicano alentó a Rusia a hackear a su oponente porque creía que ayudaría a su campaña”, indicó el vocero de la Casa Blanca, Josh Earnest, en la conferencia de prensa diaria.
Los comentarios surgen un día después de que Earnest sugirió en la conferencia de prensa que antes de las elecciones Trump sabía de la intromisión rusa, y que su participación tenía un efecto negativo en la campaña de su opositora
.
En tanto, el presidente electo Donald Trump nominó al representante por Montana, Ryan Zinke, secretario del Interior, con lo que se acerca a concluir la formación de su gabinete.
Por último, el Departamento de la Policía Metropolitana indicó este jueves que ya autorizó la movilización de protesta contra Trump del 20 de enero –el mismo día en que tomará posesión–, que pasará frente al Capitolio.
Al cierre de esta edición el presidente Barack Obama aseguró a la radio pública NPR que Estados Unidos tomará represalias en el lugar y momento que elijamos
por el supuesto ciberataque ruso que buscó interferir con las elecciones presidenciales.