Junto con destacar la convocatoria que tuvo la denominada “marcha de los papás” que congregó a unas 30 mil personas según carabineros y más de cien mil según los organizadores, el senador RN Andrés Allamand hizo un llamado al Gobierno a escuchar “a los miles de alumnos, profesores, apoderados y sostenedores que no están de acuerdo con el proyecto de reforma educacional que cumple su segundo trámite en el Senado”. La llamada de Allamand, que es la de la derecha en su conjunto, se contrapone con sectores de la Nueva Mayoría en el senado. Guido Girardi dijo ayer qque buscará los mecanismos para reponer la sanción penal al lucro.
Allamand, quien integra la Comisión de Educación de la Cámara Alta, manifestó que “vamos a completar el año y el Gobierno no ha hecho ni una sola propuesta para mejorar la calidad de la educación pública y estamos discutiendo un proyecto que lo único que hace es generar obstáculos insalvables para la educación particular subvencionada”.
En tal sentido, dijo que espera que durante la tramitación de la iniciativa “el gobierno reoriente esta reforma que está muy mal planteada”.
Puntualizó que tal como llegó el texto legal “todas las sociedades educacionales se tendrán que transformar en corporaciones y al mismo tiempo les exige a estos 5 mil colegios que sean dueños de los inmuebles y además se les prohíbe arrendarlos. En la práctica, esto significa es que van a salir del sistema todos los colegios que son sociedades educacionales”.
Agregó que “si el gobierno reformula su propuesta de reforma educacional y empezamos a hablar de equidad, calidad, procesos de aprendizaje, de la importancia que tienen que tener los profesores, por su puesto que hay un margen importante para alcanzar un acuerdo”.
Por su parte, el senador Guido Girardi criticó a “los detractores que sin poner ideas sobre la mesa están en una verdadera campaña del terror”.
Asimismo, reiteró su compromiso con el derecho a la educación “que actualmente es un verdadero apartheid entre ricos y pobres. Queremos una educación que habilite a los jóvenes a participar en el siglo XXI, ser sujetos democráticos, con valores y condiciones para participar en la nueva economía que es de contenidos, interactiva, de creatividad. Y la educación que tienen especialmente los niños y jóvenes de escasos recursos no les permite entrar al siglo XXI”.
Afirmó que “esta es la reforma más importante que ha hecho Chile desde la vuelta de la democracia que es establecer la educación como un derecho y no como un bien de consumo. Y que los recursos públicos no tengan lucro porque no deben ir al bolsillo de los empresarios de la educación y que no haya selección, que no se permita discriminar a los niños”.
Para el senador la marcha convocada por la Confederación de Padres y Apoderados de Colegios Particulares Subvencionados “representa, aunque puede haber muchos que lo hacen honestamente, un intento dramático de defender intereses económicos. Este es un movimiento político estimulado por aquellos que quieren mantener en Chile la educación como un negocio y no como un derecho y han convencido a los padres que la gratuidad es sospechosa o mala”.
Agregó que “la educación no puede depender de la capacidad del bolsillo de cada uno. Por eso creo que se debe penalizar el lucro porque todos saben que está prohibido en las universidades pero la gran mayoría lucra porque los desincentivos para castigar el lucro son insuficientes, las sanciones y multas están muy por debajo de las utilidades que obtienen. Por ello soy partidario de reponer la sanción penal al lucro o va a pasar lo mismo”.