El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, advirtió este jueves que las empresas que abandonen territorio estadunidense en búsqueda de menores costos en otros países “enfrentarán consecuencias”.
“Las compañías no van a abandonar Estados Unidos sin consecuencias. No va a pasar”, lanzó durante su visita a la fábrica de aparatos de calefacción Carrier, en Indiana, que renunció a relocalizar mil puestos de trabajo en México.
El republicano, junto a su compañero de fórmula Mike Pence, saludo a algunos trabajadores, habló con ejecutivos e inspeccionó una línea de ensamblaje.
Tras una serie de negociaciones con el magnate, Seth Martin, vocero de Carrier, anunció que la compañía recibió un incentivo de impuestos de 7 millones de dólares para que su planta en Indiana continué con sus labores. Sin embargo, esta semana se llegó a un acuerdo para mantener mil empleos en la planta, pero centenares de trabajadores van a perder aún sus puestos.