El primer ministro francés, Manuel Valls, anunció este lunes que buscará la candidatura a la elección presidencial de 2017 por el Partido Socialista, para unir a la izquierda
profundamente dividida y enfrentar a la derecha y a la ultraderecha. Valls acaba así con semanas de especulaciones sobre su posible candidatura, después de que el presidente François Hollande renunció la semana pasada a una reelección por su baja aceptación entre los ciudadanos.
Sí, soy candidato a la presidencia de la república. Mi candidatura es de reconciliación, aseguró Valls, de 54 años, en un discurso pronunciado en la localidad de Évry, su bastión electoral en el área metropolitana, ubicado al sur de París. Hoy tengo una responsabilidad: unir. Me siento indignado ante la idea de que la izquierda pueda quedar afuera de estas presidenciales
, afirmó el jefe de gobierno, refiriéndose al nivel de aceptación del Partido Socialista en las encuestas y a sus divisiones.
El primer ministro precisó que renunciará este martes para dedicarse a la campaña de la elección primaria socialista, que se celebrará a finales de enero de 2017. En entrevista reciente, Valls reveló las perspectivas de tomar parte en la elección después de que el descenso de popularidad del presidente Hollande forzó al Partido Socialista a buscar un candidato capaz de conservar el poder.
Una encuesta del Instituto Francés de Opinión Pública para el periódico Le Journal de Dimanche, publicada el domingo pasado, señala que la mayoría de los simpatizantes socialistas apoyan el intento de Valls para obtener la candidatura presidencial del partido. Valls, quien ha dicho que existen dos izquierdas irreconciliables
y ha defendido la prohibición de la burka, ahora llama a la unidad de los partidos de izquierda, a cinco meses de los comicios presidenciales.
Valls ha irritado a muchos socialistas por sus exabruptos sobre los gitanos y sus disputas con la ex ministra de Justicia, Christiane Taubira, en torno a la reforma penal; es considerado un socialista de centro, con posturas duras en materia de seguridad e inmigración, y es un poco más popular que Hollande, pero el partido está en profunda crisis debido a la manera en que el gobierno ha lidiado con la economía.
Hasta ahora hay siete contendientes declarados para las primarias socialistas, incluidos los ex ministros de Relaciones Exteriores Aranud Montebourg y Benoit Hamon; los candidatos tienen que presentar su registro antes del 15 de diciembre. Las dos rondas de primarias de la izquierda están programadas para el 22 y 29 de enero de 2017.
Las encuestas muestran que ningún candidato de izquierda lograría el suficiente apoyo en la elección presidencial del 27 de abril y pronosticaron que el conservador François Fillon derrotaría a la líder de extrema derecha Marine Le Pen en segunda vuelta electoral.