Noviembre 20, 2024

Caso EXALMAR; Piñera y “los intocables” (O la “bandita parlamentaria de la ilustre familia Corleone y sus ahijados”)

No puedo dejar de asombrarme en cada ocasión que reviso hechos y cifras, pues sin faltar una sola vez, concluyo siempre expresando el mismo comentario: ladrones, sinvergüenzas, y con esto hago referencia a ese hato de  delincuentes amparados por una prensa canalla y por fueros propios de cargos de representación popular, obtenidos mediante la mentira y el engaño.

 

 

Claro que en estos asuntos hay niveles, de ello es imposible dudar. Están los ‘primerizos’, generalmente jefes de reparticiones públicas que se atreven a ingresar en la hondonada de la corrupción luego de constatar que a su patrones -ministros, parlamentarios, subsecretarios- nada les ocurre judicialmente en todas y cada una de sus evoluciones y maromas delictuales; luego vienen los  ‘novatos’, aquellos que llevan solamente un par de arremetidas -aún menores, pero dispuestas a crecer- en el escenario de la corruptela (aquí encontramos a ciertos gobernadores, seremis e incluso intendentes… y claro que sí, también a muchos alcaldes y concejales); un poco más arriba en la pirámide de la vivarachada y la delincuencia ‘legal’ se ubican ciertos parlamentarios, esos que creen estar protegidos por mantos divinos tejidos en el Olimpo, y cometen actos que a cualquier humano ‘de a pié’ lo llevarían ante un tribunal bajo acusaciones de realizar “actos reñidos con la moral y las buenas costumbres”, como mínimo.

Ya en la parte superior de la mencionada pirámide hallamos a los “profesionales”. Se trata de avezados ‘hombres públicos’ que están unidos por una especie de línea de homogenización, ya que llevan décadas viviendo cómodamente a la sombra del estado y mamando de la teta fiscal. Son los peores. Acostumbrados a delinquir diariamente, a mentir con rutinaria frecuencia, se permiten traicionar no sólo los principios del partido que los acoge (el cual cambian de tiempo en tiempo según sus necesidades), sino incluso acuchillar política y socialmente a sus propias familias.  Por supuesto que ‘cogotear’ a su electorado y expoliar al país es casi un acto de fe para estos chuchumecos ganapanes.

Pero, sobre toda esa cáfila citada, están los “doctorados”, los Phd’s de la casta política… son varios, aunque nunca tanto como para confundirse u olvidar a alguno de ellos. En esa cima piramidal flotan apellidos como Longueira, Lavín, Lagos, Piñera, Larraín, y otros más. Y aunque parezca digno de Ripley, en ese lote también hay superiores, son los “maestros”, los “gurúes”. ¿Hay que identificarlos? Es fácil, se apellidan Lagos Escobar (Ricardo) y Piñera Echeñique (Sebastián).

En el caso de estos dos tipos, a todas las “cualidades” que caracterizan a los que están bajo ellos en la pirámide, hay que agregar una en especial: son caras pétreas, frescos de cutis, hipócritas y cínicos (políticamente hablando, claro está). Ambos ya fueron primeros mandatarios,  y ahora quieren postular de nuevo al sillón de O’Higgins para continuar (¿o completar?) la saga de concesiones que han entregado el país a manos privadas. En sus respectivos gobiernos dejaron en claro que la ley es durísima y de aplicación efectiva

cuando se trata de punir a quienes cometen un delito que afecte a cualquier empresa privada, mas, no se aplica de la misma forma en el resto de las ocurrencia ilícitas.

Vea usted, por ejemplo, lo que sucede con quienes eluden el pago de ese pésimo servicio llamado Transantiago. Un usuario –indudablemente fresco de alma- no pagó su pasaje…a los pocos días la policía llegó hasta su domicilio y lo arrestó; el tribunal le exigió una pago, en calidad de multa, cuyo monto se aproximó a los $70.000, sí, setenta mil pesos. ¿Se da cuenta? Ahí la ley fue rápida y efectiva porque se trataba de una empresa privada que se sintió afectada.

No recuso ni critico la sanción, me parece bien que así se haga pues ya es hora de detener tanta frescura de parte de los vivarachos que creen poder hacer lo que les plazca con el dinero y la paciencia ajenas, pero el problema mayor sigue siendo el mismo, pues sólo en esos casos se aplica la ley debidamente. ¿El resto? ¿La violación de los derechos humanos, las corruptelas de las cofradías políticas, la avaricia desmedida de las grandes cadenas de tiendas, farmacias y similares? ¿El grosero e inentendible incremento de las cuentas de los servicios básicos, agua, luz, etc.? ¿El verdadero “robo/estafa legal que se les permite cometer a las concesionarias de autopistas y carreteras, a las AFP’s, a las Isapres? ¿Qué pasa allí con la aplicación irrestricta de la ley? Dinero, plata, guita, lana… eso es lo que principalmente interesa a estos  dos ‘gurúes’ que buscan regresar  al mando de la nación.

Sin embargo, respecto de los ‘gurúes’ mencionados el problema no se ahoga en lo meramente económico. El grave escándalo que explotó en los últimos días e involucra directamente a Sebastián Piñera, sobrepasa todos los límites conocidos hasta hoy en la política chilena, tanto los conocidos como los ‘aceptables’, según el aguante de nuestra pusilánime y cómoda población electoral.

En el mes de marzo del año 2010 Piñera asumió la primera magistratura del país. Horquillado por sus opositores y por las redes sociales, se vio obligado a dejar sus intereses económicos en una entelequia (eso es ahora, según se comprobó recién) llamada  ”Fideicomoso Ciego”, lo que implicaba dejar la administración de sus bienes y capitales en manos ajenas –y desconocidas por Piñera (de ahí lo ‘Ciego’)-  durante su período como mandatario. Sin embargo casi el 80% de su fortuna (incluyendo sus inversiones en el exterior) quedó fuera del país, lo quel permitió a esas “manos ajenas” administrarla sin interesarles el daño que podrían producirle a la nación. Y lo otro delicado es que en algún lugar de la oficinita de las ‘manos ajenas’ estaban también los hijos de don Sebastián administrando los billetes del papá.

En pleno litigio con Perú, ya en los escritorios de los jueces de la Corte Internacional de Justicia de La Haya (CIJ), a pocos días de emitirse el fallo final, las “manaos ajenas” invirtieron millones de dólares de don Sebastián en una gran empresa pesquera peruana, “Exalmar S.A.”, con lo que el señor Piñera .-a través de Bancard- quedó con el 9,1% de las acciones de esa empresa. ¿Dónde está lo grave? No hay forma de eludir la sospecha relativa a que las ‘manos ajenas’ contaban con información privilegiada  –las razones son de una obviedad enorme- respecto de un fallo que, al fin de cuentas, favoreció a Perú y, de rebote, ¡cómo no!, a Exalmar.  Bingo… capicúa completa.

A objeto de no dejar este asunto dando bote únicamente gracias a la crítica del suscrito, permítame señor lector transcribir lo que a este mismo respecto informó la BBC de Londres (publicado, entre otros medios, por el portal “GAMBA.CL”).

<<<<Apenas comenzaba a vislumbrarse como la carta más segura del centroderecha chileno para las presidenciales 2018 cuando comenzaron los problemas en su incipiente candidatura. Sebastián Piñera, presidente de Chile entre 2010 y 2014, debió salir la tarde del lunes a dar explicaciones de por qué la matriz de su holding de inversiones, Bancard, invirtió en una compañía pesquera peruana.

<<<El problema está en que lo hizo en medio del litigio marítimo que tuvo a Chile y Perú en pie de guerra diplomática en La Haya y que fue zanjado por la corte en enero de 2014.Perú demandó a Chile ante la Corte Internacional de Justicia de la Haya en 2008, por la soberanía de un triángulo marítimo. Ese mismo año una importante pesquera peruana se abría a la bolsa: Exalmar. 

<<<En 2014, la CIJ falló respetando la línea marítima que defendía Chile pero hasta las 80 millas marinas, no hasta a las 200 como se demarcaba hasta antes de enero de 2014. Desde las 80 millas se instaló una línea equidistante que le entrega a Perú un espacio rico en recursos pesqueros que había controlado Chile. La decisión de La Haya fue recibida en Chile como una pérdida, ya que pasaron a dominio peruano 22.000 km de mar patrimonial (zona económica exclusiva), así como un área de pesca fina que históricamente había sido explotada por Chile. Esto favoreció a empresas peruanas, entre ellas, Exalmar S.A., que desde 2010 contaba con Bancard entre sus accionistas. 

<<<Según datos contenidos en sus memorias anuales, Exalmar es la cuarta productora de harina de pescado de Perú, país que a su vez es el primer productor y exportador de la materia prima. Hoy la matriz de Piñera cuenta con un 9,10% de la propiedad, siendo el segundo accionista más importante de la pesquera, según consta en las declaraciones financieras de Exalmar>>>

Poca duda cabía que Piñera se encontraba en un serio berenjenal, pero de inmediato las castas políticas salieron en defensa del especulador financiero, admitiendo de esta forma que para ellos es atendible poner en juego la seguridad, soberanía e intereses superiores del país a la hora de hacer negocios personales, privados (jamás fiscales). Parlamentarios y autoridades como Alberto Espina, Hernán Larraín, Ignacio Walker, Heraldo Muñoz, Felipe Kast y muchos otros, junto a la reconocidamente sediciosa y golpista cofradía de los ex oficiales de la Armada, irrumpieron prestándole ropa al complicado ex presidente y tildando de “alharaca” las acusaciones que muchas personas emiten sobre el tema.

El diputado comunista Hugo Gutiérrez (abogado de profesión) interpuso una querella en los tribunales contra Sebastián Piñera por su presunta participación en actos que pudiesen ser constitutivos del delito de uso de información privilegiada, sancionado por la Ley de Mercado de Valores. Entonces, haciendo cuerpo con el inefable especulador financiero Piñera, el bloque político derechista “Chile Vamos”, apoyado por un parlamentario de “Evópoli”, interpuso en tribunales una denuncia contra el diputado Gutiérrez por el delito de denuncia o acusación calumniosa contra el ex presidente Sebastián Piñera, y en parte de libelo, de acuerdo a lo que publica “El Mercurio”, esos acusadores critican al diputado comunista porque “con insoportable ligereza de forma oblicua o larvada, da a entender que el ex Presidente tenía información del litigio con la República del Perú y que esa información lo ayudó a tomar decisiones de “compra de acciones”. La verdad es que exactamente eso es lo que sospecha mucha gente.

Pero, otras sospechas apuntan también al gobierno y a los principales dirigentes del bloque de la Nueva Mayoría, ya que circula el rumor de un acuerdo entre La Moneda y las coaliciones derechistas respecto de la aprobación del reajuste del 3,2% que propuso el ejecutivo al Congreso. ¿Qué es lo que cuenta el viento? Las brisas primaverales venidas desde la costa susurran que la Nueva Mayoría se comprometió a “desbarrancar” la posibilidad de formar una comisión para investigar los asuntos referidos a Piñera, Bancard y Exalmar, ¿contra qué? Contra la aprobación del proyecto de reajuste presentado por el Ejecutivo.

No sabemos si ello es uno más de los tantos e infundados rumores, o si en verdad tiene asidero en la dura realidad. Por si acaso, me permito informarle querido lector que el jueves 17 de noviembre el proyecto de reajuste fue aprobado en el Parlamento, y que, de manera sospechosamente coetánea, fracasó el intento de formar la comisión mencionada.

Todo lo aquí expuesto, malamente expuesto quizás, me obliga a una última reflexión que expreso en forma de pregunta, o de duda. Supongamos –y sólo supongamos- que un individuo cualquiera (usted, yo, él, en fin, cualquier persona que no tenga “poder” político, económico ni militar), en marzo o abril del año 2010 hubiese estado trabajando en una repartición pública –como por ejemplo, el Ministerio de RREE, el de Defensa o el de Interior-  en calidad de jefe de departamento o de  simple profesional o simple funcionario, y se hubiese filtrado a la prensa que ese chileno –funcionario de planta en uno de los ministerios de marras-  tuvo acceso a información privilegiada respecto del litigio Chile-Perú en La Haya semanas antes de conocerse el fallo definitivo de la CIJ, y que entonces aprovechó a fondo la mentada información para comprar acciones en la empresa EXALMAR S.A ….¿no cree usted que Contraloría General de la República habría ordenado una inmediata investigación sumaria al respecto, la que por cierto, sumario mediante, habría terminado con la expulsión del funcionario del sistema público y su inhabilitación –por al menos cinco años- para postular y/o ocupar cargos públicos?

Amigo derechista, amigo democristiano, amigos del duopolio, quédense tranquilos, no se ajicen. Calma. Respiren profundo. A Piñera jamás le ocurrirá algo similar. Jamás. Se los doy firmado, además ustedes ya lo saben pues empujan el carro del “perdón” (sólo en estos casos, nunca en aquellos donde hay ‘gente de a pie’ involucrada).

 

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