Decenas de inmigrantes cubanos siguen llegando a la zona fronteriza costarricense de Paso Canoas, limítrofe con Panamá, pese a la situación imperante en la frontera con Nicaragua, informaron hoy fuentes oficiales.
La dirección de Migración dijo a DPA que hasta el miércoles había otorgado, en el lapso de dos semanas, al menos 3.569 visas temporales.
En varios puntos de la frontera norte, que colinda con Nicaragua, se encuentran varados unos 3.000 ciudadanos cubanos, que claman por que se les deje pasar para proseguir su travesía hacia Estados Unidos, donde reciben facilidades migratorias.
El Gobierno de Costa Rica reiteró este jueves que seguirá, por razones “humanitarias”, otorgando visados temporales a los inmigrantes cubanos que arriben a la frontera de Paso Canoas.
El martes, una reunión del Sistema de Integración Centroamericana (SICA), a la que fueron invitados México, Cuba, Colombia y Ecuador, fracasó en un intento por buscar una salida a la crisis migratoria.
El drama de los emigrantes procedentes de Cuba salió a flote en las últimas tres semanas en Costa Rica, después de que este país desmantelara una banda dedicada a lucrar con el tráfico de personas.
Cientos de cubanos que se habían conectado con el grupo quedaron a la deriva tras salir de Ecuador, país que no exige visados a ciudadanos de Cuba.
Estos inmigrantes, que partieron legalmente de su país, abandonan Ecuador, pasan por Colombia, Panamá, Costa Rica, el resto de Centroamérica y México, para tratar de alcanzar Estados Unidos, su destino final.