Una gran parte del planeta se destruye debido a que se desencadena la tercera guerra mundial. El catastrófico conflicto se inicia en Asia. El nuevo gobierno de Taiwán desde un comienzo entra en graves conflictos con la China Comunista. No obstante, el principal punto de disputa se produce cuando el gigante asiático continúa con la construcción de bases militares en el mar del sur de China. Vietnam, Singapur, Malasia, Indonesia, Filipinas y Japón, reclaman violentamente esta nueva agresión china y movilizan sus flotas navales con el fin de destruir las nuevas bases construidas por los chinos. Taiwán se une a la coalición anti China.
En respuesta el gigante asiático bombardea y destruye bases militares taiwanesas. Taiwán pide ayuda a su aliado estadounidense. Bombarderos estadounidenses estacionados en Guam y otras bases militares destruyen bases chinas ubicadas en su territorio continental. China responde lanzando varios cohetes nucleares hacia Estados Unidos. Corea del Norte, Rusia, Irán y Pakistán rápidamente forman una coalición militar con China, y los Estados Unidos reciben el apoyo de Japón, Corea del Sur, Australia y Europa Occidental. De esta forma el conflicto se transforma en la tercera guerra mundial.
A causa de este devastador intercambio nuclear, todos los actores principales son destruidos. La contaminación y radiación nuclear invade a todo el planeta y así mueren miles de millones de personas. La única región que no sufre la contaminación radioactiva es la Patagonia. El centro de altas presiones existentes entre Perú y Chile y que crea una gigantesca barrera que para los vientos que llegan del hemisferio norte y crea así el desierto de Atacama en Chile (el desierto más seco del planeta), y el altiplano boliviano y argentino. De esta forma, las nubes nucleares que logran pasar esta barrera de altas presiones sólo llegan hasta Concepción por el lado chileno y hasta la altura de Bahía Blanca por el lado argentino. Es debido a este fenómeno climático que la Patagonia tanto en Chile como en Argentina, queda libre de contaminación nuclear. Es en este territorio donde se reinicia la civilización humana.
¿Cómo se puede explicar esta nueva y gigantesca catástrofe planetaria?
La tragedia bélica mundial tiene su origen principal en una nueva y fatal previa catástrofe económica. El corrupto capitalismo neo liberal fracasó totalmente en sus inútiles esfuerzos por resolver los problemas causados por la gran recesión del año 2007 – 2008. Los corruptos “capitales golondrina” que abandonaron los Estados Unidos cuando explotó la burbuja inmobiliaria en el año 2007; entraron a Europa y ahí posteriormente arruinaron a Irlanda, Portugal, España, Italia y particularmente a Grecia entre los años 2009 – 2013. Cuando explotó la burbuja inmobiliaria del sur de Europa, estos capitales golondrina que sólo buscan el lucro se trasladaron a los países emergentes y también hacia la nueva industria del petróleo de esquisto (fraking) en los Estados Unidos. En el año 2014 se dio inicio a la crisis económica de los países emergentes. China empezó su proceso de cambio de modelo productivo. De país importador de materias primas y exportador de productos industriales empezó a cambiar a un país donde el principal motor de crecimiento pasaría a ser el consumo interno. Como consecuencia de este enorme cambio, el crecimiento económico chino se empezó a desacelerar y pasó de un promedio de crecimiento del 10% por año en los años anteriores a 2013 a menos del 7% en el año 2015. El capital golondrina empezó a salir no sólo de China, sino también de Rusia, Europa del este, India, África y América Latina. Parte de este capital golondrina se invirtió en la industria del petróleo de esquisto en los Estados Unidos. Es necesario señalar que estas enormes inversiones hechas en los Estados Unidos en los últimos años, aumentaron la producción de petróleo de este país de 5 millones de barriles diarios en 2010 a más de 10 millones de barriles diarios en el año 2014. Todo esto produjo eventualmente, la caída del precio del petróleo de más de 110 dólares el barril a mediados del año 2014 a menos de 30 dólares el barril a comienzos del año 2016.
La caída del precio del petróleo se hizo más profunda cuando los países de la OPEP en vez de cortar su producción petrolera, decidieron aumentarla con el fin de arruinar a los productores petroleros de alto costo, particularmente aquellos del mar del norte, Canadá y muy especialmente el petróleo de esquisto o fraking de los Estados Unidos. La estrategia de la OPEP empezó a dar sus resultados y así la producción petrolera de Estados Unidos, cayó de 10 millones de barriles diarios del 2014 a sólo 8 millones de barriles diarios en el 2015. En el primer semestre del 2016 la burbuja petrolera de Estados Unidos finalmente explotó de la misma forma como 8 años antes había explotado la burbuja inmobiliaria. Pero ahora, decenas de bancos quebraron, ya que la industria del esquisto no pudo cancelar sus gigantescas deudas. Además, los bonos creados en base a la deuda petrolera, igualmente entraron en bancarrota; y así la catástrofe económica fue mucho mayor que la catástrofe provocada por la gran recesión.[i] Esta vez el gobierno federal no pudo hacer el salvataje de los años 2007 – 2008. En otras palabras, la Reserva Federal no pudo hacer el “quantitative easing” que salvó a los bancos durante la gran recesión. De esta forma, ahora la gran recesión se convirtió en una gran depresión. Esta catástrofe económica fue peor que la de 1929, y ella arruinó las posibilidades electorales del partido demócrata y fue así como Donald Trump fue electo presidente a finales del 2016. El presidente Trump rápidamente adoptó el año 2017 una política altamente intervencionista en la economía. En esto siguió muy de cerca las medidas keynesianas utilizadas por el presidente Franklin Delano Roosevelt para salir de la gran depresión de 1929. Trump puso al Estado a implementar un gigantesco programa de obras públicas destinado a renovar carreteras, puentes, aeropuertos, instalaciones portuarias y un gigantesco programa de viviendas populares. Simultáneamente, Trump adoptó una política proteccionista que le creó graves problemas con China, India y el resto de los países emergente. Se inició así una devastadora guerra económica.
Con líderes voluntariosos y agresivos tales como Putin en Rusia, Xi en China, Modi en India, Lula en Brasil y Trump en los Estados Unidos, era solo natural que los conflictos diplomáticos eventualmente se transformaran en peligrosísimos conflictos bélicos, con lo que el planeta volvió a revivir los peligrosos años que antecedieron a la primera guerra mundial. De esta forma, la segunda globalización liberal iniciada en 1980 por los Estados Unidos, terminó de la misma forma que la primera globalización liberal iniciada por el imperio británico a mediados del siglo XIX y que colapsó en 1914 con el inicio de la primera guerra mundial.
[i]La explosión de la burbuja del petróleo se vio inmensamente agravada por le explosión de otra gran burbuja. Esta crisis fue provocada por la venta masiva de bonos y acciones de los jubilados que cumplían 70 años de edad en el año 2016. La ley de pensiones ERISA señala que al cumplir 70 años los jubilados por el nuevo sistema de pensiones llamado Contribuciones Definidas o CD, deben pagar los impuestos al fisco. Más de 5 millones de jubilados cumplieron 70 años el 2016 y por lo tanto debieron pagar sus impuestos retroactivos. Los jubilados descubrieron con pavor que sus jubilaciones CD eran mucho menores de lo que ellos esperaban y por lo tanto, no podían pagar sus impuestos con los magros ingresos recibidos, producto de sus pensiones. Por lo tanto, estos jubilados debieron vender bonos y acciones, incluidos en sus respectivos fondos de pensiones, a fin de pagar los impuestos en referencia. La cantidad de jubilados que debieron pagar impuestos retroactivos aumentaron en forma exponencial el año 2017. Esto determinó que se produjeran ventas masivas de bonos y acciones y ello a su vez, produjo el desplome de los mercados bursátiles. La crisis de las jubilaciones fue anticipada por Donald Trump en varios de los libros escritos por él y sus asociados en los últimos 15 años.
F. Duque Ph.D.
Cientista Político
San Salvador, 29 de enero de 2016