Noviembre 18, 2024

Peregrinaje a El Salvador: un viaje por la memoria, la pasión y los sueños

Los fenómenos culturales de masas con factores que se dan alrededor de todo el mundo afectan a todas las poblaciones. Hay muchos fenómenos culturales de masas, sin embargo no todos han marcado considerablemente los comportamientos sociales de las poblaciones como lo han hecho la moda, la política, el consumismo, la música, y el deporte, como fútbol.

 

 

Además de ser un fenómeno cultural de masas, es el deporte más popular del mundo, con más de 250 millones de seguidores, y posee una gran capacidad para influenciar a las personas en muchos ámbitos porque los medios de comunicación masiva se encargan de difundirlo constantemente con mensajes de todo tipo, y sobre todo hacia la población de los jóvenes, donde las hazañas de un futbolista son comparables a las de un héroe nacional.

 

Aunque muchas naciones reivindican la invención del fútbol (italianos, franceses y otros) es indudable que Inglaterra lo vio nacer, al menos bajo su forma moderna. El nombre aparece a fines de la Edad Media y se lo encuentra bajo la pluma de Shakespeare (en el Rey Lear, I, 4, el conde de Kent insulta al odioso intendente, tratándolo de “vil jugador de football”, antes de hacerle una zancadilla).

 

En el siglo XIX se desarrolla en las escuelas públicas y en las universidades siendo el pasatiempo favorito de la aristocracia. Pero, paulatinamente se irá haciendo más masivo y en 1857 se crea el primer club, el Sheffield Football Club y en 1863 se creó la federación inglesa, bajo el nombre de Football Association y su auge fue exponencial.

 

El fútbol, convertido en el deporte más popular del planeta, fue muy pronto una apuesta nacional, política e ideológica. Un ejemplo de esto se dio en España, en los años de la dictadura de Franco. Los estadios, el Camp Nou de Barcelona y el San Mamés de Bilbao, sirvieron de refugio a los sentimientos nacionales prohibidos. Allí los catalanes y vascos gritaban y cantaban en sus lenguas y agitaban sus estandartes clandestinos. Además, para los catalanes, el Barcelona es “más que un club”: es un símbolo de la larga lucha por la afirmación nacional en contra el centralismo de Madrid.

 

Y la desintegración de Yugoslavia, antes que en la guerra, ocurrió en los campos de fútbol porque los antiguos rencores entre serbios y croatas, emergían a la superficie cada vez que se enfrentaban los clubes de Belgrado y Zagreb. Entonces, las hinchadas revelaban sus pasiones profundas desenterrando banderas y cánticos del pasado como hachas de guerra

 

Lo anterior, porque la camiseta, el himno, y la bandera encarnan tradiciones entrañables, que se expresan en las canchas de fútbol pero vienen de lo más profundo de la historia común de una sociedad.

 

Según el profesor de la cátedra de filosofía y trabajo social de la Universidad de las Islas Baleares en su ensayo “La mass-mediatización del deporte” explica que “el partido de futbol, puede derivar en complejos mecanismos de control, como la manipulación, la persuasión, las cortinas de humo, las válvulas de escape e incluso la confrontación.

 

Esa pasión es descrita en el libro “Peregrinaje a El Salvador” escrito por el periodista Gustavo Villafranca Cobelli y publicado por Edición Digital hace un tiempo.

 

Gustavo Villafranca describe en este libro como el 18 de diciembre de 1994 y tras 25 temporadas sin obtener un título, el equipo de fútbol Universidad de Chile obtiene el campeonato de ese año luego de enfrentarse a Cobresal.

 

El libro está escrito desde la perspectiva del hincha, en el cual se mezcla el sufrimiento, la angustia y la frustración por los años de fracaso de su equipo con las vivencias personales, con los recuerdos de la época, con la descripción de jugadores y la revisión de una reñida disputa fecha a fecha contra la poderosa UC de Alberto Acosta y Néstor Gorosito.

 

En el libro, se pueden encontrar todos los partidos de esa temporada (incluyendo los amistosos), tablas de posiciones, goleadores y plantel campeón, además de que el registro fotográfico de cada uno de los integrantes del equipo partícipes del logro, se convierte en un anexo imperdible para coronar un relato emotivo dedicado con especial cariño a todos los hinchas de la “U” que sufrieron por esa larga sequía de títulos.

 

Además, el libro se convierte en un recordatorio de los nombres de los futbolistas de la U como Luis Musrri, Fabián Guevara, Patricio Mardones, Ronald Fuentes, Sergio Vargas, Cristián y Víctor Hugo Castañeda entre muchos otros que construyeron ese triunfo.

 

Al fin y al cabo, el fútbol se trata de una construcción de sueños con una carga de símbolos. Un espectáculo, una fiesta que produce pasión y disfrute donde unos actúan y otros ven; lleno de expectativas donde al menos, por un instante, se puede tocar el cielo.

Pero hay que tener claro que la ensoñación es finita, que sólo dura hasta el pitazo final.

 

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