Una mano lava la otra y las dos lavan la cara. Al son de este himno solidario se han reunido en Santiago las mujeres de dos golpistas sometidos a proceso en Venezuela y los ex presidentes de Chile Piñera Lagos y Frei. El abrazo fraterno entre el golpismo y la corrupción.
En Venezuela existe un gobierno producto de elecciones libres y democráticas que ejerce funciones en el marco de una constitución votada y aprobada por lo venezolanos. Es tan democrática esa constitución que establece el referéndum revocatorio que permite dejar sin efecto el mandato del presidente de la república en referéndum popular. La derecha y sus dirigentes reales (los norteamericanos) lo ha intentado y han fracasado; el pueblo venezolano confirmó al presidente Chávez en la primera magistratura.
Quien pretenda derrocar por la fuerza a autoridades de estas características exponiendo a su país a una guerra civil debe ir a la cárcel y ser sometidos a proceso. Eso es lo que sucedió con los cónyuges de nuestras visitantes. La sedición es un delito en todas las legislaciones del mundo.
Alegan que llevan un año en prisión, el plazo para ser sometidos a juicio son dos años por lo cual no hay infracción de normas jurídicas. Los propios encarcelados se niegan a ir al tribunal.
La Democracia Cristiana chilena, cuyo presidente electo Jorge Pizarro está metido hasta el cuello en el escándalo de corrupción de Soquimich y cuyo líder histórico Eduardo Frei en Chile justificó el golpe de estado en vergonzosa y mendaz carta a Mariano Rumor, ha corrido a acoger a las mujeres de los “perseguidos”.
Asume la tarea el ex presidente Eduardo Frei que tiene la responsabilidad histórica de la impunidad de Pinochet y una estatura moral insignificante, pues ha puesto por delante sus intereses políticos antes que aclarar el asesinato de su padre por la dictadura militar. Frei, que regaló las joyas familiares en apoyo a Pinochet.
Han acompañado a esta vergüenza de la república de Chile los ex presidentes Piñera y Lagos, en cuyas biografías, si alguien tiene el interés de escribirlas, no podrán dejar de mencionarse los escándalos de corrupción de MOP-GATE y Banco de Talca.
En cuanto a coherencia política ninguno de los participantes participantes tienen mácula alguna.
Ricardo Lagos es un teledirigido por los norteamericanos que son los grandes instigadores del golpe de estado en Venezuela.
La CIA está probado que históricamente actuó en España dividiendo al PSOE y de consuno acuerdo con las autoridades de la dictadura permitió que se hiciera un congreso “ socialista” en Madrid (1975) que legitimó a Felipe González, gran amigo de Lagos, cómo no. A ese Congreso asistió Mitterrand, Brandt, Palme y Carlos Altamirano. Ese es el inicio real de la renovación socialista. Al poco tiempo Altamirano abandonó con sus seguidores la República Democrática Alemana.
Esa renovación socialista, creación norteamericana, se incubó en EEUU con Waldo Fortín, Juan Gabriel Valdés y Orlando Letelier. Era la salida de gobierno de los americanos. Ricardo Lagos luego del golpe recibió una beca para una universidad norteamericana. Más claro echarle agua.
Toda la casta política chilena baila al son de la música que ponen los norteamericanos.
Golpistas y corruptos posan sonrientes a sus espaldas van los hilos que llegan a las manos del tìo Sam que hace bailar sus marionetas.
Baila pepito baila.
ROBERTO AVILA TOLEDO