La Corte de Apelaciones de Santiago dictó sentencia de segunda instancia en la investigación por el secuestro calificado de Ruth María Escobar Salinas, ilícito perpetrado a partir del 30 de junio de 1974, y cuyo rastro se pierde en el centro de detención clandestina de Londres 38.
En fallo unánime, la Quinta Sala del tribunal de alzada -integrada por los ministros Juan Escobar, Marisol Rojas y el abogado José Luis López- ratificó la sentencia de primera instancia que condenó a los agentes de la DINA: Juan Manuel Guillermo Contreras Sepúlveda y Marcelo Luis Manuel Moren Brito, a penas efectivas de diez años de presidio, como coautores del delito.
En el aspecto civil, se acogió la demanda de indemnización de perjuicios, condenando solidariamente a Contreras Sepúlveda, Moren Brito y al fisco de Chile a pagar $100.000.000 (cien millones de pesos), más reajustes e intereses, a cada uno de los demandantes: los hermanos de la víctima Gabriel Edgardo y Rodolfo Wladimir Escobar Salinas, por concepto de daño moral.
Según los antecedentes recopilados en el proceso que investigó el ministro Miguel Vázquez, se logró dar “por acreditado que el día 30 de junio de 1974, se dejaron de tener noticias de Ruth Escobar Salinas, debido a que fue detenida por agentes de la DINA, quienes la trasladaron al centro clandestino de detención de aquella organización, ubicado en calle Londres 38, donde se le practicaron interrogatorios bajo tortura, perdiéndose su rastro en dicho lugar; el que era utilizado por los agentes operativos a fin de mantener privados de libertad e interrogar bajo tormento a los militantes del Movimiento de Izquierda Revolucionaria (…)”.