La comunidad de Caimanes manifiesta que el ecocidio provocado por la minera Los Pelambres en la zona responde a la impunidad con que reina el Grupo Luksic en Chile. El pueblo de Caimanes ubicado a 35 kilómetros de Los Vilos, en el Valle de Pupío, sigue viviendo la incertidumbre al no saber porqué, pese a los fallos judiciales a su favor, estos no se cumplan en sus territorios. Es por ello que permanece movilizado en espera del cumplimiento del fallo judicial.
Desde hace años tres años que el entonces Juez Sergio Muñoz Gajardo, hoy Presidente del Poder Judicial, ordenó que las autoridades sectoriales de la Región de Coquimbo, pusieran a la brevedad a resguardo a la población mediante un plan preventivo de contingencias dada las pruebas fundadas de la peligrosidad tanto de precariedad de la obra para efectos sísmicos y por otro lado por la contaminación que genera el mega tranque de relave El Mauro.
Por otro lado tenemos a las autoridades de los últimos gobiernos, que dicen basándose en sus estudios, que la población no tiene nada que temer, que el tranque es seguro, y que las aguas está sin problemas.
Lo cierto es que la génesis del conflicto, y como claramente se constata en los archivos de prensa del año 2002, que acusan presiones de facto a la COREMA en la Región de Coquimbo, para la aprobación de este proyecto del Grupo Luksic, y estas presiones eran nada menos que del propio presidente de la época Ricardo Lagos Escobar, quien incluso realizó sobrevuelo sobre la zona de El Mauro y Caimanes.
Transcurrido 14 años, en que los fallos en contra de la Minera Los Pelambres se van sumando, con cientos de datos, muchos de ellos que no trascienden más allá de los expedientes judiciales, a causa de lo poco riguroso de la prensa, que no ahonda en el fondo del problema, sino más bien, es complaciente a supeditarse a los comunicados de la empresa sin cuestionarlos.
Pero la realidad demuestra que claramente la Corte Suprema no se equivocó cuando calificó en sus inicios al tranque de relave El Mauro como una obra lesiva, al cual otros procesos judiciales suman juicios. Además, dijo, es una obra ruinosa que pone en peligro la vida de miles de personas, al ser construida bajo los parámetros de resistencia sísmica históricos en el país. Debería haber sido construido para resistir un terremoto 9,5 Richter, pero el Mauro sólo resiste un terremoto grado 7,5 Richter in situ, según datos aportados por la propia minera y que constan en el expediente pericial en tribunal de Los Vilos.
Pese a esto, hasta hoy el tranque sigue funcionando en completa impunidad, se siguen depositando diariamente 175 mil toneladas de relave en circunstancia que está diseñado para resistir un depósito diario de 120 mil, haciéndolo cada día más peligroso. Las autoridades regionales en la persona de la Intendenta de la Región de Coquimbo, Hanne Utreras ha declarado que si bien el gobierno respeta los fallos, y la presidenta Michelle Bachelet está preocupada por la situación, el gobierno no desconoce que la minería representa el 40% del PIB regional.
Un evidencia documentada
Alfonso Ossandón documentalista de Casa Bolívar Chile y activista ambiental que ha seguido muy de cerca el proceso de lucha del pueblo de Caimanes y que en los próximos días parte a Caracas a presentar este caso y otros temas en reunión con comunicadores de movimientos sociales articulados en la Coordinadora continental ALBA Movimientos y TeleSur, declara:
“Los gobiernos y las mineras en Chile, hoy por hoy conforman un cártel peligroso, que de no informarnos ahora y poner un alto a su colusión de intereses, llegaremos a realidades como las de México y Colombia. De hecho Chile es socio de estos países que permean el estado de derecho con impunidad… el foco del trabajo que me ha tocado realizar en lo particular ha sido plasmar audiovisualmente el impacto de la mega minería en Chile en pequeñas comunidades. Hoy existen localidades como Caimanes, en donde la mano de la corrupción abierta y a destajo de la colusión entre los gobiernos de turno y el poder transnacional ha llevado a miles de personas a vivir bajo riesgo y sus fuentes de aguas usurpadas y otras contaminadas”…
El Comité de Defensa de Caimanes, en la voz de su vocero Cristian Flores, plantea que
“los fallos reconocen la contaminación en nuestros territorios, y de la cual las diversas administraciones de gobierno de los últimos años han negado dichos efectos. Durante apróximandamente 6 años de proceso judicial, hemos puesto en conocimiento de la justicia chilena el sentir y malestar y las pruebas en las cuales acreditamos el perjuicio que nos ha significado la puesta en marcha de la construcción de este tranque de relaves, el cual ha traído ruina y pérdida total del patrimonio de nuestras aguas, que afecta a la fuente de trabajo principalmente en la agricultura y ganadería, sin contar con todo el daño moral y social acarreado a nuestras familias.
Hace un mes el máximo tribunal se ha pronunciado, por tanto instamos también a todos las comunidades organizadas a tomar nota, pues lo que hemos vivido como comunidad, demuestra que las autoridades chilenas principalmente de la Región de Coquimbo, han sido benevolentes con esta empresa que cada día demuestra malas prácticas en su actuar, y no duda en violentar inclusive el marco constitucional, permeando el estado de derecho a vista y paciencia de quienes deben velar por el bien común.
Nuestra comunidad, dice Flores, permanecerá movilizada y atenta a que se cumpla la sentencia de este fallo que está en coherencia con otros dictámenes de justicia en curso, y que nos ampara para resguardar nuestros derechos y la vida de todos y todas quienes vivimos en el Valle de Pupío.