Al finalizar la marcha pacífica de los miles de estudiantes de enseñanza media cambió su carácter de tranquilidad debido a la intervención represiva de las fuerzas especiales de Carabineros quienes utilizando el carro lanzaguas y los gases lacrimógenos hostigaron con violencia a los millares de manifestantes que se congregaban en las cercanías del ministerio de Educación.
En la práctica más que medidas preventivas de parte de la policía uniformada para evitar que se produzcan desórdenes públicos carabineros atacó a los estudiantes que se encontraban ocupando parte de la Alameda Bernardo O´Higgins esquina Manuel Rodríguez y otras esquinas cercanas al Mineduc.
Un hecho que caldeó los ánimos esta mañana tiene que ver con el anuncio del Gobierno de que iba a colocar carabineros de civil en medio de la marcha de los escolares. En este sentido en algunos puntos del centro de la capital se pudo ver a jóvenes con mochilas que conversaban con efectivos de carabineros.
De esta manera, la represión policial se detenía por algunos minutos y luego se atacaba de nuevo a los jóvenes que se encontraban en el sector de la Plaza Los Héroes, quienes por esto se vieron impedidos de desplazarse, por largo rato, fuera del perímetro que estableció la policía a través del fuerte operativo represivo.
Esta mañana los secundarios llevaron a cabo una multitudinaria marcha por las calles del centro de Santiago para insistir en sus demandas a las autoridades del sector. Las movilizaciones ocurren en el marco de una reunión entre los dirigentes de los estudiantes y el titular de Educación, Joaquín Lavín.
La manifestación fue organizada por la Agrupación Coordinadora de Estudiantes Secundarios (Aces) y la Federación Metropolitana de Estudiantes Secundarios (Femes) que demandan, entre otras medidas, estatizar los colegios municipales, mayores recursos, mejoramiento de la infraestructura de los recintos educacionales, elevar el nivel de los liceos técnico profesionales y la ampliación en el uso de la Tarjeta Nacional Estudiantil (
Previo al inicio de la manifestación, uno de sus voceros y la Intendencia Metropolitana se concentraron en reforzar respectivamente demandas y advertencias ante eventuales desmanes como los registrados en marchas anteriores.
El titular de Educación se reunió con los dirigentes estudiantiles aunque no estaba previsto, antes de que empezara la marcha de los jóvenes. La autoridad educativa entregó varias alternativas incluso la posibilidad de inyectar recursos a los colegios.
Así, Lavín entregó una respuesta a la carta-petitoriio que habían entregado los estudiantes agrupados en la Femes y en la Aces, pero no a la totalidad de las demandas de los escolares.
En el primer punto la respuesta de la autoridad se refiere a las alternativas de la municipalización donde se ofrece presentar un proyecto antes del 30 de septiembre para buscar opciones a la municipalización lo que no significa finalizar con este modelo educativo.
Respecto a la Tarjeta Nacional Estudiantil (
Además, la educación técnica-profesional donde hay varios temas por abordar como las condiciones en que se realizan las prácticas profesionales, el equipamiento, la vinculación con actividades productivas y las carreras que se imparten.
Sin embargo, Diego Mellado, presidente del centro de alumnos del Internado Nacional Barros Arana (INBA) dijo que no se entregaba una respuesta favorable a la petición de estatización de la educación.
En tanto, Freddy Fuentes, dirigente de la Federación Metropolitana de Estudiantes Secundarios (FEMES), quien estuvo en la cita de esta mañana con Lavín, señaló a la salida del encuentro: “El ministro nos dió la respuesta a nuestras demandas, pero no se si es lo que esperamos, fue un poco más específico respecto a lo que es una mesa de trabajo ya a nivel nacional”.
En concreto, las propuestas del ministro no dejaron del todo conformes a los representantes de los distintos establecimientos, pero señalaron que analizarían los distintos aspectos junto a todo el alumnado para luego tomar una decisión, no obstante, descartaron poner término a las movilizaciones.
Finalmente, Diego Mellado cifró en 500 los colegios que permanecen tomados como forma de exigir una respuesta satisfactoria a su petitorio.