Ante los anuncios de envío de un nuevo proyecto de Ley para prorrogar el Decreto Ley 701 y reformular los subsidios excluyendo a grandes empresas, diversas organizaciones han emitido una declaración pública, principalmente dirigida a Parlamentarios y al Gobierno, para terminar “con el régimen de facto del vigente modelo forestal y finiquitar los subsidios para plantaciones de monocultivos de especies exóticas como el pino y el eucaliptus, a toda escala”.
A continuación, la declaración completa:
Las organizaciones, ante los diversos impactos causados por las forestales, con una extensión en más de tres millones de hectáreas en el centro sur de Chile, señalamos: “Creemos que la institucionalidad pública debe asumir medidas urgentes de reparación a los territorios y sus habitantes, no fomentando más este tipo de plantaciones forestales, sino, políticas que permitan la restauración de ecosistemas con el fomento de especies nativas, con biodiversidad y el fomento de actividades económicas productivas de acuerdo a los intereses y necesidades de las poblaciones locales, atendiendo a su vez, prácticas tradicionales cuya base sea el buen vivir y el bienestar social, revitalizando la vida rural y el respeto a los derechos humanos”.
Cabe señalar que si bien, desde el año 2012 – 2013 el Decreto Ley 701 se ha mantenido estancado, y no ha podido ser prorrogado a pesar de diversos intentos del gobierno de Piñera y ahora Bachelet, en medio de una amplia crítica de los movimientos sociales, comunidades y sectores campesinos, lamentamos que de todas formas, se mantenga vigente la aplicación de los subsidios, destinado presupuesto especial para ello y que está vigente este 2016, recordando que en noviembre del 2015, el Senado aprobó la destinación de recursos a subsidios vinculados al DL 701.
Uno de los hechos de escándalo vinculado a las empresas forestales, son los diversos actos de corrupción y colusión que han sido denunciados, donde ha existido un actuar escandaloso por parte de operadores políticos al interior del Congreso de la República a favor de los subsidios y el Decreto Ley 701 en su historial de prorrogas, razón por la cual, se exige para que corporativamente, de una vez por todas, el Congreso y el Gobierno, velen por el interés colectivo, se vele por el cuidado de los territorios, se vele por el presente y futuro y no por el interés de grupúsculos. Esto no es una contienda ideológica, es sentido común, por el bienestar de todos y de todas en medio de tanta decadencia.
A continuación, se extiende declaración pública, suscrita por más de una treintena de organizaciones sociales, la cual agradecemos su consideración:
Declaración Pública: Organizaciones exigen liquidar decreto de fomento forestal y fin a los subsidios
Las organizaciones que suscribimos la presente declaración, en el marco del día internacional contra los monocultivos forestales, emplazamos a la institucionalidad pública del Estado Chileno, tanto ejecutivo como legislativo, exigiendo la liquidación definitiva de la normativa fáctica Decreto Ley 701 y el fin a los subsidios para el fomento de monocultivos de plantaciones exóticas como los pinos y los eucaliptus, en todo orden y escala, como medida urgente a favor del interés y bienestar colectivo, como freno a la devastación de territorios, principalmente de la zona centro sur de Chile, y como medida para terminar con los saqueos y actos de corrupción – colusión entre sectores empresariales y políticos.
Nuevamente ciertos sectores políticos y empresariales intentan dar prorroga vía legislativa a este nefasto Decreto Ley, bajo el pretexto de dar supuestos beneficios a pequeños y medianos propietarios, con la excusa de que no se privilegiarán a empresarios involucrados en políticas de corrupción y colusión, sin atender las consecuencias de lo que significa seguir expandiendo monocultivos de plantaciones forestales, sin asumir los graves costos que este modelo industrial extractivista y neoliberal ha generado a amplias zonas y sin señalar, que de todas formas, seguirán siendo las grandes empresas las beneficiadas con estas medidas, anexando estos terrenos a sus intereses, trasladando riesgos y consecuencias a pequeños y medianos campesinos, agricultores y comunidades, manteniendo las grandes empresas el poder adquisitivo de las cosechas y los precios del mercado nacional, continuando a su vez, con la desaparición de la vida rural, intensificando las crisis hídricas y una mayor eliminación de actividades productivas locales.
Es inconcebible que a más de 40 años de la política de fomento forestal a través del DL 701, con todos los privilegios, beneficios y ventajas que otorgó a los principales grupos económicos de Chile, con arcas públicas de todos y de todas, se siga pensando en su prórroga. La única explicación, son las vigentes prácticas anti democráticas y de violación a los derechos humanos, arraigada en grupos de poder económico en contubernio con sectores de poder político y que vía corrupción, a través de pagos de favores legislativos por medio de financiamientos de campañas electorales o de pagos mercenarios a agentes públicos a favor de lo privado, siga predominando en estos días y que ha involucrado a políticos de partidos de la Nueva Mayoría y de Chile Vamos.
El origen del Decreto de Ley 701 es de una historia nefasta y perversa, como parte de uno de los principales instrumentos de la dictadura militar a favor de dos grupos económicos complacientes a su régimen, modelo que se extendió y masificó por varias regiones del centro sur de Chile, por zonas desde el Maule hasta Chiloé.
Cabe consignar que las empresas que mayor beneficio estatal han tenido desde la dictadura hasta la fecha, son: Forestal Mininco CMPC (Grupo Matte) con más de setecientas cincuenta mil hectáreas de terrenos forestados; y Forestal Arauco – Celco (Angelini) con un millón doscientas mil hectáreas, que representan el 70 % de la industria, estimándose que en el centro sur de Chile, hay tres millones de hectáreas de plantaciones de monocultivos de pinos y eucaliptus, las que han introducido contaminantes plantas de celulosa – papeleras en amplias zonas del Maule, Bio Bio, Araucanía y Los Ríos, pertenecientes a estos dos grupos económicos.
Son incalculables los impactos generados por esta industria neoliberal. De acuerdo a antecedentes públicos de la misma CONAF, institución pública que al igual que INFOR que han actuado a favor de los intereses empresariales, da cuenta de la pérdida progresiva de bosque nativo y terrenos agrícolas. En La Región del BíoBío, entre 1998 y 2008, 147.814 hectáreas pasaron de ser agrícolas a ser plantaciones forestales y 8.793 hectáreas pasaron de ser bosque nativo a ser plantaciones forestales. En La Región de La Araucanía, entre 1993 y2007, 116.388 hectáreas pasaron de ser agrícolas a ser plantaciones forestales y 29.636 hectáreas pasaron de ser bosque nativo a ser plantaciones forestales. En La Región de Los Ríos, entre 1998 y 2006, 20.121,6 hectáreas pasaron de ser bosque nativo a ser plantaciones forestales. Estos hechos, que son una muestra, afectan gravemente a la soberanía alimentara, medicinal y a los ecosistemas de los territorios.
A modo de ejemplo y considerando la grave presión que hacen las especies exóticas de monocultivos a las fuentes hídricas, las que generan verdaderos desiertos en los territorios, sólo en la Araucanía, según datos de la ONEMI y de los municipios, hay 100.000 personas sin este vital elemento a quienes se les distribuye agua en camiones aljibes y se estima, que en los últimos 40 años, se han perdido en esta región más de 300.000 hectáreas de bosque nativo, situaciones muy similares en regiones del Maule, Bio Bio y zonas de Los Ríos, que son signos de la devastación territorial generada, que va de la mano con el progresivo desplazamiento de la población rural.
Al respecto, creemos que la institucionalidad pública debe asumir medidas urgentes de reparación a los territorios y sus habitantes, no fomentando más este tipo de plantaciones forestales, sino, políticas que permitan la restauración de ecosistemas con el fomento de especies nativas, con biodiversidad y el fomento de actividades económicas productivas de acuerdo a los intereses y necesidades de las poblaciones locales, atendiendo a su vez, prácticas tradicionales cuya base sea el buen vivir y el bienestar social, revitalizando la vida rural y el respeto a los derechos humanos.
Movimiento por la defensa y recuperación de los territorios, macro zona centro sur
Observatorio Latinoamericano de Conflictos Ambientales
Red por la Defensa de los Territorios, Región de la Araucanía
Lof Mapu Trankura, Curarrehue
Colectivo Leña Seca de Villarrica
Colectivo Shumpall, Villarrica
Asociación Mapuche Ayun Mapu, Quepe
Parlamento Mapuche de Koz Koz
Comunidad de Historia Mapuche
Grupo de Trabajo Mapuche por Derechos Colectivos
Centro de Documentación Mapuche, Ñuke Mapu
Colectivo VientoSur
Federación de estudiantes de la Universidad de la Frontera
Red de Acción por los Derechos Ambientales (RADA)
ObservatorioAguas
Consejo Ecológico de Molina.
Movimiento de Defensa por el acceso al Agua, la Tierra, MODATIMA
Red Metropolitana NO ALTO MAIPO
Red Ambiental Norte – RAN
Red de Acción en Plaguicidas RAP-Chile
Ecoceanos
Colectivo Informativo Mapuexpress
Periódico Mapuche Werken
Voz de Chile
El Muecín Austral
Puelche Comunicaciones
Jornadas de Contrainformación y Propaganda Libertaria Temuco
Radio del Mar
Adhesiones personas miembros organizacionales
Andrés Figueroa Cornejo, periodista profesional y miembro del Congreso de los Pueblos, Capítulo Chile.
Martina Paillacar, periodista, colectivo Mapuexpress
Deyanira Carrasco Carrasco, Presidenta Junta de Vecinos Villa Florencia P.J N° 188, Sector Amanecer, Temuco.
Dasten Julian, Dr. en sociología y académico – Coordinadora Multisectorial
Gonzalo Leiva, Sociólogo, grupo apoyo RDT
Guisella Ximena Leal, trabajadora, grupo apoyo RDT
Manuel Arismendi, periodista, comunicaciones RDT
Jorge Calbucura, Mapuche Documentation Center, Ñuke Mapu